viernes, 31 de enero de 2014

DENIS KOROTAIEV [10.866]


DENIS KOROTAIEV 

(1967 - 2003)
Nacido en 1967 en Moscú. Graduado del Instituto Físico-Técnico de Moscú (1991), de Física y Matemáticas Ciencias (1996). Miembro de la Unión de Escritores (desde 1994).. 
El día 8 de agosto 2003 murió en un accidente de automóvil.

Obras

Russia, Russia, keep yourself and cherish! - Civilian lyrics, 4/4/2009 7:32
Lead me, Rus - Civilian lyrics, 02.12.2008 8:14
Back in the orphanage for so long and did not believe her lips ... - Love poems, 03/29/2008 23:42
Chutko clinging ivy of weathered slope - Uncategorized, 18.12.2008 00:04
Music - Uncategorized, 16/02/2010 20:17
Burns my harp-samogudy - Uncategorized





No les diré qué siglo comienza.
No sé adivinar con las cartas marcadas.
Soy un hombre. Palabra que hoy no está de moda.
Pero igual la repito, soy hombre, hombre.
Sí, no vi el encaje cristalino de los Andes.
Sí, no oí los sabios sutras tibetanos.
Sé predecir el amanecer en la oscuridad
y ocioso paso los folios del cielo.

No les cantaré, Dios me dio un barítono miserable,
no danzaré  levantando las rodillas hasta el techo
pero salvaré sus almas del aburrimiento y la pereza.
Sí, salvaré, solo sepan pedirlo.

No pretendo engañarlos, a ustedes los ocupados,
ni distraer sus vidas de los asuntos ordinarios,
pero pronunciaré la palabra olvidada.
Ya empecé. Hablo. Así que…


Traducciones del ruso de Natalia Litvinova





I will not tell you which begins century. 
I can not speculate on with marked deck. 
I - a man. This word is now out of fashion. 
But I'm harder still - a man, man. 
Yes, I have not seen Crystal Lace Andes. 
Yes, I have not heard the wise Tibetan sutras. 
But I can predict in the darkness of morning 
I leaf through at your leisure heaven tome. 

I'll sing to you - God gave lousy baritone 
And do not splyashu, the ceiling lifting your knees, 
But I will save your soul from boredom and laziness. 
Yes, I will save, ask the same just about. 

No, I will not dissemble and that, and so, 
You busy, distracting from his work and life, and 
But I'll tell you the word that is now forgotten. 
I'm talking about. I'm starting. So ... 





CAROLINA CONTINO [10.865]


 


Carolina Contino

Poeta argentina, nació en 1975, en Cañada de Gómez, Santa Fe. Profesora de Letras. Ejerce la docencia y coordina talleres literarios. Escribe desde los 18 años, algunos de sus poemas fueron publicados en la revista argentina Hablar de Poesía y fue incluida en la plaquette Países inocentes, editada por la Universidad Nacional de Mar del Plata. Hierro de madera (Melusina, 2001) es su primer libro de poemas publicado. Además publicó Otra clase de animal (2008). Ha participado en mesas de lectura en ciclos de Poesía en las ciudades de Mar del Plata, La Plata, Rosario y Victoria. 





Un gato que huele a hombre
(como un hueso que se sabe viejo)
es un gato pelo hombre mancha negra,
y en sus patas va locura
y su fauce es un suspiro
que muerde el beso
mansamente que recuerda
se enrosca el pelo negro
la mancha loca
se agita la vida escrita bajo el lustre
los ojos pescado
los ojos abiertos
el gato marcado,
perdida la suma de sus días buenos
marcado el gato
real, completo
lo bello
lo bello
pelo cuero lengua seda
animal de olvidos que peleaste,
y en la sangre va locura de hombres muertos.






1.

ya lo sabemos 
abundan en caprichos
las incorregibles amigas de la nada
en la antesala
de los museos rojos de vanidades y alcoba
tejen
con paciencia de labradora 
las filigranas de perder y a veces
oh la lá 
a veces
se abre la puerta:
tiene la virtud de la sorpresa
y a la vez
el don de la ubicuidad pareciera
el aparecer así como así de las retinas mías desprendido
y de los libros arrancado, corazón! 
el que deseaste
ayyyyy
mas no de esta parte en la ribera
quedará el que me besó
si yo supiera
las redes de ajustar,,, vivir
desde el principio es separarse
dijo Salinas,,,
deberíamos saberlo 
de otra vida 
y de otro tacto






LA MUJER QUE RÍE COMO LA GIOCONDA

“La vaca es un mamífero. Tiene seis lados: el derecho, el de la izquierda, el de arriba, el de abajo, el de la parte de atrás tiene un rabo del que le cuelga una brocha, con esta brocha  se espantan las moscas para que no caigan en la leche.”
(niño francés, citado por Javier Naranjo)

Una dama piadosa y reservada
ve los órganos genitales de los hombres
con todo detalle
los analiza los sopesa
expulsa delicadamente sobre ellos el humo
 de su habanito azul...
¿qué quiere saber? ¿y qué sabe finalmente?







