Luciano Durán Böger
Luciano Duran Böger artista boliviano, nació en el departamento del Beni en Santa Ana de Yacuma en 1904 y falleció en la ciudad de La Paz en 1996.
Hijo de Luciano Durán Pérez y Aurora Böger Rivero,1 nació el 12 de noviembre de 1904 en Santa Ana, capital de la Provincia Yacuma del Departamento del Beni de Bolivia2 y falleció en la ciudad de la Paz el 18 de octubre año de 1996.
Poeta y novelista, fue también escritor de diferentes suplementos literarios y columnista de importantes periódicos bolivianos como La Razón, Presencia y El Diario entre otros. Su labor artística, política y periodística le permitió dar conferencias en diferentes países como Ecuador, Perú, Chile y Argentina.
Escritor, crítico de arte, cuentísta, poeta y novelista, fue también pintor autodidacta. Expuso sus obras en La Paz y Potosí (1968 y 1980).
La política y el artista
De convicción política izquierdista, fue líder de la juventud universitaria6 , fundador y Secretario de Organización de la primera dirección de la Confederación Sindical de Trabajadores de Bolivia - CSTB en 19377 ; fundador y militante del Partido Comunista de Bolivia y del APRA en el Perú. Fue también fundador del Centro Cultural Moxos en 1938.
Encarcelamiento y exilio
Como dirigente universitario, se opuso públicamente a la Guerra del Chaco por lo que fue encarcelado por el gobierno boliviano entre 1932 y 1935. Su posición en contra de la guerra le costó también la expulsión del Consejo Universitario, de la Universidad Mayor de San Andrés y del Sistema Universitario Boliviano, por el entonces rector Héctor Ormachea Zalles, prefiriendo truncar sus estudios y permanecer preso antes que traicionar sus ideales.
Debido a su ideología política, fue exiliado de Bolivia y radicó en el Perú, Chile, Suiza, Francia y España.
Su obra literaria
Entre 1960 y 1972, Luciano Durán Böger publicó seis obras literarias.
Su obra En las Tierras de Enín está considerada entre las mejores novelas bolivianas.
Es uno de los autores bolivianos más destacados del siglo XX y uno de los más representativos escritores del oriente boliviano, junto con el autor Pedro Shimose.
Durán Böger fue galardonado con varios premios, entre ellos: la ‘Violeta de oro’ en los Juegos Florales de Santa Cruz (1960).
En "Radiografía íntima del poeta", Durán Böger escribió: "El poeta es una paradoja viva en un cristal de roca. En su obra nada permanece oculto. Los sentimientos, las emociones, anhelos, deseos, esperanzas, desilusiones, amores y quereres, todo, desde lo más trivial hasta lo trascendente, se afirma y se niega en su propio ser".
En uno de sus poemas, Luciano Durán Böger se describe de la siguiente manera:
Soy el último descendiente
vertical
de los tomates,
de la mara y del almendro
con raíces profundas,
acariciados por el Alba.
El territorio de mi sangre
abrazó a la madre
de los torrentes
y se inundaron los vasos
de mis sueños.
Por mis ojos entraron
todas las hidrografías desplazando
el lugar preferido
de mis padecimientos. Y con el acero de los símbolos
desgajo angustias
con fibras de poemas
Fragmento del Poema "Mi origen y mi destino"
El autor Elías Blanco Mamani, en su Diccionario Cultural Boliviano cita los siguientes comentarios sobre el artista beniano:
“es rudo y armonioso como el viento y tiene en sus versos ese rumor multitudinario que asusta, que enardece, que hace héroes y cobardes que define hombres y sociedades. No en vano el luchador y poeta Boger, hizo brillar como dos carbones encendidos sus dos ojos tras las rejas de las cárceles; por el delito de protestar contra la incomprensión y la bestialidad del egoísmo; /…/ no en vano su cuerpo sufrió el ultraje de los sicarios; no en vano se acostó desnudo en las ortigas de la injusticia y la desigualdad humana. Del fondo sufriente, dolorido y rebelde de ese espíritu han nacido las canciones y poemas machos de su libro”
Guillermo Viscarra Fabre.1951
.
