Zhang Jiuling
Zhang Jiuling (chino simplificado : 张九龄; chino tradicional : 張九齡; Wade-Giles : Chang Chiu-ling) (678-740), nombre de la cortesía Zishou (子壽), apodo Bowu (博物), el conde formalmente Wenxian de Shixing (始興文獻伯), era un ministro prominente, señalado poeta y erudito de la dinastía Tang, que sirve como canciller durante el reinado del emperador Xuanzong.
Orquídea y naranja
Tendidas hojas de orquídea en primavera
y flores de canela brillando en otoño
tan autosuficientes como la vida,
que las adapta a las estaciones.
Sin embargo, ¿por qué pensarías que un ermitaño en el bosque
cautivado por los dulces vientos y encantado con la belleza,
pediría ser trasplantado?
¿Lo haría cualquier otra flor de la natura?
Versión de Juan Carlos Villavicencio
DESPUÉS DE TU PARTIDA
Después que partiste
Abandoné el telar.
¡Como pienso en ti, amor!
Soy la luna llena
Que pasa cada noche
Menguando su esplendor.
Añorando, bajo la luna, a mi lejana amada
Sobre el piélago se eleva
la luna con resplandor.
La contemplamos tú y yo
desde dos extremos del país.
Melancólico, lamento
que la noche sea larga,
y te añoro apasionado.
Apago el candil:
me encanta la luz de la luna.
Me cubro con la capa y salgo.
La siento mojada con el rocío.
Me aflige no poder recoger
un puñado de luz y ofrecértelo.
Regreso y me tiendo en el lecho.
Ojalá te vea en el sueño.
[Traducción al castellano de Guojian Chen]
LAS CANAS SE MIRAN AL ESPEJO
Como nubes azules, las ambiciones antiguas.
Perdido el tiempo. Níveo cabello de los años.
¡Qué sorpresa descubrirse en el espejo ¡
Imagen y figura se compadecen mutuamente.
1996 La pagoda blanca, poemas de la dinastía Tang
… Fondo editorial de la pontificia universidad católica. Perú. 1ª edición
La hoja del sauce
No me importa su regio palacio,
ni me importan sus joyas y jades.
Sólo quiero a la hermosa doncella
que entre cortinajes
de brocado y oro,
junto a su ventana,
teje, borda y sueña
todas las mañanas.
Sólo quiero a la hermosa doncella
que ha tomado una hoja del sauce,
y la deja caer sobre el río,
mientras sopla la brisa del Este
repleta de aromas
de suaves arpegios, de lejanos trinos.
Y me embriaga la brisa del Este,
no porque en su alas
caminen las glorias de la primavera.
Y me embriaga la brisa del Este
porque ella me trae
la hoja del sauce
que danza sin rumbo,
sin rumbo y sin tino
sobre el oleaje
del inmenso río.
Y atesoro la hoja del sauce
-pincelada verde de la primavera-
porque ella me trae desde la ventana
en que teje y borda la hermosa doncella
mi nombre grabado,
grabado en la hoja
con la fina aguja
que tocan sus dedos
todas las mañanas,
cuando la doncella
teje, borda y sueña
junto a su ventana.
en Poesías de la Antigua China, 1949
No me importa su regio palacio,
ni me importan sus joyas y jades.
Sólo quiero a la hermosa doncella
que entre cortinajes
de brocado y oro,
junto a su ventana,
teje, borda y sueña
todas las mañanas.
Sólo quiero a la hermosa doncella
que ha tomado una hoja del sauce,
y la deja caer sobre el río,
mientras sopla la brisa del Este
repleta de aromas
de suaves arpegios, de lejanos trinos.
Y me embriaga la brisa del Este,
no porque en su alas
caminen las glorias de la primavera.
Y me embriaga la brisa del Este
porque ella me trae
la hoja del sauce
que danza sin rumbo,
sin rumbo y sin tino
sobre el oleaje
del inmenso río.
Y atesoro la hoja del sauce
-pincelada verde de la primavera-
porque ella me trae desde la ventana
en que teje y borda la hermosa doncella
mi nombre grabado,
grabado en la hoja
con la fina aguja
que tocan sus dedos
todas las mañanas,
cuando la doncella
teje, borda y sueña
junto a su ventana.
en Poesías de la Antigua China, 1949
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