Frank Spoiler
Frank Spoiler cuyo nombre completo es Francisco Javier Sánchez Mira, escritor español nacido en el año 1961 en Badajoz, perteneciente a la zona suroeste de la Península Ibérica española. De padre albañil, prosiguió la tradición familiar mas tarde en la provincia de Barcelona, donde se trasladarían por cuestiones de trabajo, en septiembre del año 1973.
Años más tarde, sin estudios, pero con gran vocación literaria lo llevaría, atraído por la afición de uno de sus hermanos, (un admirador del genial poeta Gustavo Adolfo Bécquer), a escribir sus primeras poesías. Esto sería allá por el año 1975 con 14 o 15 años. Durante los años sucesivos no dejó de escribir ni un solo día, compartiéndolo con diversos trabajos, a saber; aprendiz de carpintero, de artes gráficas, peón de albañil, camarero, oficial de lavandería, Oficial maquinista en automoción, vendedor de seguros, dueño de restaurante, peletero, autónomo de la construcción, etc... etc... Años más tarde (Junio del 2012), auto publicaría en Amazon su primer libro, "Poemas para componer una vida", saldría a la venta en la plataforma digital de Amazon en Junio del 2012, y lo seguiría ese mismo año:"Sucede a diario: micros de terror urbano" (micros y relatos de terror urbano) y "Poemas para componer una vida 2", todos en el mismo año.
Sus libros; "Poemas para componer una vida 1 y 2" ahora son; "Puntas de lanza al corazón" y "El Celador de tus poemas". También cabe recordar, en ese mismo año, su colaboración (con un cuento), en una antología de cuentos, antología solidaria totalmente altruista junto con otros diecinueve escritores indies titulado, primeramente, "Cuentos de Navidad" (se editó en las fechas navideñas) y que ahora se titula, "Cuentos con sabor a chocolate". En el año 2013 también publicaría su tercer libro de poemas titulado, "Poesías desde las entrañas, hasta un último aliento”, más duro, con mucho dolor y con una desesperación que sale espantada de sus propias entrañas huyendo de sí mismas. Lo seguiría, también en el 2013, su primera novela más carismática (hasta el momento), “Soy un asesino... sin serie”, un Thriller con connotaciones de ciencia ficción, terror, policíaca o fantástica. Un asesino muy "particular", ácido, violento, caradura y simpático. (En preparación su segunda parte, “Gabriel... ha vuelto”)
En este año del 2014 ha publicado su cuarto y quinto libro de poemas; “Alas rotas, el muchacho que perdió su sonrisa” y más recientemente, “Poemas: del dolor, el amor y otras pasiones”. Éste último ya por una editorial llamada Tempus Fugit Ediciones.
Próximamente también verá la luz, por esta misma editorial, una recopilación de micros y relatos de muy diversos géneros.
¿Qué más se puede decir sobre Frank Spoiler? Pues, alguna cosa más cómo por ejemplo, que no acabó la primaria, que era hijo de Ángela y de Blas Ramón, ama de casa ella y albañil él. Su padre fue un hombre trabajador donde los haya, que se vio un día (como tantos y tantos españoles) en la necesidad de viajar a Francia o Alemania para ganarse el pan y mantener a su familia numerosa de ocho hijos y esposa, además de trabajar también en las minas de carbón, en León, (en Castilla la vieja).
Frank Spoiler empezó a escribir a la corta edad de quince años (meses más, meses menos). Principalmente poesía, gracias a su hermano, un admirador de Bécquer, quien a fuerza de leerle sus poemas fue quien le creó al autor la afición por leer y también escribir poesía.
Luego por su cuenta empezaría a leer a autores tales cómo; Pablo Neruda, Rafael Alberti o Juan Ramón Jimenez (entre otros), de poetas, y, Gabriel García Márquez, Frank Katfka, Isaac Asimov, Julio Verne, Ray Bradbury, Arthur C. Clarke, o H.P. Lovecraft. Entre otros.
