jueves, 13 de diciembre de 2012

ALFRED JARRY [8806]



Alfred Jarry (Laval, 8 de septiembre de 1873 - París, 1 de noviembre de 1907) fue un dramaturgo, novelista y poeta francés, conocido por sus hilarantes obras de teatro y su estilo de vida disoluto y excéntrico.
Nació en Laval, hijo de Anselme Jarry, un acomodado negociante de telas, y Caroline Quernest. Después del fracaso comercial de la empresa de su padre, su madre se marcha a vivir con sus dos hijos a Saint-Brieuc y luego a Rennes, en Bretaña, donde Alfred Jarry cursa sus estudios secundarios. Recibe una esmerada educación. En octubre de 1891 llega a París para estudiar en el Instituto Henri IV donde será alumno de Henri Bergson junto con el poeta Léon-Paul Fargue; tras el bachillerato se presentó en tres ocasiones al concurso de acceso a la École Normale Supérieure, pero suspendió. Ingresó entonces en La Sorbona para cursar estudios de literatura pero no logró licenciarse. Obtuvo pronto el éxito literario con sus poemas en verso y su prosa original. A los veinte años publicó su primera obra. Poco después murió su madre; y a los dos años, su padre, quien le dejó una cuantiosa herencia, lo cual, sumado al éxito temprano de sus obras, le permitió llevar una existencia despreocupada durante buena parte de su vida.
Conoce a Marcel Schwob, Alfred Vallette (director del Mercure de France) y su mujer Rachilde. En la casa de la pareja, da en 1894 la primera representación de Ubú rey. Redacta artículos para el Mercure de France y la La Revue Blanche, donde colaboraban los escritores y artistas más prestigiosos de la época.
De 1894 a 1895, dirige con Remy de Gourmont la lujosa revista artística Ymagier. Reñido con de Gourmont, decide fundar su propia revista de estampas, Perhindérion, de la que se publicarán sólo dos números. En 1896 empieza a trabajar para el director Aurélien Lugné-Poë que le confía la programación de la temporada del Théâtre de l'Œuvre, en París, donde tiene lugar el estreno de Ubú rey el 10 de diciembre de 1896.
La obra es parte de un ciclo de varias obras, cuya primera versión escribió a los 15 años inspirándose en uno de sus profesores del instituto de Rennes, que según Jarry encarnaba "todo lo grotesco que pueda haber en el mundo". Después de las primeras funciones en el Théâtre de l'Oeuvre, la obra se representó en el teatro de marionetas Théâtre des Pantins, en París, con marionetas creadas por su amigo el pintor Pierre Bonnard.
Ubú rey es considerada antecesora directa del teatro del absurdo. Con ella Jarry consigue el aplauso del gran París. Su estreno fue interrumpido varias veces por los abucheos de los ofendidos y los vítores de los vanguardistas. En su momento sólo se representó dos veces. Es una comedia satírica en la que se mezclan las referencias a Macbeth con los excesos de un monarca tan tirano como cobarde, y cuya trama da lugar a situaciones llevadas hasta el absurdo. Es también una crítica corrosiva contra la autoridad que el autor realiza a través de la llegada al poder del grotesco Padre Ubú, quien junto a su mujer encarnan la corrupción y el despotismo, casi un paradigma de los dictadores del Siglo XX. William Yeats, que pese a su mal francés presenció el estreno, escribió en su autobiografía a propósito de esa noche "Después de nosotros, El Dios Salvaje".

A partir de Ubú rey, Jarry empezó a identificarse con su propio personaje, dando prioridad al placer antes que a la realidad. Adoptó el habla sincopada y pedante de éste y su personalidad. Caminaba siempre por París con un revólver en el cinto (que disparará en varias ocasiones bajo los efectos del alcohol), iba en bicicleta y bebía absenta.
En 1897, Jarry ya ha agotado su herencia y tiene que dejar sucesivamente su lujoso piso del 162 Boulevard Saint-Germain, luego el del Boulevard de Port-Royal, para acomodarse en un modesto apartamento del 7 rue de la Cassette, en el distrito VI de París. Alternará varias residencias en casas campestres de amigos suyos, y se compra una barca para salir de pesca, el As, que hará historia al lado de su personaje de ficción, Faustroll. Vivió por un breve periodo de tiempo en casa de su amigo el pintor Henri Rousseau, al que dio su apodo "el aduanero".
En 1900, publica el Almanach illustré du Père Ubu, con dibujos de Pierre Bonnard y música de Claude Terrasse, que será el compositor de la mayoría de sus operetas. En 1901, se representa en el Cabaret artistique des 4-z’arts, en París, Ubu sur la butte, editada en 1906.
En 1902, publica su novela Le Surmâle. El mismo año empieza una breve colaboración con la revista del príncipe Bibescu, La Renaissance Latine. En 1903, empieza una serie de artículos que se editarán en la revista Le Canard Sauvage que existirá de marzo 1903 a octubre 1903, a la vez que inicia una colaboración constante con la revista La Plume. En 1903 empieza a publicar los primeros capítulos de La Dragonne. Reside un tiempo en casa del compositor Claude Terrasse, cerca de Grenoble, con el que trabaja en su ópera bufa Pantagruel.
Su economía se va degradando a la vez que su salud. A pesar del éxito, se encuentra arruinado y perseguido por sus acreedores, por lo que a partir de 1906 reside en Laval, en casa de su hermana Charlotte, con algunas breves estancias en París. Muere en París el día 1 de noviembre de 1907 de una meningitis tuberculosa, en el Hospital de la Caridad, a los treinta y cuatro años. Antes de morir, al preguntarle sus amigos cual era su último deseo pidió un mondadientes. Fue enterrado en el cementerio parisino de Bagneux.
Su obra póstuma, Gestas y opiniones del Doctor Faustroll, patafísico (Gestes et opinions du docteur Faustroll, pataphysicien) describe las enseñanzas de Faustroll, nacido a los 63 años y pionero de la "patafísica", disciplina que trata "las leyes que gobiernan las excepciones y explicarán el universo adicional a éste". En la patafísica todo suceso del universo es una excepción, y las leyes de la física no son más que excepciones que se producen más frecuentemente.
Jarry vivió rodeado de numerosos amigos y en sus últimos años contaba con un buen número de jóvenes seguidores, entre los que se contaban Max Jacob, Apollinaire, André Salmon, Enrico Baj y Picasso, que adquirió su revólver y acostumbraba a llevarlo por París.

