Ian Duhig
(Londres, 1954). Hijo de padres irlandeses católicos. En 1987 obtuvo el primer lugar en la National Poetry Competition con su poema "Nineteen Hundred and Nineteen". Su primera colección de poemas, The Bradford Count, apareció en 1991. Trabajó durante quince años en proyectos para personas sin hogar, en Londres, Belfast y Yorkshire. El segundo libro de poesía que publicó, en 1995, fue The Mersey Goldfish. Ha realizado Estancias Creativas en diversas instituciones, entre ellas las universidades de Lancaster y Leeds. Nominies es el título de su tercera colección de poesía. En 1994 fue uno de los 20 poetas seleccionados por la Poetry Society como New Generation Poets.
FUNDAMENTOS
Hermanos, sé que muchos de vosotros habéis venido hoy aquí
porque su Jefe prometió que aquel que no viniese
sería empalado, le clavaría estacas por el ano
y vendería a sus hijos y esposa a los portugueses.
Quiero que en lo posible alejéis eso de vuestra mente.
Hoy quiero hablaros sobre el Dios cristiano.
En muchos aspectos nuestro Dios cristiano no es como vuestro Dios
Su nombre, por ejemplo no lo usamos también para la lluvia,
tampoco posee para nosotros la connotación de “acto sexual”.
Y a pesar de que Lo llamo “sagrado” (le decimos “Él” y no “Eso”
aunque sabemos que no es un hombre, y por supuesto tampoco una mujer)
no quiero decir; como vosotros, que Él sea gordo como una vaca sana.
Quiero dejarlo claro. Cuando digo “Dios es bueno y está en todas partes”
no es porque sea inmensamente gordo. “Dios te ama”
no quiere decir lo que los guerreros en campaña les hacen
a los escuderos. Quiere decir que os aprecia como vuestros padres y madres;
-sí, ya sé que Chuma amó a un hijo que compró, como los guerreros
en campaña aman a los escuderos. Eso es Pecado y ya hablaremos de ello.
A partir de hoy quiero que recordéis sólo tres cosas simples:
nuestro Dios es diferente del Vuestro, nuestro Dios es mejor que el Vuestro,
y a mi esposa no le gusta que ustedes la miren cuando va al baño.
Cuando comprendáis esto comprenderéis los fundamentos de la salvación.
Los bautizos comienzan al ocaso pero antes, como se acordó, veremos
cómo desarmar, limpiar y reajustar un Martín-Henry de repetición.
FUNDAMENTALS
Brethren, I know that many of you have come here today
because your Chief has promised any non-attender
that he will stake him out, drive tent-pegs through his anus
and sell his wives and children to the Portuguese.
As far as possible, I want you to put that from your minds.
Today, I want to talk to you about the Christian God.
In many respects, our Christian God is not like your God.
His name, for example, is not also our word for rain.
Neither does it have for us the connotation ‘sexual intercourse’.
And although I call Him ‘holy’ (we call Him ‘Him’, not ‘It’,
even though we know He is not a man an certainly not a woman)
I do not mean, as you do, that He is fat like a healthy cow.
Let me make this clear. When I say ‘God is good, God is everywhere’,
it is not because He is exceptionally fat. ‘God loves you’
does not mean what warriors do to spear-carriers on campaign.
It means He feels for you like your mother or your father –
yes I know Chuma loved a son he bought like warriors
love spear-carriers on campaign – that’s Sin and it comes later.
From today, I want you to remember just three simple things:
our God is different from your God, our God is better than your God
and my wife doesn’t like it when you watch her go to the toilet.
Grasp them and you have grasped the fundamentals of salvation.
Baptisms start at sundown but before then, as arranged,
how to strip, clean and re-sight a bolt action Martini-Henry.
I’r Hen Iaith A’i Chaneuon
"Si tan sólo la lengua dijese todo lo que la mente sabe
no habría ningún vecino"
El Libro Rojo de Hergest
Cuando viajo a Gales durante el puente largo
para visitar al abuelo de mi esposa,
que es abstemio y no fuma, y además desaprueba
de cualquiera que no sea abstemio y fume;
cuando viajo a Gales durante el largo, largo puente
con mi segunda esposa para visitar a su abuelo,
quien dejó el metodismo por la bandera roja,
quien no tolera una palabra contra Stalin,
quien a pesar de mi tantas veces declarado socialismo
secretamente cree que sigo perteneciendo a las legiones del Papa,
que recibo telegramas cifrados del Vaticano
que especifican las fechas, horas y posiciones que debo asumir
en mis actividades políticas y en mis actividades sexuales;
quien al cumplir noventa años la emprendió contra el box,
que era lo único de lo que alguna vez pudimos hablar,
cuando visito al abuelo que le queda a mi segunda esposa,
y éste se pone a escuchar los resultados del fútbol en gales,
algunas veces me escabullo al pub.
