jueves, 5 de agosto de 2010

327.- VÍKTOR GÓMEZ

Víktor Gómez (Madrid 1967): Reside en Valencia. Es animador cultural, a través de la Asociación Poética Caudal (2007), así como de la Librería Primado ( 2007), Café El Dorado Espacio MAE (2008) y Fundación Inquietudes (2009). Así mismo es colaborador de Radio Klara desde el 2010. Es coordinador de Poéticas en Fuga (2009-2010), ciclo de encuentros poéticos en Valencia de carácter internacional en habla hispana. Pertenece al Casal de la Pau. Como poeta ha participado en lecturas en Gijón, León, Madrid, Alicante, Barcelona y especialmente en Valencia. Su obra se centra en una reflexión sobre los conflictos humanos que marcan nuestro tiempo, un tiempo de gran orfandad y desamparo. En este proceso de escritura viene trabajando la poesía y la prosa poética en la triología En un tiempo de gran orfandad (incluye Huérfanos aún, Los barrios invisibles y Perfeccione lo inútil a lo inútil), así como en trabajos independientes como Trazas del calígrafo zurdo (libro de tankas), la plaquette Bos-qué y el poemario Detrás de la casa en ruinas. Como editor coordina Los Cuadernos caudales de Poesía I y II y colabora en las ediciones de la Fundación Inquietudes en la colección Manual de Instrucciones para abrir una caja fuerte y la eminente Colección Itálica. Tiene publicados poemas en Adiós, La Hamaca de lona, Lunas rojas, The Children’s Book of American Birds, etc.

- POESÍA:
Los Barrios invisibles (2009).
Detrás de la casa en ruinas (2010).
Huérfanos aún (2010).
- OTROS:
-Colaboraciones en libros colectivos:
Pazlestina (2009).
El río de los amigos. Escritura y diálogo en torno a Gamoneda (2009).





Textos del poemario “Huérfanos aún” Ed. Baile del Sol (2010)

Todo el bosque
es un temblor.
Quedas están las violetas bajo la piedra.

Tambores de luto y luz que se callan al caer
un olmo de carne y palabras.
¿Solos?.

Extraña el niño la senda sin rumor, el granito desbordado.

Todo el cielo,
apagado ardor,
es una herida sin fondo sobre la piedra.

(Fragmento del poema “Huérfanos aún”)

***


"¿Cuáles son las condiciones para que haya conciencia?"
Paul Valéry

"A mi de las historias solo me interesa
ver sus espaldas cargadas
cuando se dan la vuelta"
Ana Pérez Cañamares


A Ana Pérez Cañamares

No verás la calle, sino
otra calle.
No verás la luz, sino
a través.

Un niño
cae de rodillas.
Una fuente insólita
salta
sobre la musculosa tarde.

No verás al asesinato, sino
otra calle.
No verás el vacío latiendo,
solo la calle, en fuga la luz,
el agua caótica
por todas partes.


***




Textos del poemario inconcluso “Perfeccione lo inútil a lo inútil”


De verdad, la belleza
no puede ser sino el atrevimiento
de la fragilidad a darse.



***




Colgar un poema en el blog
A Eduardo Milán

La cabeza de la poesía cuelga de una soga
la cabeza de la historia cuelga de una soga
siga quien siga, se sabe que nunca sobra
para hablar, decir que se sigue, que se dice
con no poca esperanza, sin desmemoria
que la cabeza del tiempo es tiempo de poesía:

ese descolgado decir de la histeria que ahora
descomulgan los gaznápiros y es un historiar
más cabal y en su quicio que la sordomuda
versión de los vencedores, que la ficción sudada
con desvergüenza de los guapos y las coronadas.

Una corazonada tengo.



***




La luz calla.
Parece que habrá buena cosecha.
Miguel Ángel Curiel

(Intempestivas conversaciones nocturnas en Jerez)

Un violín roto, decía León Felipe.
Un caballo azul, George Trakl.
Un extraño animal, invocaba Blanca Varela.

Yo no sé,
en estas aguas transparentes,
en esta ausencia de barro,
cómo no beber
el veneno de su claridad sin
morir al bien
que se quedó jugando,
que se queda embarrando
· como mi infancia en su quicio –
una orilla de asnos insomnes.

Porque hay aguas limpias
que son mortales
pero ningún niño se murió
jugando en la orilla barrosa.

Yo no sé como explicarlo.



***


la poesía se ríe de la demasiada
cantidad de juego acumulado
con palabras, no con ella

Eduardo Milan, Evacuación del sentido


estábamos en la cercanía
carcasas llenas de luz
súbitas
subieron
por encima de los tejados


dijiste es la hora de mirar adentro
y con la flor en la mano
rodeaste mi sombra y ya no perdí
peso.

y ya no perdí peso, prensar al desconcierto
la ígnea ropa del querer,
tendida la ropa de diario,
espolsada la suciedad y el miedo,
tú,
acorde que acordes mueve
susurrabas
el cantar de las ninguneadas ninfas de Judea
mientras los amontonados huesos
se iban hundiendo en el barro

tú eres así,
me traes de aquí a ellos, me enfrentas al olvido
y sanas la pus
con un bálsamo de ira y calma

el cielo está en su fiesta de fuegos y luces
son de paz
aunque me reste en la piel erizada
una memoria doliente de bombardeos

tráeme tu dolor, erizo, deja las púas quebradas
en mi mano
te doy mi boca escupiendo púas sin filo
y qué ardua y qué amable
vendas cada palabra mancillada

es
un escaparate
donde los villanos son duques de la utopía,
siervos de los ciegos y las gacelas

no tuve hijos, todos sois la no extranjera vida nuestra
se apaga
el cielo ya queda entre humo y oscura madrugada

ríen abajo los minero y arriba ríen los cristaleros y las buhardillas
emanan humo y risas