RATS

Ella quiere saber
qué fue de aquel Hombre de la Ciudad
cuyo ruido roedor habitaba
una casa humildísima a nuestras espaldas
O de La Santa
que sentada al pie de una palma
estalló
aquella vez en feroz carcajada
como si de pronto de una nube
oscura y peligrosamente
hubiera brotado
rodeada de zancudos
la perla de un Misterio
Se llenó de garras se llenó de terror
a lo fraternal y a lo desconocido
Cuanto más intentaban calmarla más sollozaba ella  más se obstinaba

El sur sin embargo había  
de medroso rayo anaranjado rajado
cambiado de aspecto
Aunque
ya se sabe:
no es nada fácil
tener
la última
palabra








LOVE IS AN STORY TALE

Me contaba una historia cada noche, sí
pero sólo el final
A veces
el hombre
caía como un montón azul
sobre una silla
o sobre el cemento
Un hombre capaz
de poner fin
a cada crimen
que ponía fin
a nuestra conversación
-siempre lo supe-
es alguien muy digno
de ser amado
Los niños del vecindario
aunque no valgan nada
cuando sepan leer
y estén en la tierna edad de besar chicas -qué lindo-
no se perturbarán con historias como ésas
podrán dormir tranquilos
Ellos tienen suerte







MERCEDES ARAUJO [10.864]


Mercedes Araujo

(Mendoza, Argentina 1972). Escritora y abogada. 
Publicó: Ásperos esmeros (Del Copista, 2003), Duelo (En Danza, 2005), Viajar sola (Abeja Reina, 2009) y La isla (Bajo la luna, 2010). También ha escrito y publicado narrativa.
Poemas suyos se publicaron  en la antología Poetas  argentinas, 1960-1980, Ed. Del Dock. Como también en  su blog, cartas desde el jardín. 



La isla, Bajo la Luna, Buenos Aires, 2010


En días como este sirve pensar en la ira

En días como este sirve pensar en la ira,
que es capaz de destruir pero no te salva
de las visiones más bruscas,
en días así quisiera no tener que vivir
para contar lo de siempre,
que mansa recolecto mis frutos silvestres,
tubérculos, hongos y brotes y que al llegar a casa
los guardo en un gran frasco de vidrio de tapa amarilla
que escondo en el ropero porque allí
todo es húmedo y bastante oscuro.


*

Hay días en los que me hundo en el agua y no sé
si por influjo de la luna o por un simple movimiento del sol
puedo deslizarme sobre la tierra tan sinuosamente
como una serpiente con aros de color azul intenso
desde la cola a la boca, pero ese cuerpo de serpiente
pálido y embozado no soy yo,
quisiera poder aclarar cerca de tus oídos
algunas de estas cosas, me has dicho
que no es posible por ahora,
ya que las nuevas ocupaciones te llevan todo el día
y también que tu vida es mejor, más sólida.
No me hagas caso, simplemente podrías decirme
si es verdad que las escamas de mi cuero
siguen brillando a pesar de haber sido
arrancadas una por una, y que aún así
el cuerpo está contento con esta pequeña vida. 

*

Las sombras, las palabras, han cambiado
el tigre camina entre peñascos
y riscos, es príncipe del pelo blanco,
yo le digo el capitán de los tigres,
hay otros que son manchados, pero estoy
tan cerca de mí que no sé si creer en lo que veo,
si cometo un error al distinguirlo
de algunos que tienen piedras rojas en el lomo,
piedras como manchas.
A eso de las seis de la tarde
el gato hunde su cuerpo en el agua
la sangre se le agita
y la flor de la glicina se enlaza a palos secos.

