viernes, 3 de septiembre de 2010

RÉNIA AOUADENE [865]





RÉNIA AOUADENE

Biografía de Rénia Aouadene: Poeta y escritora, originaria de Argelia y la Cabilia, en particular, vive en Marsella.
Profesora de Literatura e Historia.
Estudió Literatura y Civilización hispana y Ciencias de la Educación: Universidad de Aix en Provence

Publicaciones :

-Poésies tirées du recueil Amer…tumes dans la revue Algérie littérature Action aux éditions Marsa
- Nouvelle poésie algérienne [ ed. Marsa]
DESTINEES [Recueil de nouvelles] éd.Marsa



NO LLORES

Cuando al anochecer,
contemplo la Alhambra,
iluminando ya
el barrio Albaizin
con sus cuevas gitanas.
Cuando al anochecer,
el palacio se enciende
sobre una ciudad
llena de maravilla.
Cuando al anochecer,
el silencio atravesa
las cortes, los jardines,
oigo la voz extrana
de la Juana la Loca,
las lagrimas perdidas
del triste Boabdil.
Ultimo rey naziri,
no llores mas ahora !
El viento resucita
a veces por las calles,
recuerdo de un tiempo
siempre, jamas perdido.
No llores Boabdil !
se acabo contigo,
la belleza y el honor,
el respecto y el dolor,
cuando Al-Andalus,
Tierra de los debiles,
Judios y Cristianos,
Musulmanes y Otros,
podian compartir
en un mismo deseo,
la vida y su labor,
la muerte y su sabor,
el amor, desamor.






EL SUSPIRO DEL MORO

El suspiro del moro
sigue corriendo
por la calle de Granada
El suspiro del moro
sigue gritando
por las paredes
del palacio
El suspiro del moro
sigue llamando
con una misma voz
Es el grito del moro
aquel que sigue llorando
el esplendor de Granada !





ELLOS SOLOS SABÍAN

Ellos solos sabian
que la felicidad
no podia atravesar
los cuerpos de los hombres
tan destruidos
de tanto silencio
de tanto sufrimiento.

Querian gozar
de la rebeldia
pero ellos solos sabian
que no era posible.
los potentes quedan potentes
y los debiles, debiles.

Ellos solos sabian
que el amor
no es cosa eterna
y a pesar de la lucha
y a pesar de su fe,
lo posible no es posible,
hay que compartir
el dolor de la cosa perdida.

El mundo sigue siendo
objeto necesario
para créer que la verdad
existe,
pero es demasiado tarde.
ellos solos sabian
lo que nosotros
no sabemos.





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SOBRE LAS CUMBRES

Sobre las cumbres de las colinas
Y por encima del valle,
Un día yo te llevaré.
Volveremos a la fuente
A los países de nuestros antepasados
Por la tierra de los bereberes.
La Kahina nos espera
Su orgullo y su belleza
Nos lleva a pesar de nosotros
Allí donde nuestras raíces crecen

Donde todos los hombres
Curan dolores y fracasos
Del miedo y del exilio.
¡Ven pues el Pintor ayúdame!
Esculpiremos nuestra historia
Para hacer una leyenda
Que nuestros niños transmitirán
Millares de años más lejos.
Comeremos la torta
Beberemos pequeña leche,
El olor de nuestra aceite de olivo
Se mezclara a los olores de las chumberas
Cuya fruta cogeremos
Para saborear allí su jugo.
Al caserío en la montaña
Rodeados de nuestros antepasados
Que bien velarán sobre nosotros
Me volveré esta mujer,
Sobre el lecho de los ancianos
Me haré sensual,
Me haré tu esclava,
Te apropiarás mi cuerpo
Y en ultimo orgasmo
Haremos este gran viaje.
Más allá de estas nubes
Encontraremos consuelo…




ROSA DE LAS ARENAS

Rosa de las arenas
que se impregna
de tu calor tórrido

Eres mi Sáhara
soy tu flor ardiente
engullida en tus arenas
movientes

Soy la llama
que ilumina
el reflejo de tu cuerpo
que brota sobre el mío

Soy la irrupción
de un volcán
su lava dispersada
al fondo fino del océano

Soy tono, eterno pesar
fracaso inconfesado
la hoguera que te acosa

Soy el fuego de
¡Acordarse!



LLANTO DE LA GITANA

En las cuevas de Granada
Allá por el Sacro Monte
Cuentan una leyenda.

¿Gitana, Gitana
Por qué lloras?

En un tiempo ya pasado
Me enamoré de un moro
Era jinete del rey
Y cuando salía del palacio
Me traía treinta rosas
Una para cada día
Y eterno sería
Nuestro amor.

Yo le bailaba una rumba
Y el se gozaba de mi
Cuando mis caderas iluminaban
Sus ojos grandes
Con su mirada azul.

Me hizo la promesa
De traerme el más grande
Ajuar, tan importante
Como aquel de princesa.

Joyas, vestidos y regalos
Llevarían diez caballos
Y de reina de maravillas
Sería la boda de la Gitana.

Pero cayó Granada
Y su grandeza
Y echaron a tierra mora
El jinete de mi corazón.

Gitana, Gitana es lo que soy
Desde entonces
Sigo bailando
En las sombras cuevas gitanas
Para olvidar el tiempo
En que el moro me quería.

Cuando bailo
Cierro los ojos
Imaginando al moro
En su tierra africana
Con lágrimas en los ojos.

A pesar de los pesares
Atraviesa por el mar
El suspiro de aquel moro
Que sigue llorando
Sigue llorando.

¡Ay Gitana es lo que soy
Pero querida fue con pasión
Por el moro, por el moro!



LA ALJAMA

En la mezquita de Córdoba
Tocan las campanas
¿Pero que pasa Madre
Porque tocan las campanas?
¿Dónde está el muecín
Que llamaba con su llanto
Al creyente para la oración?


La Aljama sigue viviendo
Como para decir al mundo
Que en un tiempo muy lejano
A los árabes les encantaban
La belleza y la dulzura
De la sabiduría


¿Pero Madre, que ocurrió?
La memoria de los hombres
Algún día se perdió
¡Ya no saben lo que suena
La palabra libertad !




EL REY MORO

En el Palacio Granadino
Bailaba una señorita
Moviendo las caderas
Sonrisa de felicidad.

Ella se imaginaba
En el palacio del Moro
A quien llamaron El Chico
Aquel que no supo
Defender su patria y tierra.

El exilio le trasladó
En la tierra de Marruecos,
En el pueblo de Agmat
Donde ni siquiera no puso
Olvidar las flores
De los almendros,
Oliveros y jazmines.
Buscaba el olor abandonado
En las cortes de la Alhambra.

Llora, llora Boabdil
Granada no te olvide
Del tiempo en que los hombres
Pensaron que el Oriente
Se encontraba en Granada.

Llora, llora Boabdil
No te olvides, Granada
Los poetas, los cantantes,
Aquellos que la hicieron
Esplendor andaluza.

Y a pesar del engaño,
Y a pesar del olvido,
Nadie podría borrar
El pasado tan rico que fue
Al-Ándalus la mora, la judía,
Cristiana y árabe.

Llora, llora Boabdil
Tus llantos atravesaron
El mar y hasta la sierra
Para despertar las fantasmas
Del esplendor de Granada.

Llora, llora Boabdil
Sigue bailando la señorita,
Para despertar la grandeza
De una tierra de esperanzas.







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