lunes, 6 de diciembre de 2010

2334.- DANIEL BOYACIOGLU


Daniel Boyacioglu nació en Estocolmo (Suecia) en 1981 y tiene raíces en la cultura asiria cristiana, de donde provienen sus padres. Ganó el campeonato sueco de Poesía Slam dos veces: en 2001 y 2002. Es autor de los libros de poesía: Istället för hip hop (En lugar de hip hop), del 2003, Gråter aldrig samma tårar två gånger (Nunca lloro las mismas lágrimas dos veces) del 2004, Haikupunchline: hundra dikter (Haikupunchline: cien poemas), del 2005, Fint som snus (Cosas lindas), del 2006 y ha grabado los siguientes discos: The Very Best, del 2004, Visa 2007: Show me the money, del 2005 y No Hit Wonder, del 2007.

Daniel Boyacioglu tiene a la poesía como materia prima de su actividad artística y literaria. Con poesía empezó y a la poesía siempre regresa, dice él mismo. Se desempeña, sin embargo, en distintos ámbitos, por ejemplo como showman, en monólogos donde recita, canta y se acompaña con música. Ha tenido programas en la radio y ha incursionado esporádicamente en el teatro, actuando como invitado, hace un par de años, en una puesta en escena de la pieza Esperando a Godott de Samuel Becket, nada menos que en el prestigioso Teatro Real de Estocolmo (dirigido por Ingmar Bergman durante muchos años). Suele participar en los más variados eventos, desde lecturas maratónicas de Harry Potter hasta como presentador en distintos actos de solidaridad con movimientos internacionales, como la reciente revuelta de los monjes en Birmania.

Aunque el mismo Boyacioglu desista de etiquetarse en algún grupo o representar a una minoría, su éxito en el mundo de la poesía y el espectáculo ha significado una novedad: la presencia de un joven integrante del grupo creciente de los llamados “inmigrantes de segunda generación”: jóvenes nacidos en Suecia pero con padres llegados de otras culturas. El hecho de haber nacido y crecido en Norsborg, un suburbio de Estocolmo con una alta concentración de inmigrantes, y pertenecer a una minoría cultural, enriquece la poesía y la actuación de Daniel Boyacioglu, quien introduce mucho del slang inmigrante de los suburbios, tanto en su vocabulario (en sus textos publicados) como en su entonación y pronunciación (en sus perfomances).

Los temas de su poesía combinan las grandes y frecuentes preguntas existenciales con una presencia de la cotidianeidad, de una manera poética, ingenua y fresca; quizás a veces demasiado espontánea. Para Daniel Boyacioglu, su poesía es sólo eso: “poesía, nada raro, sin rebusques” como él mismo lo dice. Sorprende, sin embargo, que este joven sueco/asirio declare tener como poeta favorito al chileno Nicanor Parra, pero en él ha encontrado el vuelo en lo cotidiano combinado con la elegancia de la expresión poética. Los textos de Boyacioglu han madurado notablemente, desde los espontáneos y carismáticos poemas de su primer libro hasta los más concentrados de Haikupunchline. Una característica que sin embargo mantienen sus poemas es el trabajo concreto que el autor realiza con el lenguaje para dar a sus textos ritmo, sonoridad, oralidad. Repeticiones, asonancias, juegos de palabras, rima, prosa poética o frases truncadas. Son poemas escritos fundamentalmente para ser leídos en voz alta, aunque también funcionen en el silencio del papel. En su último poemario, sin embargo, Daniel Boyacioglu parece encontrarse frente a un cruce de caminos: una especie de cansancio o indecisión se hace presente en sus páginas: ¿hasta qué punto su éxito en el ambiente de la Poesía Slam y como showman, impulsan su desarrollo como poeta o lo frenan? Algunos críticos han dicho que así como muchos poetas se hacen un nombre después de publicar, Boyacioglu publica porque su fama lo antecede. El mismo autor dice en uno de sus poemas (en su último libro Cosas lindas): “Abandono esta cosa de la poesía / ya tienen mi nombre / hay en realidad tantas cosas / que pudiera hacer”. Y probablemente, este joven poeta (¡de apenas 26 años!) esté en un momento de su carrera en que deba decidir su camino, demostrar su garra poética y posiblemente, explorar nuevos caminos.

En su más reciente álbum, No Hit Wonder, editado a mediados de 2007, Daniel Boyacioglu retorna con renovadas fuerzas a la música, en un estilo que conecta tanto con el rap, el funk y el hip hop y donde siempre los textos (propios) se ubican en un primer plano.


Presentación y traducción: Lilian Fernández Hall




Discurso antes de un entierro

Tuviera que estar presente en tu entierro
no vendría con traje de luto,
Tuviera que decir un discurso diría:
No tengo nada bueno que decir
sobre este hombre,
no lo conozco.
Lo que sé es que fue un hombre pésimo,
de la peor clase
una pesadilla entre las pesadillas
Una pesadilla que yo hasta hoy
he mantenido viva
para minimizar el riesgo
de llevar el nombre que me tocó en suerte
Nada está olvidado
Nada está perdonado.
Ya que estamos reunidos podemos aprovechar para constatar
que murió una muerte democrática
Una muerte a enterrar.
Una rosa deposité en la tierra
para diferenciar entre la rosa y donde yacía
Si lloré, lloré lágrimas de alegría
y dije mi adiós.