¿quebradas sílabas, que balbucir casi ni puedo…?
esta confusión se ahoga con un beso
tu-yo

es posible otra poesía, a ver si sabes como la encontramos…


***


no me dejan dormir
−su rumor inapelable
atraviesa el umbral−

en un cuarto contiguo los oigo
me llevan del abandono
a la atención, que no escatimo.

los niños juegan
y esa es, en cierta medida,
nuestra esperanza.


(Del poemario
Perfeccione lo inútil a lo inútil)

***


A Arturo Borra


Horadando, con las uñas.
Orando, con las uñas.
Ando, con las uñas.
O con las uñas
o sigo encerrado en la miseria.

Tarde supe por qué
los poetas no tienen
manos
sino uñas,
no tienen ojos,
sino uñas,
no tienen palabras
sino uñas
que escarban bajo las vallas
para que otros pasen
al otro lado de la miseria.


(De ‘En un timpo de gran orfandad’.
zahorí. poesía en minúsculas. Valencia)



***


Cuando dijisteis: Una tierra sin pueblo para un pueblo sin tierra,¿no había árabes, trigales, pinos de Alepo en nuestros vallesy gargantas desde el Mar de Galilea al Neguev?
Angel Petisme


"La celda no tiene muros"
Mahmud Darwix




CONvenir podría ser suficiente
aunque pesa lo callado
el(lo) que en la diáfana hoja se
deshace de tintas y formas
Y aun la lágrima
que sobre nada cae y deja el círculo
abierto y aun ese
mojado papel en cuya superficie
morosa la tinta resbala
todavía sin señales
todavía aún
son las identidades de nuestra
orfandad

Como
una Franja crece enrojeciendo
la tierra de nadie
sin el(lo) como /ofensa a los niños
insoportable: no poema, grita
como si fuera el último día sobre la tierra



(De la serie "La Franja de Gaza")


*****


La risa danza
y nos hace inalcanzables


..................................(El misterio de África)


Del poemario "Los Barrios invisibles"



*****


DISPARO Y (DES)CONCIERTO

los mutilados:
ellos sí saben bailar
en el concierto
de medianoche
¿qué ciegos
dirán
que lo no visto es inverosímil?
ni los jardines
ni los músicos
ni este insuficiente salmo
convencerán.
acabada la fiesta, ¿qué calles
dirán que estuvimos?
¿qué día
por cuántas ventanas
si sólo
la lluvia siguió nuestros
pasos?
pasillos o noches:
¿quién sabría
si es inverosímil lo visible
salvo los desaparecidos?

***


Divagación en agosto

el animal que lame las heridas blancas,
ése está ciego en la misericordia
Libro del Frio, Antonio Gamoneda


Hemos negado la simpleza pero ¿qué es, al fin, la ceniza?.
Y si la ceniza pide su ahora, ¿qué acumulación resiste?

El miedo puede ser un filo criminal.
Vuelva el corazón a la compasiva naturaleza de lo inútil.

Y resista el puño hasta abrirse,
hasta ser la palma donde coman los pájaros extraviados
de agosto.


***


por la precisión
supe que el tiro
vino de dentro

(De Huérfanos aún)


***



Una corteza áspera –irrita como una lengua de iguana- a mi mano habla de pérdidas. Como nunca y como siempre, no importa. Espero aún otra no certeza. Sin condiciones.
Entre las rejas de una valla y la acera. El acercarse despacio no asegura ver. No es porque supiera dónde buscar. Fueron ellos, que no me esperaban, los que nada esperan, quienes me enseñaron los Barrios invisibles.
Ah, sí. En los ojos inesperados de la incendiada mole de edificios me mira la negra fachada. Sin cristales, sus vanos retienen la oscuridad interior. Adentro y afuera es una construcción de lo inhabitable.
Un áspero silbo. Giro el rostro. Ya estoy entre sus calles. Entre sus calles, sin condiciones.

(De Los Barrios invisibles)




HINCAPIÉ

la noche permite no ver –una lentitud en la escucha caracolea – no decir o susurrar, en severa y reposada, reptante ira y lazo.
une.

en el vaso vacío no cabe un alfiler. despierta, signo, buey en la espesura –incierto presente no acalla- el sentido involuntario, ciego, de respirar.

haces hincapié -como se respira se vive-. alta la noche, permite no ver. oficio es del insomnio, consiste en decir no a la desesperanza. y seguimos respirando.
y seguimos respirando

¿hubo alguna vez madre
alguna voz
alguna vez?

¿qué piedra o espino colma
el paso hiere y sella la boca
vocal por vocal
qué hielo
qué piedra
o rama de espinos
alguna vez madre
alguna vez
desterró el habla?


(De Detrás de la casa en ruinas)




***


A Daniel Bellón

besa la mano
que de comer le da
una vez al día

crece afuera la zanja
para tantos sin nombre.

(De Trazas del calígrafo zurdo)

1 comentario: