sábado, 3 de septiembre de 2011

LAURA OLALLA [4.558]




LAURA OLALLA OLWID



Nace en Garlitos (Baja Extremadura), en 1953. La prematura muerte de su padre la obliga a trasladarse a Madrid a la edad de 9 años. Sus primeros escritos datan de su adolescencia, en la época en que concluye el Bachiller Superior; publicando su primer relato navideño (autobiográfico)“La Huerfanita” en “Ráfagas Hospitalarias”.Sus primeros pasos poéticos los da con la Asociación Prometeo. En 1995, ofrece su primer recital en la ADEYA, que le otorga su medalla de “Nueva Gente”. En 1996, obtiene el Premio “Alcaraván” y el Premio “Dulcinea”. Ese mismo año, la colección Torremozas selecciona e incluye una muestra de su poesía en su volumen de Voces Nuevas. En 1997, publica su primer libro, Estirpe de Gacela (Beturia Ediciones), y obtiene el premio Provincia de Guadalajara “José antonio Ochaíta” con su libro En un rincón cualquiera de la casa. En 1998, obtiene el Premio “Río Ungría”, otorgado a su poema “Como una niña asustada con lágrimas en los ojos”. En el año 2000, y por unanimidad del jurado, se le otorga el Premio “Ciudad de Mérida” por su libro Laberinto de agua. En el año 2001 le es otorgado un Accésit del premio Fray Luis de León (Ávila) por su poema “Madrigal para un amor ausente”; siendo becada ese mismo año por la Fundación Valparaíso (Málaga). En el año 2004 octuvo el premio “Mi Casa” (ciudad de Alalpardo – Madrid) por su poema “Yo soy como una casa”. Ha participado en varias Antologías Poéticas, y colaborado así mismo en diferentes revistas literarias...(actualmente escribe, colaborando en la Revista MOIRAS –Concejalía de Mujer de Rivas Vaciamadrid). Es miembro de la Asociación de Escritores y Artistas Españoles, lo fue en su día de la Asociación Cultural Beturia (Extremadura). Ha recitado en el Ateneo de Madrid, Casas Regionales, Centros Culturales, Radio y TVE... 



Apasionada de las artes plásticas: Carboncillo, Conté, Ceras, Sanguina, Acrílicos, Oleo... 

Exposiciones conjuntas: Excmo. Ayuntamiento de Daganzo (2001-2002). Excmo. Ayuntamiento de Rivas Vaciamadrid ( 2003, Sala Che Guevara) y (2004-05, Sala de Exposiciones del C.C. F. Garcia Lorca) Concejalía de mujer. C. Cívico Armando Rodriguez. 


Herida la palabra
bajo redes de miedo que mutilan los labios,
va latiendo desnudo en su cintura.
Se hace guía la tarde que recobro.
Se suceden las voces que me instigan:
¡atrévete a mirarlas! ¡atrévete a mirarlas!
(acaso sean ellas la esparcida simiente...).
Temerosa, abrevando el soslayo de un círculo,
recorro todo el tacto de su anhelo.

Impacientes y trémulas las manos
han llorado esta noche
el más puro silencio
del instante que muere.




Réplicas


Doblada al peso muerto de la muerte
y encima de la llaga del amor.
MIGUEL DE UNAMUNO


Era ella, bajaba a mi mirada
desde su pedestal de nácar, ella
la ilícita lasciva vulnerable de olvido,
excavando allí, lánguida,
pausadamente, ardores centinelas;
me tocó con sus últimas raíces
–tallos humildes de paloma sabia–,
insondable partícula de ese polvo que alguien
laboró en las solapas
del Universo
para esparcirlo luego por el pecho del hombre.

Cuando estrenaba su ámbito, dejaba
que yo me abandonara a su caricia,
y en su mosaico lúdico reíamos a solas.
Su forma de ojos grandes,
balandro de dolor, se postergaba.

Hay que tener oculta la costumbre.
¡Son tantos los que ocupan números en su lengua!.
Hoy la grama pretérita no hunde sus esporas
abriendo la avaricia a las tarántulas.
Hoy me parece como si la lluvia
explayara en su hálito el azul de sus gotas.