Entre medias de todo esto, conoció a la que luego sería madre de sus dos maravillosos hijos, a los cuales adora y son su máximo orgullo y principal motivo de luchar y vivir. Actualmente está divorciado y lejos de sus hijos, lo cual solo consigue que su prosa sea mucho más dura, desarraigada y seca.
Calla, shiss, tu, solo gime, suspira o bébeme
Te prometí que te iba a visitar y aquí me tienes amor,
deja, no hagas nada,
deja que mis manos y mis labios
hagan dibujos en tu piel,
tú, amor, solo déjate hacer...
Mmm, hueles divina, mi amor,
tu aroma me excita y estimula el instinto animal...
¿me dejas que te convierta en una fiera?
No, no digas nada, solo asiente y déjame hacer...
Siente como te recorre toda mi lengua
y como humedece y lubrica cada centímetro
de tu piel, ¿te estremeces pequeña?
Mi cuerpo también se estremece
y aúlla al mismo nivel.
Calla, shiss, tu, solo gime, suspira o bébeme,
lo demás déjalo en mis manos, te amo, amor.
«Sé lo que te gusta que te lo susurre al oído...
y me gusta cómo arqueas tu cuello y suspiras».
Así, mi amor, abre esa hermosa flor,
deja que mi arrullo, mi boca sedienta,
se apodere de esos pétalos
rebosantes de vida y de deseos.
Me gusta mirar tu rostro,
mientras mi boca, mi lengua
y mis dientes, te hacen gozar
como una ninfómana.
Me vuelves loco de deseo y calentura,
y hago que mis manos abarquen tus senos,
mis dedos acaricien y pellizquen tus pezones
y mis dientes hambrientos y ansiosos
mordisqueen tus labios hasta hacerte morir de placer.
No, no lo hagas amor,
no te muevas, tu, solo siente y goza,
hoy es tu día, tu victoria sobre mí,
mañana, mañana volveré a cobrarme la deuda,
hoy, tan solo soy... tu esclavo.
Cada caricia en tu cuerpo,
o cada suspiro tuyo en mi oído
Te miro enamorado, te aspiro,
te inhalo, te sueño y a la vez te vivo.
Eres una realidad deseada, querida
y para siempre, por ti, disfrutada.
Me recreo en cada movimiento tuyo,
sobre mí, al lado, de espaldas o debajo.
Te anhelo tanto como te deseo...
tanto o más que como te gozo o disfruto.
Cada caricia en tu cuerpo, o cada suspiro tuyo en mi oído,
es el paradigma de un gemido o un orgasmo obtenido.
Te amo, te amo... ¡TE AMO!
Pese a mi espalda doblada y,
sobre todo... a mis quejosos años;
las arrugas que se mi imprimen en la frente
o el chasquido de mis huesos al amarnos.
Nada me importa, cariño, si tu, estás conmigo
y yo a tus caderas abrazado, sobre ti,
los dos jadeando, sudando y sintiendo a la vez...
el infinito cenit del goce, tan deseado y al final, alcanzable.
Beberé de la pasión más endiablada
Camino hacia al alba
buscando ese nuevo amanecer
que pueda satisfacer
mi tremenda angustia vital.
Recorreré los sonidos,
las calles y el gentío,
prudente forma de no herirme
ni tampoco hacer sangrar.
Acariciaré con mis sentidos
cada hueco o lugar
donde la única sorpresa será
no vomitar... soledad.
Me apoyaré en mis sueños
haciendo del dormir
una plácida señal (o marca) de no existir
para no tener jamás, miedo a morir.
Compondré odas a la vida
a la muerte o a sus formas humanas,
reteniendo siempre en mi pensamiento
que no soy nada...
Beberé de la pasión más endiablada
para luego perderme... gimiendo y llorando,
desgarrada a trozos, mi alma.
Locura indeleble en la mente,
en el corazón una piedra
que quiere ser nada más una víscera latente
latiendo en carne caliente y humana.
