domingo, 25 de mayo de 2014

JOSÉ LUIS MUÑOZ COLOMER [11.820]



José Luis Muñoz Colomer 

Almería. Poeta.
Director de la Compañía Española Transcontinental. Director de Viajes Indamar. Colaborador en revistas poéticas tales como Constelación y Galicia Social. (La Crónica, 28 de Marzo, 1998).







SONETO DE LA MUERTE

¡Soneto de la muerte, en la morada
de los tiempos de vida, canta muerte!
Cuando se nace echada está la suerte,
por  mucho que la vida, enamorada,

nos lo dé todo, que al final es  nada:
un hoyo con la lápida bien fuerte,
de mármol o granito, piedra inerte,
como quien ya perdió de su jornada

la flor última de sus primaveras.
Ya no florecerán en los rosales
las rosas del amor. Se desvanece

por otros horizontes sin fronteras
el alma por los cielos eternales.
Y nada queda, nada permanece.






UNA LÁGRIMA

A veces una lágrima se escapa
por una pena oculta, y los ojos
se nublan en acuosas humedades
descargando emociones soterradas.
Es la salida al corazón dolido
que de esta forma expresa su dolor.







BUSQUÉ...

Busqué la huella de tus labios
húmedos sobre la copa,
y en ella puse los míos
saboreando su néctar
más dulce y embriagador
que el licor que contenía.







EL ÚLTIMO DE LA TARDE

Era el último toro de la tarde.
La puya había calmado sus ímpetus
y miraba al trapo con desconfianza,
entrándole con arrancadas cortas
en remolino de afiladas astas,
mugiendo el dolor de su carne abierta.
Era el último toro de la tarde.
Negro, como es una noche sin Luna.
Soliviantado por las banderillas,
enfurecido contra el trapo rojo
que sus cuernos tocaban resbalando
sin poder hacer presa en la muleta.
Era el último toro de la tarde.
Negro azabache, cornalón de finas
y puntiagudas astas afiladas,
receloso, con la mirada turbia
y seca la lengua por el cansancio,
por el dolor, y el polvo de la arena.
Era el último toro de la tarde.
La muleta frente al toro, incitándole
al último pase de la corrida.
Dando media arrancada, el toro clava
alzando la cabeza, el cuerno fino
al torero, en un mensaje de muerte.







LA NAVAJA

La navaja templada en acero
es el arma que rompe la vida
cuando cruza su filo siniestro
el espacio del hombre que lucha.
La navaja que lanza su brillo
en la noche rompiendo el oscuro
velo en sombra de nubes que pasan,
es presagio de muerte violenta.
El gitano escondida la lleva
en la faja, que el aire destempla
ese filo que el yunque en la fragua
y el martillo en sus golpes, modela.


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