Plagia el viento su fuego inmarcesible
con tañer de campanas;
detrás, la valla oscura del espejo.

Dios, ¿a quién debo dirigir mis labios?





En tu vientre, madre


Racimos de verano embriagan mi aposento.
Hojas que afluyen por la holgura de mis dedos
pasean mi bullicio
por el andén cercano de tu savia;
yo, aprendiz de gacela.
Un acotado viento va envolviendo
mi sonrisa en su capa,
mientras un arco iris de bordados estanques
fraterniza mi nombre.
Me aminoro en el tiempo sin vulnerar mi sed.

Es tu vientre mullida roca donde los bosques
hospedan otra música.

¡Qué obertura, beber de cristalinos valles
antes de abrirse el agua!.


           Laura Olalla Olwid y Fernando Sabido Sánchez


Retrato de familia


De brezo es el calor
que borda una almohada
tranquila en mi regazo.

Somos pequeñas hebras que limitan
con el recío de las horas;
tan compartidas,
que en medio del desierto nos procuramos lluvia.
Un rostro nos dilata el verdor de sus días,
otro, invisible, con su luz responde
cuando las sombras hablan.

Por la nevada cumbre del silencio
cinco rostros esperan la apertura del mundo.





Brote de otoño

(mi pueblo)

Hoy vengo a visitarte
verano, violín, pluma
valiente de mi juventud.

Hoy el olivo clama por su antiguo verdor.
el eucalipto, al borde de las viñas añejas
alfombra con sus dedos
mi paso.
Reconoce heridas que cimentan.

He subido a tu copa,
deslizado mis pies por tu desnudo,
y he absorbido esa savia que me hacía vibrar,
donde seres fraternos algún día bebieron.
En tu lecho inefable,
la tierra, el agua,el aire amasaron laureles.
Verso lejano de mi juventud,
surco sereno de legón y azada,
manos humildes,
donde cantara el hielo de tus aguas más limpias.
Zarzas engalanadas,
soberbias a mi paso os levantáis.
Os hallaré otra vez
antes de que el otoño me marchite.




Padre


Como el cometa errante se pronuncia
allá en la infinitud de universo,
a mi dolor regresa tu memoria.

Mira la herida aquí, en lo más amado.

En el mástil altivo de la rama,
donde el aroma vive y se trasciende,
besamos, sí, la flor y la olvidamos.
Pero en tus manos nace y crece el lirio,
como recinto que un vigía alumbra
en su casa más íntima.

Tú y yo, padre, existimos
en los cálidos labios de la ausencia.




Escaleras

No necesito
siquiera que te acerques para amarte.
Hay escaleras libres en el sueño.
No es menester que el minotauro
cancele sus vestidos.
Soy alondra templada ante el aplauso.

Te busco en la llanura donde anidan trofeos...

En los azules riscos
me perteneces.




Entre papeles


A dónde ir
cuando tu vuelo me provoca.
En dónde estar
cuando mi río no te alcanza.

Me
deslizo entre papeles
que se hacen tuyos.
Ante sillas, que presas,
observan la esmeralda
y aprenden su destino.

Mirarlas me da miedo.

Prolongo la vigilia
cuando tu aire me toma.
Y en los labios
de la rosa percibo tu simiente.

Dime que no es verdad
que sólo me deseas.




2 comentarios:

  1. Ha sido un placer conocerte personalmente, Fernando. Mi gratitud por haberme incluido en esta maravillosa antología de poetas del siglo XXI. Fue una tarde maravillosa la que pasamos el 21 de mayo de 2015, en honor a Palestina. Un honor que hayas subido esta fotografía donde aunque con los ojos medio cerrados, comparto feliz, contigo. Buen fin de semana.

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  2. Ha sido un placer conocerte personalmente, Fernando. Mi gratitud por haberme incluido en esta maravillosa antología de poetas del siglo XXI. Fue una tarde maravillosa la que pasamos el 21 de mayo de 2015, en honor a Palestina. Un honor que hayas subido esta fotografía donde aunque con los ojos medio cerrados, comparto feliz, contigo. Buen fin de semana.

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