“Su poesía, difundida mediante recitales y conferencias, promovieron –en los pueblos del Beni– los ideales vanguardistas en ambientes parroquiales y provincianos estancados hasta mediados del siglo pasado, en el romanticismo, el modernismo y en serviles imitaciones de los Veinte poemas de amor y una canción desesperada, de Pablo Neruda. La publicación tardía de sus hizo que su poesía pareciera anacrónica. /…/ Incorporó a la literatura boliviana voces regionales cambas, canto a la naturaleza exuberante del trópico, exaltando la belleza de las mujeres nativas y retrato de personalidad viril del hombre de la selva y los llanos benianos”
Pedro Shimose.2011 .
“Destacado narrador y poeta, es también un interesante pintor que desarrolla su obra por la doble dirección del surrealismo y el expresionismo. Colorista atractivo, describe con intenso cromatismo la naturaleza oriental”
Armando Soriano Badani.
Obras Publicadas
Sequía (novela, 1960). Publicado por Imp. Minerva.
Geografía de la Sangre" (antología de poemas,1963). Publicado por Imp. del Estado.
Poetas del Beni (ensayo, 1963). Publicado por Imp. Militar.
Inundación: Novela para un Continente en Lucha (novela, 1965). Publicado por Ed. Burillo.
En las Tierras de Enin (novela, 1967). Publicado por Ed. Novedades.
Sangre de Esmeralda (novela, 1972). Publicado por Ed. Universitaria.
ESTE DECIR NUESTRO
Este
decir nuestro
no conoce
la tristeza.
Llevará siempre
la canción del despertar
del Alba.
Tiene el entusiasmo
de la electricidad.
Con el móvimiento
de la sangre
hacemos nuestro, porvenir.
SILENCIOS
Signo
grane
en el fondo
de este débil tic-tac
de nuestra sangre.
¡Oh! responder
de piedra
en la agrietada
redondez
de nuestras vidas.
Prolongado
correr de río
es esta interrogante
de ser y no ser
de lo que somos.
iHay silencios
de siglos en mis pasos!
NOCHEBUENA
Bella
estaba la Madre
del amor
que besa el Aíre,
del amor
que arrulló Luz,
del amor
que mima el Agua.
Sin una perla de llanto,
juega sobre el planeta
con lunas y con pañales.
¡Hijo del Hombre!
Niño de carne y de sangre
nació como nace el verso
del corazón del Poeta.
Esta noche es Nochebuena
- y yo no tengo arbolitos,
ni zapatitos, ni cena.
PAISAJE, SANGRE Y ESPIRITU DEL BENI
(Fragmento)
Hijo
del Olvido
y la Distancia.
Te envolvió la Aurora
con sus pañales rojos.
La entraña verde y bárbara
dio sangre a tus ensueños
y espíritu a tu carne.
La mópera del alba
te oculta en el yomomo.
Fragancia de vainilla
de aromo y de cedrón.
Tropel de cerriles truenos
y un bramar de luz te araña
con refucilos indómitos.
Eres látigo telúrlco
de un presente amargo, ¡amargo!
Fuerza y ardor primarios
de lo que serás mañana.
Puestas de Sol en los ojos.
Lo pequeño está cercano
y está lo grande, distante.
Pensamiento tus raíces
con la lírica infinita
de taquirari en la brisa
y machetero en los puños.
Cantar de vida y de gozo
con las guitarras del Tiempo.
Tus ríos son mis arterias y
tus árboles mis nervios.
La resina de tu, idioma
es aroma de mil pomas
talladas en- tmrncos verdes.
Es acento y es bramido
con diabólicos prosódicos
de siringueros nervudos.
hay magia verde en tu entraña
y poder de maravillas.
¡Libertad hay en tu alas!
Colmenares de gargantas
que destilan siempre trinos.
