domingo, 10 de agosto de 2014

DUKE MENTAL [12.782]


Duke Mental 

El Triunfo, Usulután, El Salvador, 1979. 
Duke Mental Nació en El Triunfo, Usulután en el año de 1979 estudio en colegios católicos hasta bachillerato, fundador del portal web Resistencia Musical en 2007. Ha participado en diferentes lecturas de poesía a nivel nacional e internacional. Algunos de sus poemas son publicados en la revista “El Mercado” León Nicaragua, al igual que en el “Suplemento Tres Mil” del Periódico Colatino El Salvador y En la Revista Ixpapalut San Miguel, El  Salvador. es parte de la antología en 2013 en “La generación del fin del mundo” Poesía centroamericana comprometida por la Revista Hispanoamericana de Cultura Otro Lunes, México. Al igual que en la Revista Intercultural Omni Bus N. 45 denominada “Un tapiz en el Centro”  (un coro de poesía contemporánea de América Central)  . Ha participado en exposiciones de pintura  en: El Salvador, Estados Unidos, Perú, Cuba, México, Honduras, Guatemala.

Was born in El Triunfo, Usulutan in the year of 1979 study in Catholic schools through high school, his first contact with art was at the age of 12 years, he  starts a website called Musical Resistance; He has participated in various poetry readings throughout the country and the International;  some of his poems are published in the journal “The Market” Leon Nicaragua, as in the “Supplement Three Thousand” Colatino El Salvador Newspaper. It has been anthologized in 2013 in “The generation doomsday” Central American compromised Poetry  for Culture Magazine “Other Monday” Mexico, and Intercultural magazine Omni Bus N. 45  “Un tapiz en el Centro”  (un coro de poesía contemporánea de América Central)   he has participate en diferents exhibitions in El Salvador, Estados Unidos, Perú, Cuba, México, Honduras, Guatemala.

David Fernando Duke Bonilla








La carta (fragmento)

IV

De verdad que quiero escribir una carta
que llegue un día a tus manos
y no sean noticias mías  ni de mi ciudad
quiero escribir una carta que cuente uno a uno mis golpes en la cabeza al respirar
pero  quien cuente  los golpes  sea el aliento que  respiré  y el viento que atraviesa mis
pulmones  inflamados de tanto tóxico
tan tóxico que todos llevamos muertos en la espalda  tan solo por llevar sus nombres en nuestros  documentos
nombres que ensucian los muros  más libres de estas venas  estridentes con códigos y rimas   que solo consiguen hacernos inmune al dolor
nombres que pueda descifrar tanta muerte entre  tanto silencio
que   brota entre tanta tierra y tanta noche.

Ojalá un día pueda escribir los golpes que me dio la neblina
y que el día que pueda escribir esta carta
no seas vos  ni yo el finado que diga:
No hay mayor acto criminal en estos días  que se pueda inventar  en este mundo
que hacer sonreír entre tanto llanto.





La Miseria Del Cielo

23

Un viaje surrealista de acidos.

