Mónica Torres Medina
(Miranda Torres)
- Durante diez años estudia arquitectura y urbanismo en la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de Las Palmas de Gran Canaria.
LA VIDA DE LAS NUBES
(Título tomado en Facebook de una página homónima).
No sé mucho de nubes,
salvo aquellas que De Quincey describió
con los arabescos de su pluma,
destronado, y, por tanto, paradójicamente lúcido,
en el decimonónico Londres
por el que deambulaba su hambrienta desdicha.
Perdí a las nubes de vista allá por el pasado siglo,
en el que una única e imponderable las absorbió a todas,
tras una absoluto acto de deglución
de la memoria del rastro de las mismas huellas de la tierra,
y de los cielos de cientos de miles de millones
de constelaciones familiares.
Quizá con el objeto que olvidáramos a las nubes verdaderas.
Pues recaudó fondos y y publicitó estadísticas,
con el afán de demostrar que era la nube más inmensa,
y que la construyó el hombre.
Oscuras Babeles de ceniza quiero olvidar,
pero ésta aun no acaba de descender.
ALEGORÍA PARA CASAS VACÍAS
Exclusiva alegoría
para casas vacías.
Me daré un respiro
para visitar
el doméstico deshabitado.
Se abrirán los pulmones
al participar
del silencio.
Regresaré allí para quedarme,
pero no a dormir.
Acércate a sentir el silencio.
My heart
ha cobrado vida.
Los cristales rotos
de la puerta de entrada
ya no están tan afilados.
Acércate.
Tras la siega
dejé pasar un tiempo
y oreé las estancias.
Pero pronto
se ha de visitar el templo
de la pequeña familia.
Para luego recordar
entre las sábanas
con los ojos abiertos.
CREÍMOS
Creímos que habíamos nacido aquí,
y no era cierto.
Surgimos de una espontánea
eclosión en el aire.
Creímos que habíamos pisado aquí,
y es probable que no dejemos rastro alguno.
Señalados o aparecidos,
alborotados,...,
con nuestra mímica justificamos
cierto sentido alrededor de la especie.
E incluso, ensimismados,
simulamos dormir
aposentados sobre la tierra,
a lo largo de millones de sueños.
Antes.
¿Y después?.
Creímos que los recintos iban a proteger
esperanzas.
Que los obstáculos nos levantarían el ánimo.
Que alzando símbolos
no acabaríamos colgados de ellos.
-
No hay comentarios:
Publicar un comentario