Para quien ha llorado lo suficiente

En una ciudad ventosa en ese momento de la vida
y en ese lugar sobre la tierra en que el viento había conseguido secar
sus lágrimas para siempre tenía yo motivos para llorar

Yo la había tomado por ese tipo de artista
que me da dolor de estómago de sólo encontrar

Ella me iba a llevar en auto de vuelta a la estación

Ellos compraron un auto juntos en el 91
al año siguiente, en el 92 murió su marido

Yo lo lamento, porque es lamentable

y le cuento sobre mi padre, una cosa cada uno
es suficiente
con la edad suficiente para ser mi madre
se convierte en mi hermana y yo en su hermano
comunión en el dolor que despertamos

algunas cosas te tocan
otras pasan de largo como el viento
Cuando sopla más fuerte
se derrama una lágrima

Ella dijo que se quedaría con su auto
y cuando lo lavaba se sintió bien.









Paréntesis

nadie despidiéndome
no estábamos de acuerdo
no les parecía que yo viajara

nadie dándome la bienvenida
por qué me la darían
yo no me consideraría en destino

compañeros de viaje
que no hacen el mismo viaje
sonríen y yo les sonrío de vuelta

ni siquiera cuando compro café
me quito los audífonos

puesto que sé lo que cuesta

por cada mentira adquirida
consigue algo a que llamar verdad

el tiempo una invención
pero el viaje verdadero
en todo caso el vivido

nadie dándome la bienvenida
por qué me la darían
yo no me consideraría en casa









Qué agradable sacarse los zapatos

Qué agradable sacarse los zapatos y las medias también

me doy cuenta ahora que hay cosas que tengo que hacer
que serán difíciles de realizar
que no puedo contarle a nadie
porque si no no las haré nunca.
En este preciso momento quiero doblegarme,
rendirme y oponerme a todo lo que soy
o rechazar aquello que creo ser
o nada en absoluto
Había una maestra una vez
que dijo que yo quería llegar tarde a una prueba
porque llegué tarde a una prueba
y que tenía que ver con el inconciente
la rendí
lo hice finalmente.

Mira si me librara de despertar
y no volviera a casa
o si me librara de despertar
y llegara a casa

con un barco siguiente o con un autobús más tarde

no hay árboles o tapetes con los que yo sueñe
con lo que yo sueño es mucho más un sueño










Bautismo

La sangre es más fuerte que el agua.
Las manchas de sangre son también más difíciles de lavar
que las manchas comunes de suciedad.

Me reí casi hasta desfallecer
cuando leí lo que alguien había escrito
sobre el afiche de información de las Autoridades de Carretera
en el metro bajo el lema
don’t drink and drive
en letras negras:
just smoke and fly.
Con frecuencia se mezclan cosas,
palabras que no debieran ser mezcladas.
Pánicoangustia, pánico es una cosa
angustia otra. La silla, una silla.
Por qué no abriste la puerta
antes de estrellarte contra la pared
o es que no había ninguna puerta
detente, corre alrededor, haz algo.
Sobreanalizar es otra
o pensar demasiado
Yo pienso bastante
en gente que no piensa nada
antes de abrir sus bocazas:
La sangre es más fuerte que el agua.
Las manchas de sangre son también más difíciles de lavar
que las manchas comunes de suciedad.









Los agujeros

(lee el libro como un libro cualquiera
como si tuvieras una prueba el martes)

Cómo podría no escribir esto
yo escribo yo escribo lo que puedo
y llevo adelante mis batallas
Hojea y sigue hojeando
entre las páginas del libro
algo puede si se mira
descuidadamente
parecer unos dos puntos
no uses ninguna lupa
cuando leas mi poema
yo no usé ninguna cuando lo escribí.
Los agujeros que puedan aparecer cuando busquen
no estaban pensados
y es algo que ustedes crean solos
Hojea y sigue hojeando
entre las páginas del libro
no uses ninguna lupa









El orden mundial

Las llaves y el tabaco en el mismo bolsillo
en el bolsillo izquierdo de adelante en el sentido del viaje

y el celular en el otro

la billetera con el dinero, la tarjeta de crédito, la foto de mi hermano
y los recibos guardados del taxi en el bolsillo derecho de atrás

suelo contar hasta cuatro
para cerciorarme de que llevo todo

Lo valiente es no tener miedo
por más románticamente que utilices el término
no puede la gente que reconoce su miedo
llamársela valiente
cuando justamente es a eso a lo que les tienen miedo

a veces me siento como un viejo bien vestido
que se va pudriendo por dentro y que a pesar de mi disfraz
emana un hedor reconocible aún a la distancia

cuatro años son o nada
o cuatro largos a atravesar
depende de lo que se haga de ese tiempo

Es mejor tocar una canción de Jimmi Hendrix
en una versión que carece de guitarra
un trapo empieza tarde o temprano a oler a trapo

Le toma un instante a un superstar
moverse de un lugar a otro
y viajas junto a alguien
ya como una pareja
toma más tiempo
que cuando viajas solo

Es por ejemplo mucho menos simple
cruzar la calle
si hay mucho tráfico
no se puede en realidad tomar una decisión
por dos y a la vez arriesgarse
además que las muchachas caminan más despacio

Poemas de Gråter aldrig samma tårar två gånger (Nunca lloro las mismas lágrimas dos veces). Estocolmo, W&W, 2004.



http://www.letralia.com/transletralia/slam/03.htm



No hay comentarios:

Publicar un comentario