Chema Lagarón
(JOSÉ MARÍA LAGARÓN. Ponferrada, El Bierzo, 1969)
Reside actualmente en Valencia. Es Licenciado en Ciencias Químicas, Doctor en Ciencias Físicas y Fundador de tres empresas de tecnología. Después de graduarse trabajó como investigador en varios países. En la actualidad trabaja de Investigador Científico en el CSIC y dando clases en varias Universidades. Ha escrito y editado varios libros y artículos científicos, es inventor de varias patentes y forma parte de la junta editorial de varias revistas. En el ámbito de la poesia ha publicado dos libros: Diez mil corazones y otras canciones indie no escritas, Poesía Hontanar 2012 y Poesijjaz y otros tangos indie, Circulo Rojo Poesía 2013. En 2014 publica en Tigres de Papel su obra Decimal.
Sus poemas han aparecido también recogidos en la antología “X Encuentro poetas en red” y en la revista Excodra Literatura.
Lo que no sabemos
Todo lo que no sabemos de la historia
Está en el relato de nuestro futuro
Queda escrito en el jeroglífico de lo desconocido
En la repetición cíclica del tiempo genocida,
Sólo el dolor es coetáneo
Y nos reconoce al pasar de nuevo
Por la calle del paladar triste
La historia es el raciocinio de los dioses
Tratando de quitarnos la razón
La suma de los adioses
Para hacer una ola de porvenir
En los días de la Revolución consumada
La escarcha histérica de las gárgolas
Nos recuerda que hay fantasmas
Que todavía viven "sideways"
Esperando recibir una respuesta
Acerca de qué sigue a la muerte
Y al sentido del sacrificio heroico,
Juntos rellenan las termas
Buscando un poco
del ansiado calor del infierno
El que se niega a morir en sus días
Está condenado a la vida
Recuerdo
Que aquella mañana me lavé el sudor
de la noche de la aurora boreal
Con agua limpia de rocío
Como hacen las libélulas
que no tienen miedo al pantano,
Esa historia nunca se volvió a repetir
Todos los días son lo que nos ocurre
Sin distinción de género o raza
Y nada cambia la historia de nuestros cuerpos
hundidos en el azul
del sabor de las bocas
No hay mayor acertijo
que vivir a través del arte
la perfección de lo que no se consigue
Jamás
"DIEZ MIL CORAZONES y otras canciones "indie" no escritas".
LA CASA DE LA COLINA
Hace tiempo que no hay luz en la savia de esa mansión y es denigrante para el placer de los sentidos habitar en ese lugar de soledad... Unas manos dedicadas salvan los espacios más idílicos y los más muertos. Diez mil corazones impulsan los diez mil movimientos que digitan el arte de esas manos... Tengo envidia de esos dedos en movimiento síncrono y avezado...
Yo miro la casa de la colina y veo posibilidades pero no deseos de habitarla en presente... Ella la mira y ve arte para sus dedos... Nunca dediqué esfuerzo a los espacios y nunca creé nada que permaneciera anónimo o íntimo...
Ella es todo lo contrario... Siempre sube las cremalleras a los alfeizares escondidos, cierra los “tapers” en silencio, atusa cabellos rebeldes y aplaca al desorden con caricias sanadoras...
Ella es un arcén de vida, que encaja en la forma de mi cuerpo acostado...
Esa casa de la colina sería su regalo anhelo, su obra maestra, haría sus enroques y nautilaría por sus espacios, imaginando un mundo nuevo... Pasaría como el humo de una sala a la contigua, todo cobraría chispa tras su estela, todo giraría bajos sus pies y el torbellino alimentaría las esquinas y cavitarían los fantasmas buceadores… Las burbujas de éstos cobrarían intensidad mientras suben de los abismos para ser testigos del aroma de su café... Se sentarían reposados tras su hombro y apalabrarían un mutismo fúnebre, mientras se dejan llevar por ese festival digital que armoniza su presencia...
Así como en una nube transcurriría la pasión frenética del artista que abriría la caja de Pandora para cambiar sellos con los malignos y apaciguar así mi sueño...
Si tuviera más tiempo de vida, trabajaría hasta lo enervante para adquirir la casa de la colina y ofrecérsela en un acto de puro egoísmo de mi alma a mi gemela, a la que digita con sentimiento creador en el silencio de esa alacena...