Vencedor de sed profunda.
Vencedor de luz y espacio.
Tú lacee la torada
con un matico en el hombro.
Arco salvaje de estrellas.
Arco tenso de mi siglo.
Chonta que no se quiebra.
Tu destino frente el Tiempo
es una flecha de anhelos.
Todo ríe entre tus límites.
Risa abierta de la pampa
y carcajadas de truenos...
Hasta la muerte se ríe
por tu olvido y tu abandono.
Han azotado tu cuerpo
los cien bejucos porrudos.
En tus espaldas desnudas
te flajela el pajonal.
Son caderas opulentas
las barrancas de tus ríos.
Polvareda luminosa
de mi tierra sin caminos
con sus caminos de agua
a lo largo de la angustia.
El yomomo está en tus manos,
el curichi en tu cintura
y en tu frente el jipijapa.
Armonía de mi tierra
sin carreteras ni rieles.
Que no es plegaria tu canto
entre alambradas de púas...
¿Qué serías tierra nuestra
sin tus ríos y tus remos?
¡Ay el Beni... Beni... Beni...!
de cinco trinos distintos.
…
Falta pan y falta luz,
falta leche y falta carne.
Ni pa` remedio se encuentra
un terroncito de azúcar.
Mucho jumechi en la esquina
que quema venas y nervios.
¡Ay, mi Beni... Beni... Beni...!
de cinco trinos distintos.
¡Hay bravura en tus machetes
y un hondo ritmo en tus remos!
Tú no reclamas a nadie
ni al pasajero que llega.
Toco, café, tabaco
y el agua de tus churunos
con afecto lo das todo.
A manos llenas regalas
caña, algodón y cacao,
mantequilla y tamarindo.
El majan de las pascanas
hace olvidar el dolor
de campanas enterradas.
¡Hay bravura en tus machetes
y un hondo ritmo en tus remos!
¡Ay, mi Beni.. Beni... Beni...!
de cinco trinos distintos,
que no es plegaria tu canto
entre alambradas de púas...
Florece el tiempo en tu espalda
silbando las injusticias.
El árbol de la codicia
trajo fiebre de esterlinas:
fiebre amarilla de oro
que con sangre de india pura
amasaron cien fortunas
y fugaron hacia Londres
dejando sólo en las playas
cien cadáveres de lunas.
Una cadena de deudas
alárgase al infinito
y un siringuero de sombras
sin horizonte ni goce.
¡Ay, mi Beni... Beni... Beni...!
de qué sirven las cachuelas
de tu fiombrada Esperanza.
Siete millones de hectáreas
y otro tanto de esterlinas,
jamás valdrán lo que valen
si aún te quedan muchachuelas
para endulzar la amargura
de un siglo de desengaños.
La malaria y la viruela
pueden más que tus anhelos
y la salud del saludo
con que saludo
con que saludas al Sol.
La coqueluche golpea…
golpea con golpe seco
sobre el tórz de tu infancia
Deja entonces que levante
la polvareda del canto.
Sí así te olvidan. lNo importa!
Si así te quieren. ¡Te quieran!
¡Ay, mi Trini... Trinitaria!
Se fueron los toros negros
porque las vacas rosadas
con que soñaban tus niños
las degolló la distancia
con su cuchillo insaciable
de quien quita hasta lo ajeno.
He de partir tus sandías,
tus piñas y tus naranjas
con mi cuchillo de sed.
Tú levantarás un día
las robustas manos llenas
con naranjas olorosas.
Filo de luna y de pena
con mi alegría sin caña.
¡Te comiera el corazón
para no desearte más!
¡Ay, mi Beni... Beni... Beni...!
de cinco trinos distintos.
De nada valdría el romance
si no existiera el camino
por donde va la Esperanza
de tu inquietante destino.
¡Hay bravura en tus machetes
y un hondo ritmo en tus remos!
¡Si así te quieren! ¡Te quieran!
¡Si así te olvidan! ¡No importa!
No hay comentarios:
Publicar un comentario