*

Espero recibir hoy domingo una visita, como un gato
levantar las orejas y con los ojos detenidos
seguir el color azul, es uno de los consuelos
para mi cuerpo tan pesado como esa piedra violeta
que se mezcla con el verde en el silencio.
En días así el cuerpo arde
y vuelvo a buscar el verde hundido,
quisiera que lo oigas:
me rasco con los dientes y rasguño una manta
para convertir en sonido el movimiento de las uñas.

*

Es la hora del amanecer, el cielo estriado
por minúsculos cauces rojo-escarlata;
tengo un nido nuevo y me dedico
a raspar un palo con una navaja, lo dejo suave,
cuando termino de rasquetearlo lo guardo.
Durante el atardecer suelo hacer collares
o cualquier otra cosa sin significado:
levantar una pera dulce,
un poco podrida, pero dulcísima.
mordisqueando una pera te das cuenta
que estar solo en la hora roja de la tarde
es como dejar que del cuerpo
salga una hoja y de esa otra y otra.




de Viajar sola, Abeja Reina, Bs. As., 2009. 

"Deseo tanto tener noticias tuyas"
esa manera pulcra de decir
"deseo tanto tener noticias tuyas"
si dijeras por qué te fuiste
por qué estás trepando
el monte Kenia como cabra.

No trepo el monte Kenia como cabra
soy un carnero vuelto de espalda sobre la piedra
tengo las patas y las manos atadas en ángulo recto 
y espero paciente que alguien me dé un nombre.
Quisiera llamarme como un río: Cumene
Cumene es apropiado para renacer.



Washington DC

Otra lengua, la otra, ronda
y en mi cabeza persevera
mientras la tarde es
un negro cuervo
que urde malabares
sobre el techo emprolijado.
Escaso
apacible
calinoso techo.
Elizabeth Bishop borda el blanco
zurce grafías, entona el viento.
Pero el viento soy yo.
Sus tropicales decires soy yo.
Más blanca y fría.
Blanca nieve presumida,
exacta, relojera.
Afternoon, night, morning
y mi vida en DC es la del negro cuervo
graznando a lo loco
sobre el blanco colchón
de plumas frisadas
calles O y thirty first.

*
Tigre hembra grande y poderosa
me alimento de ciervos.
No me pregunto sobre la salud de los ciervos 
ni sobre mis músculos 
más rectos que curvos. 

Busco la semilla, el olor
el rastro
y mastico cada hueso, si es lo que me toca,
aunque a veces bajo el árbol
como gato que se abandona 
puedo olisquear la densidad en el aire
florecer inmutable 
si monzones soplan como vientos.



*


Propuso rasquetear árboles de ébano
y descansar bajo la sombra de una higuera.
Le pregunté sobre sus animales y sus hijos
ella contestó es simple, hay que marcar el territorio
protegerse de los predadores, apiñarse
y cargar aves en la grupa.


*


Yo nací en el desierto, les tengo miedo a los monos
y los mosquitos se atiborran en mi espalda anémica
también tengo manos de tero aunque no soy tan esbelta
ni tan indiferente.


*


Ocurrió durante el mes de las cebras.

Cuando la chita alcanza su presa y la mata
no puede devorarla ni tampoco defenderla
cansada se echa a un lado y respira
profundos y agotados jadeos. 


*

La luz le besa primero una mejilla
luego la otra
la sangre que maquilla su hocico
se vuelve cárdena, rojo turgente
púrpura y después naranja. 



*



El cazador me visita en sueños. 
Está apurado, cosas urgentes lo llaman. 
Antes de partir me guía hasta los pájaros negros: 
se cuelan entre las rejas y roban alpiste. 




OBSTINADA COSTA ORIENTAL

Contará de sus fiebres de la costa
de semillas que dieron la madera de sus muebles 
y de sus amigos nadando bajo el palmar 
una noche, mientras él proyectaba 
sombras chinas con las manos

plateado y solo como un gorrión.


*

Obstinada costa oriental
los vicios y las virtudes 
te rodean como cualquier flor que germina todo el año
sí, la tierra te lame los pies en Bombasa, quiero decir
el mar es turquesa y la arena
en la arena aplastan frutos los hombres buhoneros 
las mujeres se cubren y limpian
engarzan collares.




NAIROBI

En el City Market apareció Mercedes
untada de olores y con párpados azules. 
Se agitó al oír mi nombre y celebró la coincidencia
ofreciéndome pulseras y collares
envolvió mi brazo con piedras celestes.

En casa nadie me espera
pero yo vine al Market por mangos y espinaca
Mercedes.