Algunas veces me escabullo al pub
y me echo una pinta tras otra de ese suero bilioso
que sirven ahí, donde el fondo musical es siempre, siempre,
Lo mejor del coro varonil Rhosllanerchrugog y siempre
termino acorralado por algún descerebrado de allende el valle,
que se pone muy serio a hablar "del idioma tan poderoso y tan bello
emanado de las intemporales montañas, ese habla
de fascinante belleza que forjaron nuestros ancestros",
y que luego declama para mí en galés sus versos epilépticos
sobre Gruffudd ap Llywellyn y Daffydd ap Llywellyn,
y que me zorraja dos horas enteras de rollo
porque no hablo irlandés; y que luego saca a cuenta la religión,
y al poco rato le digo que me sé un rezo irlandés sobre un rey gales
justo sobre ese tema, y le recito lo siguiente:
"Na thracht ar an mhinisteir Ghallda
Na ar a chreideimh gan bheann gan bhrí,
Mar ni'l mar bhuan-chloch da theampuill
Ach magairle Annraoi Rí." "Qué hermoso,"
me dice, como todos, "suena tan hermoso."
Braque’s Drum
Le tambour, instrument de la meditation.
Qui ecoute le tambour entend le silence
– Georges Braque
Georges Braque, ’e was an artist an’ ’igh Cubist to the bone
(Sir ’enry Newbolt’s spinnin’ dahn below)
an’ Stevens loved ’is Cubists an’ ’e wasn’t on ’is own,
(an’ spinnin’ right beside ’im’s Picasso)
so multiple perspective’s are ’is Blackbird’s raison d’être
(when such a view in art was comme il faut);
hence for this fractured eye on nature we’re in Wally’s debt
(plus that poetry’s another kind of dough).
But sometimes Stevens prized a sword as much as brush or pen
(Sir ’enry Newbolt’s slowin’ dahn below)
when writin’ that the fighter is the master of all men,
(now whirlin’ like a turbine’s ol’ Pablo);
yet Braque implies the drum might teach us more without the fife
(your split perspective takes in friend an’ foe);
in war, the bloke ’oo talks like me is first to lose ’is life,
(Tommy, Ivan, Fritz or G.I. Joe).
So I’ll take Braque’s drum to England an’ I’ll ’ang it on my wall,
(ol’ Newbolt’s back to spinnin’ dahn below)
an’ I’ll meditate on silence from the sofa where I’ll sprawl
(the grahnd is still on Pablo Picasso).
I’ll ’ear the blackbird sing, then stop, an’ keep on listenin’ after,
my love between ’em ditherin’ to and fro,
an’ look on Braque’s square drum an’ take a turn o’ gentle laughter,
(diminuendo, innuendo, go).
Alferi Stock
p a n d o r a m a
a r k o g n o s i
r s a x p y x o x
a i a y o u b p o
g o b o x o d i d
r n a t o x s n a
a s h l a r m h r
m i a o n i u e a
a c i m e d n a p
Heredity
Sterne detours into the future
to invent Debord's détournement,
recycling an attack on plagiarism
from ‘The Anatomy of Melancholy’:
... are we forever to be twisting
and untwisting the same rope?
My own sad anatomy recycles DNA,
the frayed rope of its double-helix
twists with optical fibre to slip past
all the Turnitin detection software
to a blank screen, projecting trait
and trace; passing on, passing off.
Lying Over The Ground
The song was supposed to lie over the ground
in an unbroken chain of couplets – Bruce Chatwin, 'Songlines'
Unbroken couplets chain my nightmares still
since reading this on some antique shop bill;
Hide your diminished heads, nor vainly talk
Among friends of how rapidly you walk:
First in the Annals of Pedestrian Fame
Historians will enter Bob Russell's name!
Too quickly through my sleep rings dead Bob's boast,
while in the blistering slipstream of his ghost,
I dream he's taking Nerval for a drag,
his lobster flying behind them like a flag,
as down the gasping boulevards they race!
Distracted rambling's more the poet's pace.
Some Aboriginals Bruce Chatwin met
will say to learn the way their mind had set
requires more openness than Chatwin showed
as he careered along their open road
through Alice Springs, as through a looking-glass.
Like time, Bruce Chatwin only came to pass
through Australia into his private Oz –
although we shouldn't be surprised, because
your traveller's tales were always fairy tales,
since publishers don't want a poet's sales
but books "with legs" that run out of the shop,
not those that stroll, then stop, then stroll, then stop;
returns are part of going for a song,
which takes so long because it takes so long.
To poets and their readers, words are grace;
their roads best taken at an easy pace,
while even better than an easy pace is
entropy, collapse, then total stasis –
lots of poets write their best in bed:
the truly great among them are all dead.
No hay comentarios:
Publicar un comentario