sábado, 11 de febrero de 2017

MARÍA JULIANA VILLAFAÑE [19.935]


MARÍA JULIANA VILLAFAÑE

María Juliana Villafañe, nació en Santurce, Puerto Rico. Es poeta, narradora, guionista, dramaturga y compositora de música popular. Ha publicado los poemarios Dimensiones en el amor (Ramallo Brothers Publications, Puerto Rico, 1992), galardonado en Nueva York con el Premio “Palma Julia de Burgos”, Entre Dimensiones (Editorial Isla Negra, Puerto Rico, 2002), el cuento juvenil Aurora y sus Viajes Intergalácticos (Planeta, 2003) y el poemario Volar Sin Alas (Ediciones Baquiana 2012).

El fenecido jazzista Jon Lucien incluyó sus letras en varios discos: Mother Nature´s Son (1992), Man From Paradise (1993), Endless is love (1997) y Jon Lucien by Request (2003).

Recibió el Primer Lugar con la letra de la canción “Vive Hoy” en el III Festival Iberoamericano de la canción de Puerto Rico y Argentina. Premio de Lírica Popular del Instituto de Puerto Rico en New York (1995).

Su nombre fue incluido, como parte de los escritores puertorriqueños que residen en los EE.UU., en la Enciclopedia del Español en Los Estados Unidos – Anuario del Instituto Cervantes (Editorial Santillana, 2008).

Sus poesías y textos han sido publicados en múltiples antologías y publicaciones colectivas en Argentina, España, Estados Unidos, México, Perú, Brasil, Puerto Rico y Venezuela. 


QUIERO VOLAR

Quiero volar al infinito
desde los nevados picachos
a través de las nubes
sentir la humedad en el rostro
cruzar vientos de tormenta aplacada
palpar el desafío de la naturaleza
que puede lanzarme a pedregales
vivir la libertad del cóndor
sobre un mundo que no necesita rescate.

Quiero volar al infinito
sentir que nada hace falta
con esa libertad de soledad
majestuosamente voluntaria
acompañada del grandor
que otorga la naturaleza.

Quiero alejarme de todos
olvidar lo cotidiano
urdir mi vuelo más lejano
dejar atrás la noción de que he amado
quiero volar y escuchar el silencio del vuelo
para olvidar
mientras vivo de los recuerdos.



ME PIENSA

Me piensa piedra dura, inquebrantable
me baña limo, resbala
me baña río, agua mutable
me abandona para vivir mares.

Me deja presa de arena
al final de su cauce
Me piensa piedra
y soy luz que se cuela en manantiales.

Me cree fuerte y soy fiera herida
en el valle que descansa
en el frescor de sus aguas
voluntarias

desniveles que me bañan.

Me piensa piedra
me piensa arraigada

¿Me piensa?



Caen las Hojas

Caen las hojas lentamente
Una se detiene a mis pies
La tomo en mi mano para guardarla
Recuerdo de un otoño en Madrid
Salimos de una tasca cualquiera de la ciudad
Risas, algarabía, burlerías
Amigos disfrutando la noche
Cruzábamos la calle casi con premura
Tenía que partir al otro día
Sobrevolar el mar para el regreso
Me despedí a la salida del metro
Con nostalgia presentida

Ya casi amanecía al acercarme
al hotel
Un camión se detuvo delante
Dos puertas enormes se abrieron 
Asustada me detuve
Un presagio fuerte inundó mi alma
Presentí que algo no andaba bien
Entonces las vi
Las bajaban del camión una a una
Mujeres a las que les colocaban en brazos
Niños inertes que no protestaban

Niños que no lloraban
Muñecos enajenados, narcotizados
Parecía un acto normal
Comienzo de una nueva jornada
Ante mis ojos pasaban 
Mendigos silentes, indefensos

Yo, imantada a la pared de un edificio
Impotente, asustada 
Sintiendo la luz del nuevo día
Iluminar la escena
Cubierta por una sombra
Tinieblas que a la luz del día 
Causan 
Mi rubor infinito

Siguen cayendo las hojas!



