lunes, 31 de diciembre de 2012

ARTURO SODOMA [8957]




Arturo Sodoma.
Ciudad de México 1977. Es Chef, fotógrafo y poeta. Ha cursado los talleres literarios de los maestros Alicia Reyes e Iliana Godoy. Ha publicado en las revistas, Lenguaraz, Boletín de la Capilla Alfonsina, Misión Letras, literal, entre otras, y en las antologías: Reloj de Arena II (1999), Reloj de Arena III (2000) y Reloj de Arena IV(2001), de la editorial Sui Generis coordinado por el poeta boliviano Jorge Calvimontes y Calvimontes, asimismo fue incluido en el compilación de poetas mexicanos: Del Silencio Hacia la Luz nacidos de 1960 a 1989, Mapa Poético de México. Tiene en su haber literario tres libros Lágrimas difuntas, Ausencias y Arquitectura de las musas insostenibles.. Actualmente es miembro de la Asociación de Escritores de México donde tiene el cargo de Secretario General y es Director de La Editorial Generación Espontánea. Premios: 2do lugar en el Festival Literario Internacional Porto de Galhinas, Brasil 2007, con su videopoema "Ausencia de ti". Es miembro fundador del Movimiento Fusionista.





Calle poética

¿De la calle se puede recoger poesía?
Ricardo Rocha en entrevista al grupo de
Rock “La Barranca”


De la calle se puede recoger polvo,
se puede sembrar silencio
y cosechar sangre,
se pueden recoger rocas,
sueños,
ciempiés,
papel picado,
fotos,
fotos mudas,
fotos de colores,
fotos vagabundas.

Se pueden recoger borrachos,
demonios,
hombres que se tapan la boca,
mujeres que se tapan los ojos.

Se puede recoger poesía
y estirarla hasta comprobar la ley de Hooke,
palparla como papaya madura,
morderla, sentir su jugoso cuerpo
entre los labios,
pisarla cual cucaracha
que truene,
que manche el piso,
azotarla hasta que grite
porque la poesía grita,
llora
y mendiga la comida.


Se puede recoger poesía
de las aguas negras,
las 24 horas de la calle,
en la mañana como baba de
almohada
en la tarde como estrés de
oficina
en la noche como puta
sin destino
ni maleta,
en la madrugada es la resaca
la resaca de la vida
de la vida en la calle
de la calle que es poesía.

Se pueden recoger hojas,
notas musicales
saxofones en la oscuridad.
hojas secas, hojas nocturnales,
golpes de odio,
golpes de amor,
preguntas y explicaciones,
viento contaminado,
el perro callejero que ladra:
god, god , god,
la señora que mata viejitas
porque no tuvo madre,
el río de las palabras,
el río Mixcoac,
el torrente de Paz,
el torrente sin agua,
el torrente de las letras,
el torrente de la soledad,
los espejos rotos,
los charcos que se quiebran
con las gotas del cansancio,
el testimonio de las avenidas
que a diario cuentan
leyendas de transeúntes opacos.

De la calle se puede recoger
pan, el pan de los muertos,
el de harina sagrada,
el que lleva azúcar en los huesos,
el pánico de los vivos
los que llevan en las venas
la desolación de la historia.

En la calle hay metáforas,
arquitectura en movimiento,
piernas que son sinalefas,
bocas que son aliteraciones,
pies morenos de ensayos prolongados
o pies tímidos descalzos,
remolinos de pantorrillas
en el sendero de los subterráneos.

En la calle se pueden recoger
toda clase de flores,
la flor del no me olvides,
la amapola de la tristeza,
se puede recoger un poema en cada cuadra,
a cada metro de pavimento,
letras y letras,
polvo poético,
el polvo de la desilusión urbana,
el polvo de la calle.