los verbos ya no brotan mas que muerte
las palabras ya no dan vida
hijo de la miseria que queres desdibujar este pútrido mundo
si pensás que ignorando la muerte
la vida se mantendrá penetrándote los tuétanos
de verdad que ansío con ganas locas
drogarme de nuevo en el D.F.
doparme con los penachos de netzahualcoyotl
pincharme las venas con las plumas de la serpiente
inyectarme los ojos rojos  en sus puchos
ansío caminar de nuevo sobre sus venas
transitar de manera estridente
gritar borracho “la vida es una mierda”
ver los bueyes volar  en ordas llenas de putrefacción en plena madrugada
sus panzas preñadas de vísceras nostálgicas
amordazados a un narcótico derecho a la vida
para recordarme lo que soy
un deseo incumplido de cambio
un eclipse rojo donde revolarcarme en tus lunas
desangrándote sobre mis piernas como cual mutilado
Y de repente María Sabina me daba una prueba de sus flores
tratando de capturar sus  lunas
encendió una luz entre sus dedos
un obscuro pasadizo de otra dimensión
iluminó su rostro a la mitad
como lo hace el fuego a media noche
vi como sus flores  brotaban de su pecho
y nacían en sus ojos pétalos negros de luz
podía escuchar el sonido del resplandor
los cielos quebrarse como rugidos de papel
y durmió bajo mis costillas
juro que durmió bajo mis costillas
la luna de sangre
pernoctó bajo mi costado
sangró jade de gota en gota
verde y azul bajo los efectos de sus lumínicas oraciones
bajo los efectos de sus plumas
entonces tuve los hartos deseos de drogarme de nuevo
drogarme con locura
inyectarme luz en las venas
intoxicarme de olvido con tintas negras
que fluyen hasta mi cerebro
como simientes dentro de mis venas
toda la luz puede caber en mis venas
transcurre como un sueño
al despertar es posible que el cielo este siempre teñido de gris
ando la decadencia en mis manos
ando la decadencia en mi boca
y en mi lengua
ando como flor marchita el gusto
ando sabor amargo
pétalos  secos que recogí en el camino
pare reverdecerlos
ando cargando unas tijeras
para cortarle el cuello al viento
para degollar el tiempo que se derrite
ando  vomitando luz
repartiendo vida con mis manos
rompiendo el silencio
ando celebrando el corazón
como los psicotrópicos  los saben hacer
alucinando  dantescas savias extrañas  de sabor rancio
en mis obscenas venas  que estallan  de íntegra  bipolaridad
con ganas de fundirme con la fuerza de erupciones volcánicas
apresadas en mis manos
que irrumpen  de manera ingenua
aturdidos con placebo de nuestra verdad
buscando la salida de este maldito cielo…


Guatemala

21

La aurora solfea la partida
del llanto sobre el güipil
se hace brisa sobre la tierra sembrada  con desaparecidos
sombra que diseminó su bronce en la sangre Ixil
un lugar gris de Auschwitz
en la selva humada de los altos
la cárcel clandestina donde interrogaste el genotipo de nuestra sangre
la muerte acostumbrada al pobre
la burla del dolor ante un  comunismo de cartón



Somos gracia de llantos
inmensa masa de almas
justicia adentro de muy pocas voces
somos lagrimas con derecho a ser  lluvia
flores  para turismo de piedra
la piedra que trae bajo sus alas
la bondad interna de una flor
la dureza del sol
y la dulzura de la muerte
somos huesos que aparecen  al llover anhelando  la vida.

unos niños blancos mudos testigos de los féretros
cuidando la tierra desolada
la luz ausente  para los ojos de los mortales
esa luz concentrada en el luto
poniendo joyas sobre sus cabeza
decorando nuestro pensamiento de bronce
incrustandolo con el  fusil
tu Dios bucólico burocrático
dentro de las camas  giratorias
las medusas siendo biberones
desvestidas ante las hojas del limón  que fue testigo
de los hijos que se trago la tierra
que se  llevó las madres por el rió.

El litio  derramándose por mi cerebro
haciéndose  cristal en mi juicio
las lagrimas que siempre serán difíciles
el rechazo al cual nunca podre acostumbrarme
mis venas que me reprochan   las miradas.
Solo se han plantado las cruces
que no darán frutos
solo se  han plantado las cruces blancas
para recordar la muerte
se han sembrado ángeles
que se han vuelto barro y piedra
esos acueductos  de catedral
pizarrones de teatro que llevan como pecho
alcantarillas municipales
que solo  hacen alargar el olvido
el olvido de las generaciones.




Los Milagros

19

La mala letra
y la poca memoria existen Marcella
se quebró el infierno
en esta podredumbre
de ángeles con alas rotas
en el desfiladero de mi garganta
atravesado por el tiempo
muñeca porque te cortas las muñecas con tijeras
que solo sirven para acortar el viento
muñeca te retorces sobre mi pene
sin estar enamorada
te enroscas en mil  soledades
pidiéndole al santo sepulcro un perdón
si estos demonios no saben de culpas
si estas culpas no saben de demonios
los milagros existen Marcela
las repeticiones como vos  también
con las que me he drogado…






