Ixchel Dennise Pacheco Ortíz
Nació en Ensenada, B.C., México en 1991. Es egresada de la licenciatura en Literatura y Filosofía de la Universidad Iberoamericana Puebla; colaboradora habitual de la revista universitaria Contratiempo. Ha publicado en la revista electrónica México Electoral y en el portal de transparencia Con los ojos abiertos. Es parte del grupo de investigaciones del Seminario de Estudios Literarios de la misma universidad. Sus temas de interés son poesía, erotismo y política, estudios latinoamericanos y alteridad.
Fui descalzándome en cada playa
Dejé una huella en las olas que flotaban, una isla,
Marqué otra en la arena dorada de una playa sin nombre,
Puse mi falda en un tronco movido en el vaivén del ensueño,
Olvidé mi ombligo en el Mediterráneo.
Fui descalzándome en cada playa,
desnuda
a solas.
En rojo
Esta mañana amanece en rojo
-en un rojo que vacía: carmín cereza en champagne,
Rojo Cañón de colorado: río seco, pegajoso, rojo,
lacrimógeno, salobre, oscuro, desgarrado, rojo-
Y es de ese rojo que no llora.
He visto a compañeros de alma asesinada
que se han vuelto despojos de un miserable gobierno,
los he visto esconderse, correr y gritar,
los he visto escapar en grietas y agujeros:
Italian cofis, escritorios, aypods y lindos autos.
Y los he visto también, a los que van de pie con sombras
en bicis y muletas, y de a sillas, y de a piedras.
Que van a romperse la madre, el padre, los hijos, los bisnietos
la novia, el fiancé, la viejita, el café de la mañana.
A quebrarse y sembrarse como el pie de su tallo.
Dijeron: 105 heridos, un muerto.
Un muerto.
El silencio gritó cuando el silencio se hizo amordazado
Un muerto. Jonathan.
y los barrotes estrujaron las jóvenes gargantas
Un muerto. Abraham.
con un nudo de corbata –lila o roja o verde y azul –
Un muerto. Antonio.
un nudo que no los dejó respirar.
Javier. Un muerto.
Se rompieron cristales, se quemaron llantas,
Un muerto. Mónica. Una muerta.
se lanzaron bombas y gases salitrosos, fuego.
Un muerto. Diana. Una muerta.
Hubo letras y consignas, órdenes federales;
Un muerto. Joel.
Y hubo miedo y arrepentimiento y enojo y culpa
Un muerto. Gustavo.
y soledad, apoyo, alivio, pérdida y silencio.
Un muerto Fernanda, Jessica, Karen.
Hubo silencio.
Una muerta. Lupita.
Hubo silencio. Osvaldo. Un muerto.
Silencio, hubo. Ha muerto Miguel. Ha muerto.
Silencio. Carolina ha muerto.
Un muerto Daniela un muerto David un muerto Roberto un muerto Judith un muerto Lucía un muerto Carlo Regina ha muerto Iván has muerto Alejandro.
Un muerto. Mi muerto. Nuestros muertos.
Silencio.
Un día este hombre infinito habrá de morir.
te dejo mi beso marcado en la nuca
para no olvidarte,
mientras te dejan volar en un viento
que nunca ha dicho nada.
A modo de regalo
Bajo el sol que muere,
la caricia de un viento sin palabras.
Recostada entre el romero
Y el aterciopelado invierno.
En mi extensión de epidermis,
cada verso tuyo
es templo recién lavado,
sábana puesta a luz de luna,
en espera del juego.
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