La pregunta

Y me preguntas qué es poesía
Como si no me diera cuenta de que los aviones vuelan con el ritmo de las nubes
o que los alacranes se esconden de los rayos solares porque se quedarían como estatuas de sal si estos besaran su aguijón

como si no me diera cuenta de que el aire que respiro lleva en su cuerpo
brisa marina combinada con partículas de Chernobyl

o si no hubiera vivido jornadas de más de 40 horas detrás de una estufa
para que las multitudes lleguen a su festejo y coman como dios manda

como si no me hubiera desvelado cantando “el rey” hasta ver la primera luz del día
y recordar que la palabra es luz y que su función principal
es crear orgasmos en el alma 
y su segunda función es hacer la guerra

como si nunca hubiera visto un atardecer abrazado de un árbol o de una mujer
(el árbol sigue en el parque ella se fue a buscar un roble)
como si no conociera el sabor de las almendras o el pan de ajo
o no hubiera tocado el pasto
como si nunca hubiera besado la frente de mi madre
o no conociera el hambre y la desdicha
como si nunca hubiera sido besado con la sonrisa de la muerte
como si no caminara por las calles
o no viera la decadencia en los labios de la gente


¿qué demonios es poesía? 
una plaga en el pecho
un corazón que se consume en el tiempo
pero poesía no eres tú

poesía es: el albañil en las alturas construyendo una torre para pelear con Dios
El vendedor de bienes raíces celestiales
el limpia parabrisas el barrendero el campesino 
el que espera que alguien lo deletree el sordo el ignorante el mentiroso el asesino
el loco
el payaso
las cucarachas 
poesía es todo y nada en el río bravo
en el mar muerto 
en el océano pacifico
nada como ballena huyendo de un ataque del sol naciente 
o como foca huyendo de los palazos
y nada y nada y nada en las lágrimas de la humanidad

entonces poesía son los campos de amaranto
(olas de sangre cuando el viento las azota)
la soledad el vino los calambres el silencio y la vida poesía somos todos menos tú mujer de pupilas mediterráneas
ni yo con ojos de lodo seco




Lujuria

I

Y nos dirán putas
Con las piedras harán bólidos y nos los aventarán
Nos señalarán con sus paraguas
y con las puntas de sus zapatos nos patearán el alma
Tratarán de tirarnos sin paracaídas de la torre sexual
Y me abrazaré de ti como si fueras mis alas
Y tú comerás de mis labios
Te morderé pubis-luz generoso manantial de lo indescifrable
te morderé Manzana púbica

Nunca dejarán de vernos
Siempre juzgarán tu aliento aferrado al mío

Toujours
Je soufflerai ton coeur

Seremos los mismos que abusan de las inclemencias
Tú y yo haremos el réquiem de los lujuriosos
El canto de los cálidos hemisferios
El big bang del sexo

¿Quieres bailar sobre mi espalda?


II

Quiero apretarte las nalgas y amalgamarlas hasta crear un sólo mundo
El mundo donde yo pueda caminar sin tener que pagar peaje
Ni a los hombres de buena voluntad
Ni a los académicos que se erotizan leyendo a Pita Amor

Me acercaré a ti cuando el metrobus avance y ni un diente de ajo quepa
Te tomaré de la cintura y te apretaré hasta que sientas
mi fecunda poesía en tus dunas redondeadas ( porciones carnosas del deseo)
Tejeremos el vals del roce

Y nos llamarán perras en apogeo
Y voltearán a vernos
Y los hombres de sotana querrán separarnos
Nos pisarán con sus plegarias

Y te deletrearé la espalda con mi lengua
Y nos dirán putas
Y nos juzgarán de por vida y de por muerte
y qué importa si nos flagelan con sus discursos monoteístas o pancreáticos
bien sabes que entre poeta y musa no es necesario hacer preguntas
cuando el olor de la entrepierna aflora el universo

y qué importa en verdad qué importa
el juicio de los optimistas
y de los descarriados
ellos no conocen tu sexo hirviendo
no han probado tus pezones de otoño-infierno
no saben que cuando se te besa el cuello
un quejido nace y atraviesa el concreto

todos los días soplaré tu corazón


III

Qué más da si muero hoy o muero mañana
He conocido el paraíso al penetrar mis ojos a tu ombligo

Somos los días del exilio
El sustrato de la lujuria
Eres para mí lo que la luna es para los lobos

y te sabrás deseada
como tal caminarás por la calle
te dirán puta
y yo me acercaré a tu oído y te diré:
eres la encarnación de la Magdalena
contigo sea la luz contigo sea por siempre