Maldije una y otra vez mi mala suerte
Te busqué calle abajo,
arriba, al lado o al frente,
te pensé, te soñé, incluso, te imaginé.
Hasta me atreví a delinear tu imagen
y ponerle cara a mi sueño con mis letras.
Pero, fui incapaz de encontrarte...
me embarqué en la nave del olvido,
y me apresté a olvidarme de mi sueño,
yendo hacia un rumbo desconocido.
Jamás quise reconocer que,
pese a recorrer medio mundo,
tu imagen siempre viajó conmigo...
sí, no pude
o no quise olvidarme de lo que te he querido.
Maldije una y otra vez mi mala suerte,
me pensamiento afligido...
cabizbajo, pesaroso y envejecido.
¿De qué me sirvió enfrascarme en tanta huida,
tanta rabia acumulada y tanto olvido?
A solas, tomando a sorbos un cargado café
A solas, tomando a sorbos un cargado café,
miro desde mi ventana las hojas de los árboles caer,
silencios que se hacen ecos escudándose tras un grueso cristal,
son los que me devuelven mi imagen deformada, gris y triste.
Se me pasaron las ganas de amar, sentir o soñar,
de caminar despacio por los amplios espacios otoñales,
de crecer como ser humano con cada sonrisa,
con cada simpático y sincero saludo vecinal.
Encerrado estoy por inercia, más nunca seré prisionero,
solo me dedico a observar la vida a través del cristal de mi ventana;
aquellos árboles frente a mi cuidado jardín que una vez cuidé y mimé
o escuchar emocionado, las manos en el corazón, los cánticos
de los pájaros con que tantas veces me solacé y di de comer.
¿Se puede pedir más..., o se puede ser más feliz?
¿para qué necesito más?
Si al fin y al cabo, del barro un día nacemos
y en barro un día nos convertiremos al morir.
Con la humedad de tus labios,
sedientos los míos
Amada de mis sueños. Dueña de la memoria...
musa de mi poesía.
Ingrato es cada uno de mis despertares
sin tenerte entre mis brazos...
tener tu cuerpo en mi regazo,
abrazada a mi tronco ardiente,
refugiándote de ese pasado,
déspota, miserable y frío.
Estoy aquí, no tan cerca como quisiera,
ni tan lejos como para no sentir tu calor.
Te extraño, eso sí...
y sigo sin poder resarcirme
de esta sed que sufren estos labios míos...
con la humedad de tus labios, sedientos los míos,
por despojarte de tu vestido,
calentarme con tu piel
y perderme en el interior de tus gemidos.
Ella vive en su sueño, me inhala, me mima,
me satisface con sus besos...
Ella vive en su sueño, me inhala, me mima, me satisface con sus besos... ella, me ama, me subleva, me tienta, ella... me vive, y ahora, viene por mí.
Agitado la recibo... la abrazo y ofrezco mis golosos labios... mi lengua caliente la penetra...Se mezcla y enlaza a sus jugos...
Ella se me ofrece, se abre... se vuelca en mi beso, compartiendo mis ganas, mis deseos más lujuriosos y enfermos... me deja entrar sin esfuerzo, como cuando se unta el pan en mantequilla... dichosa de estar recibiéndome, gozándose al mismo tiempo...
Que goces más exquisitos se vierten en nuestros cuerpos, como manjar dulzón, abre su boca y me recibe en su aliento...
Nuestros cuerpos se frotan, ruedan sobre sí, se pegan, se empujan y se aprietan con rabia hasta hacerse daño, aunque no nos importa, el placer es tan intenso que ni lo apercibimos amándonos...
Ahora me cabalga, luego soy yo quien la monta sin bajar... rodamos rabiosos fuera del lecho, caemos a tierra, la muerdo, me araña... me grita, la enrabio, la doy la vuelta mostrando su grupa... la penetro su profundidad, llora, gime, se retuerce... chilla sin dejarse de agitar... loco de placer me descoloco, empujo, arraso, la muerdo, la aprieto y lastimo... agitando su respiración.