Mal Nacido

14

Mi esqueleto se quiebra
desnutrido por el oscuro cielo
desnutrido por el bronce que atraviesa mi cerebro
al pasmar el viento del infierno en un suspiro
aturdido con la muerte que trae en brazos
cuando hemos muerto mil veces
seguimos colgados por la luz que irrumpe el juicio
el sabor agrio dentro de su  boca
una voz violenta rompiendo el viento
una turba de palabras frías
quebrando  el etéreo tiempo
que trago por mi garganta rota
el rugido de su voz
es el aire quemado con la luz del silencio
sólo quiero ser ardor que el viento sofoca
una vieja forma septentrional de hacer las cosas
una consecuencia de abril
una refutación de la vida
un puto hierro en mi mano
una esquina negra quebrada y oscura
la pólvora astillada por el tornado en mis dedos
las líneas marcadas en mis brazos
una baraja devorando la carne
una accidentada vida que no vale más que los centavos que lleva en su pantalón
he nacido  un mal día
he nacido para morir el día  que Dios  no creo
he brotado de los orines
de los callejones que usamos para defecar
de los prostíbulos que guardan amores imposibles
he muerto  en el silencio de estas calles vacías
ahogándome en los ruidos estridentes  frente a ellos
he olido los pútridos olores  del infierno
y lo he llamado hogar.




El Desierto

14

El sonido del destierro prospera sobre vacíos
forma tumbas violentas
sacude el pequeño polvo de la tierra
que sembramos como simientes
dentro del concreto de nuestro pechos sin nombres
ungiéndolo en el espíritu de pócimas
cegando dantescas y resquebrajadas vidas

Tu boca fría y seca
canta el éxodo
modula la noche con sabor ardiente de oxido
el aceite salpica mi paladar rígido
su tartamudeo arrulla mi encéfalo
acaricia a mordidas el cráneo
deslizándose entre medio de mi cerebro
En un click divulga el susurro de la muerte.






El señor de los suelos

14

“Dios mío, si tú hubieras sido hombre,
hoy supieras ser Dios”
César Vallejo
El universo entero cabe en el abismo de tu mirada
en esos acantilados de tus palabras
el infierno mismo cabe en las flores que colgas en tu pecho
en los precipicios de tus caderas
en el infinito vacío  de tu alma  que se han convertido en tus piernas
me he drogado olvido por las venas
para vivir bajo los efectos de la libertad
me he drogado de vos para pasarte recordando en el silencio
como película de cinta magnética que raya el sonido
y conocerás la droga
y la droga os hará libre
me he dopado  con indiferencia
en esta autopista de los años
aquí traté de defecar  abrazos falsos
por las avenidas sucias de lo artificial
ensayé como excretar en las paredes el tiempo
intenté besar el excremento servil
pero definitivamente
no pude acoplarme a Dios.

La cruz roja  que clavamos en nuestras bocas
cabe entera en un botecito de alcohol de a dos coras
que cura las heridas
el mal de amores
el pie de atleta
y alguno que otro rasguño que pueda dar el reflejo del ácido bórico
de verdad que el cianuro no funciona en estos casos
cuando ya no podes sostener  tus dedos
se caen los cogollos del cielo
las Magdalenas  delante de mi
reprochando su perdón
a todas las he perdonado de sus pecados
¡vos no tienes Marías que se van!
no sabés de perdidas
no sabés que es decir adiós
con el alma  mutilada por un beso
no sabés que  es beber un bar entero en una noche
quemarte el esófago
y tragarte el olvido.
si nunca  has perdido la vida en un vaso de ron
si nunca te has ahogado en una botella
si nunca has sentido astillas en tu garganta
por sólo verlas partir.





Génesis 1:27

9

No me mireas a los ojos 
porque puede que no encuentres nada más que tu reflejo”.
Plastilina Mosh.

Dios está sentado a la diestra de su aguacatero perro
esperando que el sol le caliente sus decadentes pies
nos tira una bocanada de viento
en ella todo el óxido de su jadeo.
Dios espera las sobras de la basura como menú del día
no mira a la gente a los ojos
ellos son invisibles sirvientes
levanta la mirada retando el espacio
para inmutarse todopoderoso
sus brazos flácidos le cuelgan
al levantar la mano derecha al cielo
y ordenar a sus sirvientes los desperdicios del día
le cuelgan los pelos grises
sucios de tanta mugre por dormir en el suelo
y acobijarse con periódicos

Jesucristo marco tarjeta temprano y dejo de trabajar
cerrando las puertas de la licorería
no salvara más que su empleo
Jesucristo es precoz con su mujer de maniquí
pasa recordando entre espejos
y lineas dibujadas en su cuerpo
soy el verbo en falda viva
la palabra de este lugar inicuo
la luz de este instante
el olvido de las calles vacías
en los ojos de los transeúntes
la verdad de la muerte
la oscuridad de la perversa memoria
soy el arquetipo de tu sustancia
atrapado en el aliento
sobre el polvo seco que huelen los yonquis.