Guerrillera

No puedo dejar de escribirla
deletrearla como si fuera el universo
transcribirla poroporporo
colmarla de letras colocarlas por todo su cuerpo
vestirle de vocablos la entrepierna
dibujarla con puntos y comas

y de extrañarla como quien extraña la guerra después de la paz

Usted es la palabra preferida que guardo en la boca (clandestina)
subversiva mantis posada en una flor de concreto
sus ojos son la melancolía de la tarde
es el poema que aún no escribo
el poema que habla de sus labios contra mis labios,
es una lágrima que se revienta en el espacio
es el himno de los que morimos todas las noches
es la otra música (la música de los que luchan por el paraíso)

mi lucha es conquistar sus pies boreales

sus pupilas tienen el color de la tierra mojada
saben a fuego cruzado
huelen a la trémula soledad y a la muerte insurrecta

Yo pongo las estrellas en su ventana
el que implora con el alma desgarrada su regreso
soy el que quema las naves el que pone banderas en el cielo
el que la espera en la orilla del precipicio
el amante incondicional el cómplice inconsolable

soy el que la ama el que la desea
el que pintó una luna en la oscuridad para que ella la viera
soy su escriba el de la rosa sangre
el de la letra uva
el que se arroja al fuego
el que se quema





Mi infancia acabo cuando Chabelo me ofreció cocaína

Mi infancia acabo cuando Chabelo me ofreció cocaína
Catafixie mi avalancha apache por un gramo de polvo puro
Lo rebaje con aspirina y por primera vez en la vida me sentí dios y guapo
Era hermoso sentir tanta valentía 
Fui un niño feliz que golpeaba a los demás porque usaban drogas menores 
Como el chamoy y el miguelito
Al único que no golpeaba era a carlitos por usar chocolate amargo desde la mañana
Y ponerse muy impertinente con su madre
Besaba a mi sombra sin sentir sus labios secos ni su sabor agrio 
Brincaba del segundo piso de mi edificio con mi patineta santa cruz
Y caía de nalgas pero no sentía dolor 
Me veía al espejo y aprendí a reír aunque al tipo de enfrente le molestaban mis carcajadas
Escuché a velvet underground y bailé una semana con seewt jean 
Inicié a mis amigos y ellos a su vez se iniciaron en el verdadero amor
Qué de malo tiene follar con el cerebro intoxicado?
Qué hermoso era ser politoxicómano
Fumábamos marihuana con cocaína
Tomábamos cerveza con cocaína
Soñábamos con cocaína 
Llorábamos con cocaína 
Éramos una generación de niños malnacidos o bendecidos por el poder de Chabelo
Que también nos puso a sus edecanes a nuestra disposición
Todo era alegre
La infancia sagrada y poderosa
En vez de resortera teníamos diábolos y matábamos a las ratas y a los seres no deseados 
Era hermoso ver al cielo sangrar
Ahora los niños usan aire comprimido por la nariz
¿ idiotas, acaso los muy pendejos nos saben que la nariz es para la coca?
Pobres seres que no saben qué hacer con sus vidas
Pero quién soy yo para juzgar a la gente que no vio caer el muro de Berlín 
Ni vio a Chabelo sin arrugas
Sin demandas de sus propios hijos
Sin los párpados caídos
Por eso no entienden que la cocaína que regalaba el amigo de todos los niños
Era para alegrarnos el alma
Pero quién se la alegra a él

Gracias Chabelo por ser lo que eras
Por hacernos sonreír 
Porque cada domingo que amanezco crudo aparece tu imagen marchita en la tv
Y me siento feliz al ver que tus edecanes no envejecen contigo






vengo de un sábado

75 kilómetros se desprendieron del ártico
Y yo como cereal
me siento mal por los pingüinos

Connotaciones: vomito 

Qué serán de ellos: dios

Hoy he firmado porque los canadienses que matan a las focas
Les hace falta calor?

He firmado por la paz mundial
He firmado por el daliay lama
He firmado
Por mí

Quiero vomitar

Hace 40 grados tenía fiebre
Qué harás tú por los huesos de mi dios? 

sigo en el cielo
histeria?
Por favor en las calles los burócratas lloran
Mi madre pide frijoles
Ella no sabe que su hijo es un muerto

Qué le digo?