No medimos las distancias, caemos los dos en el infinito, en el bendito éxtasis del goce final...
Eres tú, diosa mía, la que amo,
me estimula y deseo
No deja de sorprenderme el modo en que me estimulas,
me enervas, estremeces y logras hacerme tiritar de frío.
Me abarcas por entero, cuando te pienso,
cuando hago exposición de lo que deseo y te encuentro.
Pegada a mi piel, inhalando los suspiros que salen roncos de mi pecho.
Eres la esencia inextinguible de mi fe, la real diosa, estímulo,
que libra conmigo, a pecho descubierto, la batalla desigual de un amor verdadero.
Por esa razón sigues siendo mi musa, mi obsesión,
el volcán que ruge y grita en forma de gemidos,
que son los auténticos alaridos que fluyen de mis entrañas,
queriendo doblegar tu cuerpo y convertirlo en mi único universo.
Eres tu, diosa mía, la que amo, me estimula y deseo,
aquella que, sin hablar ni hacerse visible,
sabe que vive gozosa y alegre en mi pecho.
Ni tu ni yo pronunciaremos a la vez nuestros nombres,
sin embargo, tu sabes y yo lo sé...
que ambos estamos a un paso tan solo de ser solo pura lava...
a punto de ser expulsada por un volcán y engullida por nuestra sangre.
la fina línea de mis besos en tu cuerpo
Me endulzas con la mirada,
me enloqueces con tus labios
y me abrumas con tus palabras.
No soy un necio,
no me conformo con delinear
la fina línea de mis besos en tu cuerpo,
prefiero andar prudente,
ya sufrí crueles desengaños.
Escucho el ulular de tus frases,
percibo el dulce aroma de tu cuerpo
y presiento, en un suspiro, como quisiera
tenerte yo abrazada en este momento.
Sé de sobras que no soy sordo,
que me oculto en una maraña de silencios,
para justificar el no querer sufrir este tormento.
Mañana viajarán nuestros recuerdos,
unos pocos se odiaran por no tenerte,
los otros,
los herederos de lo arañado y conseguido,
seguirán persiguiendo
las orquídeas de aquello que tuvimos.
Soy el oscuro báculo del sentimiento,
el héroe de aquel bastión atormentado,
fútil llama, la que precedió al incendio,
el que sufrimos los dos...
por perder el tiempo... y no lograr querernos.
No, no te culpes, no eres tu, mi amore
Salto al ciberespacio,
araño con saña cuanto me huele a ti,
suspiro desde este profundo infinito,
estoy a punto de matar y de morir.
No, no me hieres ni me heriste,
soy yo, quien, por sentir,
me veo bajo el yugo de un pensamiento senil,
me lastimo, me maltrato... me hiero
y aún así me da por pensar;
«No me puedes pedir milagros,
la lejanía nos sustenta, nos apresa,
y mis miedos son los que me aterran,
los que me atenazan aun sin herir.
Puedo viajar sí, con mi fantasía,
incluso,
creer que sientes mis besos y caricias,
más no me puedo engañarme ni engañarte,
la distancia es sombría, letal, y nos matará.
Ahora que aun tenemos tiempo,
debemos olvidarnos de sentir,
obviar nuestros desesperados latidos,
enclaustrar y borrar nuestras emociones,
que nuestras letras, una vez, nos hicieron sentir».
No, no te culpes, no eres tu, mi amore,
la vida me enseñó a no mentir,
y esa es la única razón
de que todo muera aquí.
Blogs del autor
http://frankspoiler-alma-sin-destino.blogspot.com.es/
http://www.frankspoiler.pw/
http://0512franjasami.wordpress.com/
http://jasper461.wix.com/frankspoiler#!bio/c1ktj
Muchas gracias Don Fernando, un honor figurar en tu magnifico blog. Un afectuoso saludo.
ResponderEliminarMi.poeta favorito y buen amigo. Un placer leer tus letras amigo mío en este fantástico blog.
ResponderEliminarAbrazos.