Condena

Tenía todo listo
para embrujarle, hacer 
que me amara más
cada dia
el lápiz rojo de madera,
la vela rosa
aquellas más pequeñas azul y verde
su fotografía
y aquel objeto que dejó atrás
o tal vez olvidase
tenía las tres rosas blancas
todo el conjuro para atraparle
en esa habitación de una sola puerta
con una ventana a la luz de la luna
tal vez importaba su fase
era la media noche de un viernes impar
complementé todo con un perfume aromático
sólo
para condenarme!


QUEBRADA MUJER

Yo, quebrada 
riachuelo que se pierde en medio de la montaña
escondida bajo el follaje, entre alimañas y piedras
esperaba llegara, quien mi corriente disfrutara

Te acercaste tú, hombre solitario
te posaste a mi orilla
tus manos acariciaban mi costado 
yo enmudecida, no permití que mis aguas crecieran
y olvidaras que en ese rincón de selva
existía, plácida, dormida

Siempre, a la misma hora sentado a mi orilla 
escuchaba el latido interno
el lamento sordo de mirada perdida 
en mis aguas estancadas
rostro de nombre secreto 
despertabas mis claros de luna
deseaba penetráras mis aguas 
para lamerte el cuerpo, con mi corriente cristalina
pero te marchabas y quedaba sumida 

Un día tú, hombre tímido, te desnudabas
se agitaron mis aguas cuando penetrabas mi mundo
y crecí bravía deseando ser río
te arrastré en mi corriente sintiéndote nadar mis adentros
me moldeaban tus manos, respirabas por mis poros
y sólo aquel paraje del bosque conoció 
como las aguas de una quebrada
se convierten en río y se desbordan.


Silueta

Miro la foto en la mesa
mi silueta cincelada
en una piedra
sueño
Machu Pichu detrás
lleno de antigüedad
medito
respiro hondo
y veo tus ojos
mirándome
a través del lente
de la cámara
lloro
no estás.



Damas de la noche

Trascendida por la realidad
hoy, Madrid me sabe a lágrima
imantada en el dolor
cae la tarde
desde mi ventana del Meliá
veo aparecer
las damas de la noche
tristes
sonreídas
tiritando de frío
proyectando vuelos imaginarios
yo, una sombra en el encuadrado
de una ventana entre mil
testimoniando
su falsa verdad.



TU AUSENCIA

Las imágenes de tu ser
me iluminan
irrumpen mis espacios
te presiento cerca

               obsesión de tenerte
cuando estás lejos.

En esta noche en que te pienso

se hace nuevo el lenguaje
aprendido en tu piel

invento nuevas maneras
de amar
                con fuerza incontenible

tu recuerdo excita mi ansiedad
para albergar tu ausencia.


Entre dimensiones. San Juan, Puerto Rico: Isla Negra Editores, 2002. 80 p. Prólogo de Francisco Matos Paoli. 


Fin o comienzo

Ese cristal 
encuadrado de negro
como si vertiera luto
sigue adornando
los espacios
vacíos
de mi estancia

En él descansa
la figura de ese ser etéreo
que puebla mi existencia
ahí están los colores
que faltan
ahí está tu imagen
perdida en el comienzo
del fin



Latido interno

La ventana del interior se abre
me asomo y veo
lo que deseo ver
una voz se levanta y advierte
que es una insensatez
escuchar el latido interno
miro y veo la felicidad
construída en ese mundo en que a escondidas
se advierte la soledad del pasado
siento el privilegio del futuro imediato
comienzo a meditar
se cierra la ventana.