ALEJANDRA GONZÁLEZ CELIS [8956]




Alejandra Sofía González Celis
Chile, 1976 | Nació en Santiago de Chile. Ha asistido a talleres literarios con Mauricio Redolés, Andrés Morales y fue becada por la Fundación Pablo Neruda en el año 1998. Asimismo ha participado en tres publicaciones en calidad de antologada: Apuntes a la base del fuego, Yo no me callo y Vagonetas presidenciales. Es Trabajadora Social de la Pontificia Universidad Católica de Chile y cursa actualmente su primer año de Magíster de la misma disciplina. Ha publicado La enfermedad del dolor bajo Ediciones del Temple, 1ra Edición 2000, 2da Edición 2003, y tiene al menos dos libros inéditos (Jauría y El libro de la Pobreza) que esperan se levante de su cama y los publique.




LOS HABITANTES DE LAS CUEVAS DE CATÉTER

Nosotros
los niños enfermos
seguíamos jugando
en las esquinas de las salas comunes

unos amontonados en sillas de ruedas

otros sujetos a una cama donde descansaban
nuestras cabezas condenadas a cascos respiradores 
de astronautas abandonados en atmósferas extrañas

o atornillados
a balanzas que mantenían nuestras columnas en su lugar

A la mayoría de nosotros le habían nacido alas de aviones
que obligaban a nuestros brazos 
a ser amigos de sueros y calmantes

Cada vez que volvíamos de ser abiertos
seguíamos jugando
y entre mareos posteriores al sueño anestésico
nos contábamos del tiempo
anterior a la morfina
y a las cicatrices

de nuestras casas con sábanas dibujadas
de nuestro propio televisor
de las peleas con hermanos sanos y ausentes
que no dejarían entrar

No llorábamos por las heridas
ni por las enfermeras
ni por el constante perforar de pieles
no acostumbradas a ser cuevas de catéter

ni por la comida que ingeríamos sin molestar

o la continua carencia de padres

Llorábamos por las noches
por el niño nuevo de la cama de al lado que lloraba
que se iría en uno o dos días

que nos recordaba la obligación del llorar.

De La enfermedad del dolor






LA PERRA SIN NOMBRE

La perra sin nombre viajó toda quiltra
de ciudad en ciudad
de patada en patada

El inicio del viaje fue su propio nacimiento

Sabe que tuvo una madre
No la recuerda
Sabe que tuvo hermanos 
No los recuerda

Su recuerdo:
Haber sido la mascota de unas monjas secas
que como higueras amontonaban niños y perros 
en un patio
y unas piezas con camas

Los niños eso sí le pegaban chicles en su lomo perro
pero a la perra igual le daban pena
sus ojos llenos de rabia, los nombres de santos
que las monjas les habían dado:
Antonio, Mateo, María

Niños inexistentes emparentados en el abandono con la perra sin nombre

Nunca pudo soportar tanta tristeza
nunca pudo soportar las ruedas de los autos

que amenazantes le gritaban desde los caminos
a los que partió hastiada de tanto sobajeo en su lomo
sobajeos de monjas aburridas

Perra sin nombre
perseguía y perseguía
así como su cola
así como a las bicicletas estúpidas
que se alejaban burlándose

Perra sin nombre se llenó de rabia en la calle

Su cabeza anónima aplastada por un auto en la ruta 68
Ella iba camino a la playa

Le habían dicho
Que allí los botes tenían nombre







LA PERRA DESOLADA

Este no es un blues quieto que aparece lejano en una calle que se llama noche
No es un parque 
No es un lomo perro abierto por las manos de un niño enjaulado en su antejardín
o una mosca en un vidrio verde

Esta es la perra desolada vagando por los caminos

Esta es la perra desolada entrando a los bares y a los supermercados
con una pata chueca y una manta de tiña comiéndole los pelos

Es la perra desolada

No
No es un supermercado
Ni una calle
o una noche
No es un blues

Es una perra desolada
Una perra tango
dando vueltas

torpemente

De Jauría






CANTO DE LA HEMBRA ANCIANA

Cada uno de estos hijos los he parido sin dolor
Cada uno de estos hijos ha caído al suelo
Como cuesco de aceituna 
Y sin ningún padre
se han levantado
negros y olorosos

hay algunos que se han encamado con putas
hay otros que han traído mujeres decentes
pero yo a todos los nietos los quiero igual
sean o no sean
hijos de puta

todos colaboran en la casa
y a nadie se le pregunta
de dónde viene la plata

a veces son diez lucas
o un kilo de arroz
o 2 litros de bebida

a veces incluso han sido un par de chalas blancas
que todavía tengo en su caja

En el baño la lavadora está tapada con un pañito bordado 
y en esa misma lavadora lavo
toda la ropa de mis hijos
con el amor de la mami
el amor de la comida
el amor de la comida
el amor de la comida