Maldito teléfono  de esquina
casi una vida cuando conocen a cristo
y lo dejan pertenecer  al verlo descalzo
para matar los pensamientos
se  masturba
revuelve la memoria de su marioneta
con el de su muñeca que infla de recuerdos con la soledad
un transexual llega a la esquina de su mente
con el cual erupciona de manera espontanea
y el espíritu santo brota de manera escaza.

Recuerda la culpa al ver unas xitotec que no vendió tiradas al piso
mientras se desangran las mujeres
y no solo de los lagrimales
en los túneles del silencio
dejando muñecos mutilados en los sucios sanitarios
con los ojos abiertos mirándonos
como retroproyectores psíquicos de culpa
recapacita en los alaridos que escucha de fondo
una chiquilla es deshonrada en el  motel de lado
descuartizada de sus alas y sus reinos de muñecas
puede escuchar su clarividencia lo que siempre calló
es atacado por sus pensamientos
trata de olvidar las cárceles donde enjaulo las bestias
que con tanto amor
imagen y semejanza creo.

Cristo sigue clavado en las agujas de sus venas
drogándose para llegar al paraíso
lapidando su alma con la pena de sus padres
con la pena de muerte que lleva en la bolsa de su pantalón gris
el acta de defunción incrustada en papel aluminio.
Escudriñando la calle para un trago de aguardiente
para una piedra  que se le callo
y nunca encuentra
para saciar su espíritu santo  disléxico
y bipolar dentro de una botella de caña
mira el reloj de otro pidiéndole la hora
para saber cuánta noche le queda
para hilvanarse adentro de la penitenciaría del tiempo
de la que escapo hace meses.

Somos la instauración del hambre de Dios
existimos en la miseria de su retorcida mente
nos llenó de sus utópicas historias
maldiciéndonos con infiernos de condenas antes
y después de morir.
Somos el retrato de Dios
y su analogía de suciedad
un espejo colombiano lleno de cocaína
que nos hizo indigentes
rebosando de miseria humana
en las bolsas de nuestras almas
florecemos destruidos por su ingenio
existimos como infiernos vivos
como fantasmas que se alejan al drogar a Cristo.

Vos siempre has sido  un infierno
en la droga de tus venas
haces parir el miedo
en una condena gris
sin escapatoria
siendo unos mal nacidos
en la frontera de fierros líquidos
electrocutados desde la ceniza
para morir el día  que no creaste
hemos brotado de tus  orines en las paredes
de los amores imposibles que guardaste en tus  burdeles
he muerto  en el silencio
con un vacío en este callejón de mi pecho
ahogándome en el crujido secreto
he saboreado el putrefacto gusto del infierno
y tu rostro
tu rostro lo hemos visto en el espejo con el que nos drogamos





Resistencia

9

“Anduve viajando muchos años por el mundo 
con el lucero de tu nombre en los ojos”Otto René Castillo.
Definitivamente uno adopta la nada como familia
barrancos como padres
animales como nación
acoge maniquís como amores
se agremia a la soledad
esperando el retiro de los años
y los amigos se vuelven patria.





El Mar y Ana

9

“Uno se pierde a veces en el fondo de una mujer 
y no vuelve a encontrarse jamás”. Otto René Castillo

Le robaré al mar el rugido de sus furias
en la cama de sus efervescentes soledades
en la hierba   y su lecho
me hundiré en el café tus ojos
hasta llegar al fondo de la eterna ausencia
compartiré el idéntico deleite por el ron
el sonido de sus rugidos
las batallas de sus olas con la arenisca
le despojaré los suspiros que escupe al dormir
y te acostaré en mis visiones
sobre el mar como en una cama
de flores que brotan como la espuma
dominando las tectónicas marejadas
sobre las cuales flotaremos como reclamando sosiego
como refugiándonos en el cielo
en sus aromas de sales que brotan como polen de mar

Te adjudique cada uno de mis poros
me enrede en tus agaves manos de cristales espumosos
crucé los planos de números imperfectos
pretendí ser la tinta de tus tatuajes ausentes
recluido por la bruna voz de tus ojos
en los discursos clavados al cielo de mi boca
en la lluvia de Marzo
en los aretes que cuelgan de mi garganta
en la flor de pacul que me encadenó .