TODO TOMA SU CUERPO

Tigre hembra grande y poderosa
me alimento de ciervos
no me pregunto 
sobre la salud de los ciervos 
ni sobre este andar 
más curvo que recto. 
Busco la semilla, el olor, el rastro 
y mastico cada hueso si es lo que me toca
aunque a veces, bajo el árbol
como el gato que se abandona
puedo oler la densidad en el aire y florecer 
si el mar es oscuro
si monzones soplan como vientos.


*

Las hembras cazan de noche
esperan y clavan colmillos en garganta
en épocas de celo las hembras 
tenemos el pelo brillante
en épocas de celo cambia 
el sentido de las palabras 
en épocas de celo puedo 
quitarme el velo, partir de viaje 
brillar o permanecer
-el ritmo es el mismo en cualquier música-.



PREGUNTAS PARA PEREGRINAS

Si me presento en forma de lagarto 
sigilosa bestia 
si me visto con ramas de olivo 
que son lo más parecido 
a la piel de lagarto que yo conozco 
¿podré pasar la noche y comer?

Solamente te sirven las manos, me dijo
y los huesos, cuando son fuertes.

*

Si fuera lagarto hembra 
usaría esa piel y flotaría en el río como madera 
para tratarme con lagartos 
de igual a igual 
y que me teman como yo a ellos.



*


Hay una pesca del hombre 
y otra pesca de la mujer.
Si aislamos un tramo del río 
con diques hechos de palo y barro
y dejamos que el sol nos queme las manos
y decimos cosas 
como esa tortuga es astuta 
esa es una pesca de mujer.



VI LO QUE VI

Vi que no todos los peces toman el aire del agua 
no todos tienen una base ósea, placas 
y arcos bronquiales
no siempre no todo el laberinto 
está cubierto por una membrana. 

Vi cómo un belicoso pez - viejo y macho- sondea 
arma un nido de burbujas, toma el aire 
lo conduce por el laberinto de su cuerpo 
y forma el nido.

Lo vi llevar a la hembra debajo de él y abrazarla
vi a la pareja caer en letargo.

Nosotros también ensayamos movimientos mínimos 
acuáticos y subacuáticos.

Vi que no todos los peces toman el aire del agua 
no todos tienen una base ósea, placas 
y arcos bronquiales
no siempre no todo el laberinto 
está cubierto por una membrana. 

Vi cómo un belicoso pez - viejo y macho- sondea 
arma un nido de burbujas, toma el aire 
lo conduce por el laberinto de su cuerpo 
y forma el nido.

Lo vi llevar a la hembra debajo de él y abrazarla
vi a la pareja caer en letargo.

Nosotros también ensayamos movimientos mínimos 
acuáticos y subacuáticos.







.

ALICIA WAISMAN [10.863]


Alicia Waisman

Alicia Waisman, nacida en Buenos Aires, Argentina 1953. Integrante del Taller Aníbal Ponce y asistente al Taller Mario Jorge De Lellis, en los años ‘70. Licenciada en Cs Antropológicas, Profesora y Traductora de Francés.

Han publicado: de Ser Hablada, Ruinas Circulares, Buenos Aires, 2013






VACÍO

Una mesita que sostiene el teléfono, 
contigua a una mesa que sostiene un 
equipo de música, contigua a una mesa 
que sostiene un televisor: horror al vacío

¿Cómo llenar
el espacio

 entre el dolor
y el silencio?







mirar la ceremonia

Quitarle el sueño a las palomas
Quitarle el sueño a los caballos
Quitarle el sueño a la espesa voracidad del tiempo
Quitarle el sueño a los sueños
A los arropados, a los desarropados
Quitarle el sueño a la ausencia
Quitarte el sueño
Y quitarme







…….Pensar en un hombre
se parece a salvarlo                                                                                  Roberto Juarroz
                                                                                        

Una penumbra estéril
 (me) perfora

Escucho un péndulo recoger el tiempo

Soy  páramo
irritado

Sombra
perfecta

Ausencia de pliegues

Recuerdo inasible:

Sólo mis  huesos molidos
develan mi ausencia 

                                                          A Darío Krasnianski







Mi madre
se sienta a maquillarse
sobre un puff azul
frente a un espejo
que llega al cielo

Me es permitido –no siempre- mirar la ceremonia:
el maquillaje base
la combinación de sombras sobre los párpados superiores
el rimmel, el polvo compacto
el rouge de labios

Se observa luego atentamente
y con un cisne de algodón
quita el exceso
“hace parecer antinatural”
o algún trazo en falso
“desdibuja el contorno de los labios”