Aquí la mami se respeta
por sobre todas las cosas
por sobre todas las mujeres
por sobre todos los vecinos
por sobre Carabineros
e Investigaciones

Porque da de comer
Porque deja vivir en la casa
porque no hace preguntas

De El libro de la Pobreza







Tibia y dormida
encima de siete baldosas
he sido arrastrada a esta punta del camino
donde las lágrimas de los niños
fueron convertidas
en sal de comer

no hay antídoto para este mal

no hay ninguna pastilla que
nos saque lo de adentro del cuerpo
y nos lo cambie por otro

nunca podremos imaginar cuándo

comenzó todo esto





Selección de Cuadernos de encierro y calle




De la Calle

Principio
Esta poesía no es normal
porque es una poesía pobre
Es una poesía añeja y guardada y no sabe hablar
y se esconde y atosiga en las esquinas
muerde
ladra

Esta poesía se para en las esquinas y compra

compra

algunas veces

compra.






Esparta practicaba una rígida eugenesia. Nada más nacer, el niño espartano era examinado por una comisión de ancianos en el "Lesjé" (“Pórtico”), para determinar si era hermoso y bien formado. En caso contrario se le consideraba una boca inútil y una carga para la ciudad. En consecuencia, se le conducía al "Apótetas" (lugar de abandono), al pie del monte Taigeto, donde se le arrojaba a un barranco.




Espártame

Espártame. Aparta de mi este cáliz. Que no vaya a ser mi boca la que pronuncie las palabras. Que no vaya a ser mi boca la que las calle. Que no vaya a ser.

Espártame, Señor. Espántame lentamente cada uno de los fantasmas que me inundan. No dejes que puedan aparecerse en las noches, presurosos, como peregrinos anónimos que caminan por los caminos. Que no vaya a ser Cristo. Que no vaya a ser su imagen una distinta y sea yo quien no le reconozca. Que no vaya a ser yo la que tenga que juzgarle y crucificarle. Que no vaya a ser yo quien lo niegue y quien lo traicione.

Espártame. Sáname de mí. Inúndame con tu espíritu. Protégeme de lo que no sé. De lo que no ha ocurrido. Protégeme de este accidente. No dejes que vayan a tirarme por el cerro. No dejes que esta invalidez aparezca temprano. Haz mi señor, que todo ocurra a la hora precisa. Que nada vaya a adelantarse.

Espártame.

Espártame señor.

Por mi culpa, por mi culpa. Por mi gran culpa.





Posesiones

Una plancha
una lavadora de carga vertical
un tarro parafinero
una tele
la cama
las gatas
el perro

¿Los cuadernos del Michael?
¿Sirven los cuadernos del Michael?




Del encierro


Subterráneo

1

Como un estómago abierto
Natasha ha salido a la calle
no hay nada ya que lleve su nombre
ni los árboles
ni las paredes que sostenían su rostro

Dejaron de hacerlo hace 14 años

Tan solo una lápida esperaba su cuerpo

pequeño

como un estómago abierto
lo que busca

es a alguien que la alimente


2

Mamá es una palabra
dormida en el sillón de la entrada
un florero que se rompe
una palabra de la que hay que esconderse

Papá era una voz
la única voz oscura
antes que el primo Hans

antes que Heiner



3

Natasha esta parada en la entrada

Qué casa es esta
Quiénes la habitan
Dónde esta mi cuerpo
Dónde mi cama

Natasha pronuncia la palabra

Un perro ladra


4

Heiner es el bien amado
Sus manos densas han construido el cuerpo de Natascha
la han moldeado
a su imagen y semejanza

Oh Heiner
nunca me bandones
qué sería de este cuerpo
vacío
quién pondría las piezas del ajedrez

Tu construiste este lugar
cuidadosamente lo has ordenado
me has dado todo lo que necesito
una cama
mi comida
mi televisor

El señor hizo en mi maravillas
Grande es mi dios