Le hurtare la quietud a mi cama de océanos solitarios
donde me revolcaré con las sísmicas olas
mojándome  el paladar de los cuerpos
seguiré el ritmo de las batientes aguas
sobre la espuma emergeré de tus caderas
como lo hacen las dunas en el desierto
germinaremos como el viento y la sal
que flota como jinetes que luchan hasta morir en el aire.

Le asaltaré la calma a tu mirada
viajaré sobre ella batiéndonos
mientras las telúricas aguas nos violenten
me arrastraré sobre las dunas de mis rones
para extraviarme en el fondo de tus ojos
y no encontrarme jamás.





El Blues de Pedrito

3

Bailo pegado con la soledad y sus sombras
de pecho en pecho la llevo clavada
las noches me llevan de la mano
sobre transparentes ruinas que cargo como nudos en mi garganta
sobre el torso el peso de la insistencia para con vos
tal pasadizo de otra dimensión
el peyote de tus audacias que viene como flash back en una tonada
la post guerra que llevo colgada al cuello
en una generación degenerada
en un coctel de psicotrópicos mezclado con aguardiente
al ver vivir de rodillas ante la ignorancia del abandono
el servilismo ante el fallecimiento
la post guerra es una guerra sin bandos que cargo en mis bolsillos
sin verdades y medias mentiras
de números sin vida
que logran afonía negación y olvido

Convicto voy rolando a bailar en el vacío de mis pies
bañándome con agua bendita
ahogándome en un vaso de ron y aguardiente
un blues de fondo encadenado a mi cerebro
ligándome al dolor del fondo en un bar
negando todo lo que he vivido
negando con acciones nuestra herencia
voy arrastrando los pies
y en ellos cicatrices de un legado.

El paraíso está lleno de multas por pagar
drogas que saltan rasgando la garganta en una nota
balas que cuelgan de las trompetas tristes que suenan en el olvido
Jamás alcanzaremos la gloria en este baile
el honor   es la soledad
la muerte
la despedida
mi tempestuosa existencia
las moscas
y el polvo invaden alrededor
aún las moscas merecen vivir
y ellos  tratan de matarlas
el polvo irreverente irrumpe el posmodernismo centroamericano
las moscas bailan alrededor de todos
los roedores transitan por las melancólicas y finas avenidas
este es el paraíso que tenemos que penar
y todos callan
ejecutan el silencio en sus incomodas memorias
al verme bailando se avergÜenzan
como se averguenza del aire el pájaro
como la flor se apena de las piedras
este es el blues de memorias que bailo
hasta romper el suelo en mi borrachera
este es el blues que bailo para incomodar su silencio.





El Percusor

31

La delicadeza de tus labios partidos por el sol
reventados a la fuerza del desierto
por donde pasamos todos los días
es la que me aturde
como lo hace  la muerte
cuando hemos muerto mil veces
hemos sido colgados desde los tarros de pega
arrastrados por la luz
quemados por negarnos a caminar sobre ella
cristos negros de narices rojas
polvoreadas con aserrín de vacas locas
que te dan pacas verdes en esta tierra de fuego
somos cristos de narices rojas
encadenados a líneas blancas que adornan las mesas mas finas de un cabaret.
¿que hacemos ante la muerte?
si hemos muerto ante la vida
si cobramos engañando la savia
y nos burlamos de la existencia
como hacemos ante su canto
si chilla y chilla.

Rompiendo el silencio
no haremos mas que destemplar la vida
como cuando brota la sangre de la tierra
como cuando  brotan los muertos como plantas
y solo florece el silencio como buen fruto
que no alimenta mas que la muerte
que se pudre dentro nuestras animas
como el rostro de un  beso.












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