Obras

Les minutes de Sable Mémorial (1894)
César-Antéchrist (1895)
Ubu Rey (1896)
Los días y la noches, novela de un desertor 1897)
L´Amour en visites (1898)
Almanaque del Padre Ubu
L´Amor Absolou (1899)
Ubu encadenado (1900)
Almanaque ilustrado del Padre Ubu
Mesalina,novela de la antigua Roma (1901)
Nuevo almanaque del Padre Ubu
El supermacho, novela moderna (1902)
Par la Taille
Ubu en la colina (1906)
Albert Samain, recuerdos (1907)
La Papisa Juana, novela medieval (1908)
Pantagruel, opera bufa en cinco actos y seis cuadros
Gestos y opiniones del doctor Faustroll, patafísico, novela neo-científica seguido de Especulaciones (1911)
Gestos, seguido de Paralipómenos de Ubu (1921)
Les Silenes
Poémes (1926)
La Dragonne, novela (1943)
Ubu cornudo (1944)
Obras poéticas completas (1945)
Instrucciones para la construcción de la máquina del tiempo, por el doctor Faustroll (1950)






LA LANGOSTA Y LA LATA DE CORNED-BEEF QUE LLEVABA EL DOCTOR 
FAUSTROLL EN BANDOLERA 


Una lata de corned-beef, colgada como unos gemelos,
Vio pasar a una langosta que se parecía fraternalmente,
Iba ésta acorazada de un duro caparazón
Sobre el cual estaba escrito que el interior como la lata, carecía de espinas,
(Boneless and economical);
Y bajo la cola replegada
Probablemente ocultaba una llave para abrirla.
Enamorado de repente, el corned-beef sedentario
Declaró a la pequeña lata automóvil de conserva viva
Que si consentía en aclimatarse
Cerca de él, en los terrestres escaparates,
Sería condecorada con muchas medallas de oro.





Un poema en prosa:
DE LA ISLA DE PTYX

A Stéphane Mallarmé

La isla de Ptyx está hecha de un solo bloque de piedra de este nombre, la cual es muy estimable, pues se ha visto que sólo ella compone esta isla enteramente. Tiene la traslucidez serena del zafiro blanco y es la única gema cuyo contacto no produce frío sino que el fuego entra y se instala en ella, de la misma manera que en la digestión el vino. Las demás piedras son frías como el grito de las trompetas; ésta tiene el calor precipitado de la superficie de los timbales. Nosotros pudimos fácilmente abordarla, pues estaba tallada en forma de tabla y creímos poner pie en un sol purgado de las partes opacas o demasiado reflectantes de su llama, como las antiguas lámparas ardientes. En ella no se percibían ya los accidentes de las cosas, sino la sustancia del universo, por lo que no nos inquietamos si la superficie irreprochable era de un líquido equilibrado según las leyes eternas, o de un diamante impenetrable, salvo por la luz que cae vertical.
El señor de la isla vino hacia nosotros en un barco: la chimenea hacía redondas volutas azules detrás de su cabeza, ampliando el humo de su pipa e imprimiéndolo en el cielo. Y con el bamboleo alternativo, su silla basculante sacudía sus gestos de bienvenida.
De debajo de su manta de viaje sacó cuatro huevos con el cascarón pintado, que dio al doctor Faustroll, después de beber. A la luz de nuestro ponche la eclosión de los gérmenes ovales floreció sobre la orilla de la isla: dos columnas distantes, aislamiento de dos prismáticas trinidades de flautas de Pan, se abrieron en el chorro de sus cornisas, puño de mano cuadrigital de los cuartetos del soneto; y nuestro as meció su hamaca en el reflejo recién nacido del arco del triunfo. Dispersando la curiosidad velluda de los faunos y el encarnado de las ninfas desadormecidas por la melodiosa creación, el barco claro y mecánico hizo retroceder hacia el horizonte de la isla su aliento azulino y la silla movediza que decía adiós.

Poema en prosa incluido en el libro Antología (Visor; Madrid, 1981).
Traducción: Manuel Álvarez Ortega.




No hay comentarios:

Publicar un comentario