"Decimal", de Chema Lagarón
KIT DE SUPERVIVIENCIA
En esto
Como en todo
Hay algunas verdades
Y varias cohortes de mentiras
Sobrevivir reside
En cohabitar en parajes exiguos de verdad
Y aprender a curarse
Con los vendajes lesivos de la mentira
[SIN TÍTULO]
Anoche soñé contigo
Y después dormí abrazado al sueño
MADUREZ
Parece que al alcanzar la madurez
Todos vivamos dañados
Por encima de nuestras posibilidades
PRESENTIMIENTO
No sé de tus sueños
No sé nada de ti
Todavía no existes en mí
Estás en la memoria de otros
En los registros de la sed
En las hojas y en las calles de cierta ciudad
En los ladridos de extranjería tras tus pasos
Y en las cámaras de seguridad de ciertos cajeros
Fuiste causa en peleas de adolescentes
Pero mi sangre no te recuerda,
Ni una sola cicatriz se hizo en tu nombre
No te conozco
No sé cómo te vistes por la mañana
Ni cómo te suelo desnudar besada a la pared
Ignoro tu perfume, los puntos suspensivos de tu expresión
El olor de tu cuerpo y el fetiche de la sabia que te circula
Todavía desconozco mi obsesión
Por observar la forma
En que se litografía tu ropa interior
Cuando te lanzas a para un taxi
Eres todo un misterio velado para mí
Un lienzo en blanco
Las piezas sin troquelar de un puzle
Un vestido de papel sin pauta
Y el olor de tu humedad cuando estoy congestionado
Sin embargo, a pesar de que te desconozco entera todavía
Ya presiento que me empiezas a doler
ÁNGELES CAÍDOS
Éramos humo llorado por los ángeles caídos
De puntillas, solíamos encallar en los desvanes de la infancia
Eran épocas jodidas de humedecer el pan en el rencor de los almendros
Años después
Patinábamos sobre moho y aceite
Vertiendo nuestras cruces sobre el limo del otoño,
Ya nada permaneció intacto ni a salvo en la memoria
Me llamaban el eterno
Porque nunca terminaba los días,
Me ungía de tierra y era luz
Recorría mis calles y escondía hojas de papel
Con nombres de espacios prohibidos y cuerpos de mujer
Eran costillas desgajadas a pulmón del mes de mayo
Marchitas en la conciencia de dios
Por cada virgen yo tallé una muesca en el árbol de Josué
Nunca después volví a vestirme de barrio
Otros sí lo hicieron
Y terminaron hastiados en el atroz suspiro de una vena;
Ya no pude volver a vivir
Sin los ejes cartesianos de la música y de la lejanía,
Perdiz al vuelo
Abatida irremediablemente
Por el disparo del tiempo
REBROTA
Y la amenaza es bruma de carnero
Y el retorno
El desandar de la saliva cruzando un puente de sombras
En mil días pudiste cambiar de desnudo
Hacer brotar nenúfares en las muchachas vírgenes
Humedecer las mejillas con vino viejo
Y sobrellevar las venas huecas de la intemperie
Recuerdo
Que yo pasé sobrio casi todo el invierno
En mil días
Qué no rechazaste tú en mil días
Cada minuto era un enigma del perdón
Disfrazado de 24 horas melosas
Que no dicen lo que piensan
Solo te viven
"Ponte vecchio" en la fractura
Pudiste sanar perdones
Perdurar sobre mil espasmos en tu cuerpo tendido
En la hora sincera de la quedada crepuscular
No hay más vértices que el destino
Balada sufí del envenenamiento
Así me descorchaste
Arrodillada en el rumor de las palabras
Suplicando no soñar la hora del adiós
Y el cociente de los cuerpos con la resta
Ahora te digo,
Rebrota
Rebrota de lo que no te brindó pájaros de futuro
EL VACÍO
De turba es la memoria
De alquitrán de hulla,
No me puedo olvidar
Que cada historia ha vivido a una persona;
Arremolinada en la conciencia de ese espacio
Se desfigura el alma del arquitecto
Lo que vemos es lo que existe
Lo que no vemos
Es la materia orgániza creadora
Destruida por el desgaste de la fuga
La crudeza es observar
Los espacio vacíos
La torpe belleza de la esfinge
Y la red de sedimentos tejida
Sobre los despojos de la hiedra
Nada de lo que sintió .*. permanece
Ni siquiera los fantasmas
Han sido capaces de repoblar
La tumba anónima de la historia
NOCHES
Ayer doblé cuidadosamente a la noche
Doblé sus esquinas
Siguiendo meticulosamente las marcas
Dejadas por la penumbra,
La idea es que quepa en mi maleta
Entre la ropa sucia
Y que cada olor y cada sudor vivido
Se empareje con su tránsito de lo oscuro
Debería de haber una noche de cada sitio
Disponible para ser llevada,
Al menos una
Para cada persona que la haya sentido
La idea es desdoblarlas todas
En el sitio en que vivimos
Y hacer de nuestro mundo
Un santuario de ciertas noches y lugares
Para que las ausencias
No nos perturben más el sueño
Poesijazz y otros tangos indie
Qué pena de muerte
Hoy reuní en el juzgado de la sala número doce de mi corazón a doce testigos de mujer-tsunami. Todas llevaban su corazón latiendo aún caliente en la mano y reclamaban la pena de muerte para el mio... La causa prosperó y se ejecutó una mañana de viernes sin mi arrepentimiento...
Corrígeme
Corrígeme sólo si no me equivoco.
Corrígeme cuando te digo que no necesitas tu verdad
para reparar el daño intradermal
de ese chute de inocencia con el que alfombras los delirios de tu pesar...
Corrígeme sólo si no me equivoco...
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