Volar sin alas.  Miami, Fl.: Ediciones Baquiana, 2012.  106 p.  ISBN 978-2-93664707-1 


JUEGO DE CUARTOS

Desde mi ventana veo la luz
todavía encendida en el otro cuarto

le imagino
sentado frente a su caja de palabras

yo
          leyendo un libro
                              somos tan iguales
mi alma ya no aferra a su amor
          se desgarra
                              por el desasosiego
de dejar ir
          a un ser que se ama
vivirá otra ilusión
                      otro amor
tendrá hijos
                      será feliz

yo
          un ser en su vida
que ve
            como los años
deforman su sombra.



AÚN RESPIRO                                                

                      En memoria a los compañeros del 
                      vuelo AF447.


Salí al pasillo de aquel cuarto pequeño 
de cuatro literas
choqué con cuerpos inertes

un niño flotaba en el techo
quise alcanzarle
toqué su manita fría
un temblor convulso me arropó.

¿Que hacía yo allí 
         en aquel avión que 
navegaba lo profundo del mar?

¿Será que me miré cara a cara con la muerte 
y vi su reflejo?

Desperté
era una escena tan real 
como la de una de las mejores proyecciones fílmicas
yo viva 
construyendo sueños fantasiosos
Con la realidad.

¿Que busco?
            ¿A dónde voy?

Tal vez la respuesta está en el hoy
en este sublime momento 
donde agradezco
que aún respiro.



MILAGROS INEXPLICABLES

Te veo en la distancia
como en escena cinematográfica
tu respiración cerca
en este pensamiento 
que no logra apartarme de ti
veo tu sonrisa
la de siempre
profundos ojos hablan 
de vivencias 
amortiguadas por el tiempo
vida plena
experiencias que hago mías
el amor a la tierra que haces tuyo
aire desde el norte sopla
con visos de brisa fresca.

Vivo esa vida que no compartí
Como adivina que se cuela en el ser
el latir de tu cuerpo
corazón desbocado
para amar intensamente.

Siento, como la mujer que te recibe
arrastrándome a tu mundo de placer desconocido
despierto a la vida que me privó tenerte
esclavizándome 
a buscarte en cada cuerpo
en que me perdí
sabiéndote más allá de la vida
acrecentando la espera 
en mi mundo interior
sueños inventados
hambrienta al saber
que aquella mi emoción de niña-mujer 
despertó
con aquel primer beso de amor
que no trascendió.

Percepciones sensoriales
se expanden por todas las edades 
latidos de vida
milagros inexplicables
estar para siempre en el centro de la llama.



EN VIENTRE AJENO

El micrófono en la habitación
emite el sonido campanario
el martilleo constante de la máquina que alimenta
los últimos aires que respira
El padre se desprende lentamente

Desde muy joven no dormía en esa casa
tan extraña y a la vez tan familiar
Cada golpe de ruido en esa otra habitación
despierta el presagio de una vida que se apaga
el padre ya no abre los ojos
No te mira
pero sabes que te escucha
y te silencias para escucharle también
pides, rezas para que se apiade quien sea
que esté a cargo de ese menester
y le acompañas a despertar en otros parajes
mas nobles que éstos que hoy deja
El padre ya dijo que te amaba
se despidió, rogó le llevaran

Hoy en el silencio sepulcral que no se escucha
por los sonidos de la máquina
la hija y el padre 
se dicen tantas cosas
así como cuando él le hablaba estando
en el vientre de la madre

El padre ahora es niño en otro vientre
querido por siempre.



CIEGA

Me he mirado a través de sus ojos
soy una mujer orientada
casi loca
que intenta contagiar su locura
soy una ajustada
que habla con las estrellas
comunica con los astros
a la que visitan entes
de otros universos
me miré a través de sus ojos
y sólo vi
unos ojos terriblemente
ciegos




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1 comentario:

  1. La vida nos hace regalos inesperados que nos llenan de inspiración para seguir adelante. Así ha sido con esta maravillosa reseña sobre mi trabajo poético que hoy me regala Fernando Sabido Sánchez a quien agradezco sobremanera.

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