Fotografía de Gabriela Pelosi
Simone Homem de Mello
Nació en São Paulo (Brasil) y reside en Berlín, donde actúa como libretista de ópera.
Simone Homem de Mello es poeta, libretista y traductora literaria. Su poesía está publicada en los libros Périplos (2005) y Extravio marinho (2010), así como en antologías brasileñas y extranjeras. Ha escrito los libretos de las óperas Orpheus Kristall (composición de Manfred Stahnke, Munich, 2002), Keine Stille auβer der des Windes (composición de Sidney Corbett, Bremen, 2007) y UBU – Eine musikalische Groteske (composición de Sidney Corbett, Gelsenkirchen, 2012). Como traductora, se dedica a la poesía moderna y contemporánea en lengua alemana y a la obra del narrador austríaco Peter Handke. Tras casi dos décadas de permanencia en Berlim, Alemanha, vive - desde 2011 - en São Paulo, la ciudad donde nació.
KOUROS
los ojos
(del visionario)
han visto lo que acaba de
grabarse en la piel:
acostado en el suelo
mármol
semilapidado,
se disimulan tantas
curvas del relieve,
olvidado por el cincel.
Divaga
(lisa malicia,
la que sus labios
acaban de esbozar)
al alcance
de las manos aún
poco después de
la piedra romper,
quien la esculpía
se ausentó
a medio camino:
y él,
tosco,
en el descampado.
Del mármol, grafía
marca trazos ausentes,
su cara, otra,
a contraluz. bajo un sol
eclipsado,
obscurece: de pronto,
él,
ofuscado por la sombra
interina
(que tanto se piensa
infinita cuanto pasa),
sin recuerdos
de cada haz de luz
visto ya.
Aquel instante siempre sin plazo:
lapso del resto,
no consentía
a nadie después –
en cuanto
el Houros de Naxos
duerme en Melanes,
bajo árboles tamariscos.
Aquella sombra lo cegó.
y la boca, entreabierta,
deletreó
(los labios hablarán)
que el éxtasis
es un corte.
Selección e introducción de Claudio Daniel.
Traducción de Leo Lobos.
Este artículo fue publicado en el Nº2 año 2 – Noviembre de 2007 Revista El Navegante. Escuela de Literatura. Universidad del Desarrollo. Chile
EL CUERPO DE LA LETRA
el cuerpo de la letra
para guillerme mansur
del fondo del ámbar tal vez
la ternura de los ojos
la ternura de los ojos
que leen
la A
ser dicha,
lo que el alfabeto tiene de antípoda,
lo ágrafo del plomo, su grave
retroletra
convertida, ella,
por tierno gesto en voz, en eco, en vórtex sonoro:
el no saber de dónde venir de los signos,
la marca de agua bajo a ponte seca,
las interlíneas cojas de los tejados
y lo Q de eso
emerge del blanco sin margen:
tal vez en el rastro felino de las serifas
tal vez la sombra
de ese mucho tanto
algo pulsa el cuerpo
de la letra:
dentro de una mansarda,
en lo íntimo del mineral,
bien al fondo
de ouro preto
ser dicha,
lo que el alfabeto tiene de antípoda,
lo ágrafo del plomo, su grave
retroletra
convertida, ella,
por tierno gesto en voz, en eco, en vórtex sonoro:
el no saber de dónde venir de los signos,
la marca de agua bajo a ponte seca,
las interlíneas cojas de los tejados
y lo Q de eso
emerge del blanco sin margen:
tal vez en el rastro felino de las serifas
tal vez la sombra
de ese mucho tanto
algo pulsa el cuerpo
de la letra:
dentro de una mansarda,
en lo íntimo del mineral,
bien al fondo
de ouro preto
O CORPO DA ESCRITA
o corpo da escrita
o corpo da escrita
para guilherme mansur
do fundo do ámbar talvez
o brando dos olhos
que leem
o A
ser dito,
o que o alfabeto tem de antípoda,
o ágrafo do chumbo, sua grave
retroescrita
revertida, ela,
por terno gesto
em voz, em eco, em vórtex sonoro:
o não saber de onde vir dos sinos,
a marca d’água sob a ponte seca,
as entrelinhas mancas dos telhados
e o Q disso
emerge do branco sem margem:
talvez no rastro felino das serifas,
talvez a sombra
desse muito tanto
algo pulsa o corpo
da letra:
dentro de uma mansarda,
no íntimo do minéiro,
bem no fundo
de ouro preto
.
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