Elige por último
un collar
un par de aros
un broche
Pulseras no
“no me gustan”

Ella
me dibuja en su aire









MARCELO DÍAZ [10.862]


Marcelo Daniel Díaz 

Nació en 1981. Vive en Río Cuarto, Provincia de Córdoba, Argentina. Es profesor y Licenciado en Letras egresado de la Universidad Nacional de esa ciudad,  colabora con la cátedra "Análisis del discurso". Participó en la antología “Es lo que hay”. Ese mismo año publicó el libro de poemas “La sombrilla de Wittgenstein” y un conjunto de relatos que se llamó “Los límites de Tlön” (Ambos premiados en el concurso provincial de Editorial Cartografías). En 2010 participó de las residencias literarias del Centro de Arte Contemporáneo de Córdoba a cargo de Silvio Mattoni, María Teresa Andruetto y Alejo Carbonell. En 2011 publicó el libro de poemas “Newton y yo” con Editorial Nudista. Y hace unos meses publicó el texto de lingüística “La palabra y la acción: la máquina de enunciación K” con el sello de EDUVIM. Integra el consejo editorial de la revista de estudios literarios Borradores de la Universidad Nacional de Río IV y  ha colaborado con reseñas y textos críticos en No retornable, La guacha  y El lince miope.






Satélites

Para el ojo del astrónomo
somos pequeñas gotas que caen en la tierra
desde un cielo ladeado en sus extremos.
Y para el ojo de los seres queridos
brillan los paneles de los satélites.
No sé explicarlo: es un candado de luz
ahogando la materia oscura.





La mañana

Le gané por cansancio a la felicidad,
horas y horas practicando el ejercicio del abandono
como quien se deshace de una piedra
que carga a sus espaldas.
El azar quiso que me encontrara en esta pieza,
es mentira que la escritura nos salva.
Mi infancia fue un país amargo y sin sol,
señal de que soy un desconocido,
una forma incompleta
alrededor de una experiencia imposible.





Newton y yo

La manzana que cayó durante la siesta de Newton
descansa en mis manos
como un agujero negro hambriento de sentidos.
La muerte de los cometas cabe en su núcleo.
Escribo el poema
con lo que tarda un rayo de luz
en aparecer en el mundo.
Newton sabía que los árboles
trabajan a la inversa de la gravedad,
lo leyó debajo de sus píes:
en cada hombre, comprimida,
hay una descarga universal
del tamaño de un planeta.







La estación 

Por un instante el planeta es una estación de servicio.
Me hablaron sobre su núcleo,
un corazón incandescente y amarillo
como la capa de Flash Gordon.
El auto necesita un cambio de aceite,
pero no nos detenemos.
Cruzamos el campo
igual al disco de Led Zeppelín.
Pienso en una película de ciencia ficción,
en el horizonte las naves espaciales
relampaguean distantes.

De: "Newton y yo", Editorial Nudista, 2011






Miles de años luz 

La estrella más cercana 
es un pájaro fuera de órbita
que choca contra la bóveda celeste
dejando restos de sombras.
La única metáfora que me queda:
“el pájaro abre su boca 
y los sonidos se atascan en el poema”.

*

Entraba con nubes amarillas a casa
como quien vuelve de un viaje inútil.
En el monoblock, a cierta hora del día,
papá era un lunar 
y me hacía señas de luces para que bajara a la playa.
Jamás hablamos del pájaro.

*

El pájaro golpea, es el último.
Las cenizas de una órbita común flotan en el aire.
El cielo es más espeso ahora
que cuando papá hacía señas de luces con el auto.

*

El pájaro abre su boca 
y los sonidos se atascan en el poema. 
“Yo no existo” pienso. 
Luego escucho: “yo tampoco”
Papá murió hace años. 






Transatlántico 

Nada los cubre más
que un manual de instrucciones
o un libro de palabras cruzadas
la cola avanza y retrocede
le hace mimos y le quita sus
juguetes para la playa
como si lo hubiese tragado una boca
de tormenta
siempre de a dos
como en la cocina
pero en la proa.
El con sus antiparras puestas,
ella con sus piernas anfibias
preparadas
para darse un chapuzón dentro del
domo;
inmunes a la lactosa
en medio del éxtasis
preferible quemarse de una vez
antes que apagarse lentamente.
La camarera escucha:
si me querés- hermosa oración
para analizar las categorías vacías.