CRISTINA FERNÁNDEZ SAÍNZ DE LA MAZA [15.221]

CRISTINA FERNÁNDEZ SAÍNZ DE LA MAZA

Cristina Fernández Sáinz de la Maza (Cantabria 1979) nació cuando cayó la primera nevada conocida en el Sahara y en España se convocaban las primeras elecciones municipales democráticas. Año en el que Salvador Dalí ingresa en la Academia de Bellas Artes y a Teresa de Calcuta le dan el Premio Nobel de la Paz…no es que todos esos acontecimientos marcarán mi vida pero el tenerlos en cuenta definen un poco la época que me tocó vivir. De origen pasiego trovador y naturaleza nómada se ha recorrido la península y un poco más allá del charco entre estudios y trabajos varios entre los que destacan su contacto con la alquimia. Y de esa experiencia como tantos escritores que hicieron uso de ella salen como los licores que ha elaborado la última década los poemas que compone. Sumida en el arte de la transformación realiza ese viaje a través de la esencia, de la luz, del círculo eterno de la vida siempre en constante búsqueda de la verdad embarcada en el sueño real de volver al origen. Entre la magia y la ciencia entiende que la búsqueda de la libertad tan anhelada y tan difícil en estos tiempos,  es la única danza que merece la pena vivir y que la poesía es el medio más libre para expresar esa necesidad, sobre todo si se recita en la calle, algo que la apasiona. La música y la imagen principalmente la pintura y la fotografía también han marcado involuntariamente sus composiciones tanto en prosa como en poesía. Ha vivido en varios puntos de la península, Burgos, Cádiz y actualmente en Galicia. Durante estos últimos años mantiene un intenso contacto con las artes plásticas dedicada especialmente al grabado experimental y la poesía  buscando constantemente el placer fugitivo de la circunstancia fuera de los cánones estéticos de belleza o de fealdad imperantes. Escribe, participa en recitales poéticos en todo el pais y diseña portadas para otros artistas bajo el nombre De La Maza. Autora del poemario “Punto Cero” año 2014.

Agujereó mis arterias

escarbó hasta el límite de la ceguera

como un topo buscando el aire...

se asomó desde el profundo

para sentir el calor del sol

PÁRAMO

Hoy todo cielo estalló entre

fuegos

para ser las voces del

silencio

un páramo que brama

con tu garganta en la 

cumbre

anudando en todo reflejo

en mi ansia de paisaje,

bebo y bebo desde el

horizonte

y soy arrullo del agua.

Bebiendo y bebiendo vida

Vida de la mejor vida

Vida desde tus ojos.

PALABRAS

Injertos de escocidos verbos

atinos y desatinos

escudos del desencuentro

escurridas desde el paladar

de las madrugadas ya vividas.

Las expulsaba del espanto

de no creer.

Las borraba del sentido

de pensar 

que las letras

pueden aliviar el peso

del alma abrumada

que se despoja del cuerpo.

Cuando las letras ya no son

Simplemente suficientes.

IN

INSANO A MIS SUEÑOS

escribir de los miedos

porque conozco la esquina

del despertar sin nadie,

de la voz de las mañanas 

que se acuestan en mi orilla

de los estrenos de ritos

y conciertos de cuerda

y silencio.

Inviable ser fiel a los 

espejos

que acaban devolviendo 

reflejos.

LIBRE

Y AL FINAL DEL DÍA

cuando la oscuridad

de nuestros párpados

se vuelvan a unir, 

te cantaré con el saxo

entre mi lengua

la canción nueva 

de una lechuza

que ha venido 

al vuelo de la noche,

una vez más, un día más

Libre

Punto Cero

Me has arrastrado a ese lugar

simpático

donde compadeces la emoción

donde el pecho se deshace en

éxtasis

catarsis de mis extremos

locura sin fisuras

sin formas 

realidad

punto cero 

8 de diciembre

"No hay mancha que siempre dure, ni culpa que perdonada

deje de ser, si con llanto de contrición fue regada..."

Rosalía de Castro Murguía 

Lo siento amigo mio

a esta hora te digo

que el mundo no es tuyo

¡que el mundo no es tuyo! 

-piensa-

la eternidad no te va a esperar

duermes en las afueras de un corazón

-no olvides- 

que yo sigo siendo sal, hierba y agua

que mis restos están disueltos

en la cresta de una ola

sembrando granos de arena

en lo alto de una montaña

y tu

-no pienses-

porque seguirás siendo aire

atrapando una tormenta,

esperando lo eterno.

Impresiones

Solo la desesperación nos libera,

nos libera de la mentira que llevamos dentro

Sola, nos devuelve a la realidad árida

realidad desnuda de la condición humana

desterrada y ausente de brillo,

nimia.

Solo la desesperación liquida toda quimera 

sin cobardía ante el reflejo de lo que creemos que somos

un reconocimiento de nuestra pequeña mugre

de nuestra ausencia de ruido en una noche de luna llena como ésta

de nuestra impotencia acunada por los vientos 

más comunes.

Búsquedas

Buscar paraísos de sensaciones

misteriosos minerales

energías y texturas entre destellos,

colores de vida

Buscar paraísos entre huellas 

tiempos que discurren

humedades y sudores entre la piel,

arrugas del antes

Buscar paraísos de contemplación

pérdidas entre la belleza

geo, lógica, botánica,

despertares de emoción entre realidades soñadas

Foto: Cristina Fdez Sainz-Maza

Semiótica

Tú,  poesía 

has visto el color de las nubes,

escuchado los cantos de las montañas,

el calor de una puesta de sol, acariciándote 

las voces de los pájaros diciéndote adios,

el movimiento de la tierra cuando caminas,

el sabor del agua sin beberla

-quién sabe-

de los colores de la belleza,

de los cantos del sentimiento más triste,

del calor de la distancia,

de las voces de los amantes,

del movimiento de la palabra no escrita,

del sabor de la alegría,

- habla poesía- 

El cuento de las olas

Cristina Fernández Sainz-Maza (2014)

Las olas cuentan historias

 grabadas en la arena

 cómplices del fondo del mar, 

que guarda nuestros sueños.

 Solo la Luz nos deja ver el mar 

y su profundo museo 

las caras de los seres más libres

 que ponen su voz en las olas,

 para contarnos su historia. 

Vuelo

Cuando vuele te amaré como las aves, 

picotearé cada ojo de tu piel para beber de tu calor

sortearé entre nubes el sudor de tu aliento 

que me separa de tu boca y deshace mi aleteo en tu espalda

sosteniéndome… 

y así retomaré el sendero de mis alas hasta tu sonrisa.

No dudaré en mostrarte los senos y los sinos 

más recónditos de mi cuerpo entre las olas del viento,

al fin y al cabo ya los conoces de antes y por eso los alimentas

en tu nido...

para que no se extravíen en el olvido del ayer .

Me limitaré entre tus rodillas apretadas 

inundando todos los sentidos que me pertenecen 

por ser estos los que tu rebosas cegando mis ojos en un instante.

En un vuelo inventaré el amor como los magos…

como las magas te susurraré todos los silencios, 

inhalaciones de palabras ausentes 

que atraviesan mi garganta a bocajarro para sentir 

sensación de lava en mi esencia

derritiéndome hasta la sien, que se funde con tu seso.

Volando, te amaré con la intención del beso de los cisnes

saboreando la posibilidad del encuentro lento de un pingüino

acariciando la espera del aire del albatros a tu vista…a la vista del agua

con la alegría absoluta de un ganso per se…

Y al final del día, cuando la oscuridad de nuestros párpados

se vuelvan a unir, te cantaré con el saxo entre mi lengua

la canción nueva de una lechuza 

que ha venido al vuelo de la noche,

una vez más…un día más. 

Video Punto Cero

Qué dura la labor del autodidacta, pero con dedicación de tiempo se pueden conseguir resultados agradables. He creado un video que si bien las imágenes no están incluidas en el poemario, representan una parte de su sentido. En ellas he incluido algunos versos de Punto Cero.

Atravesar la puerta

Atravesar y entrar
Yo quiero entrar y atravesar
esta puerta  azul degradada
fruto de la exclusión
¿Y què pasa si estoy dentro
Y ahora quiero salir?
Salir o entrar...incluirme o excluirme
Enredarme y pegarme como una 
como una hiedra trepadora
que es lo que queda
¿Lo que nos queda?
Siempre queriendo entrar o salir
saltando  la barrera obligada,
del desahucio siempre en primavera
Hiedra de escalar quiero saber
dónde esperas para atravesar 
la puerta.

Foto: Cristina Fdez Sainz-Maza

Entre dos agujas

No viviré entre dos agujas siempre
Viviré entre dos flores
entre dos prados verdes 
Viviré en la madriguera 
llena de algodones blancos
durmiendo entre los si...
el válido, el único el siguiente siempre
No vivirè entre dos agujas siempre
esperando la pobreza de la muerte
Viviré entre lo útil y lo bello
entre dos cosas pequeñas 
Viviré en el espacio
sin garantía de sombra y de cobijo
sobreviviendo entre el no...
acostumbrado, el único visible siempre.