sábado, 18 de diciembre de 2010

2506.- ALI AL SHALAH

Poetas: Adnan Al-Sayegh, Ali Al-Shalah (Iraq), Dorin Popa (Romania),
Joumana Haddad (Lebanon), Hilmi Salem (Egypt).



Ali Al-Shalah Babilonia, Irak, 1965. Estudió Literatura en Bagdad, Amman y Berna. En 1997, luego de la censura de uno de sus libros, se exilió en Suiza, donde fundó en 1997 el “Centro Cultural Árabe-Suizo/Galería de la Tierra”, y en el 2000 el Festival Internacional de Poesía “Al-Mutanabbi”, actualmente el único festival internacional de poesía árabe en Europa, ambos en Zurich, y en 2003 el “Centro Cultural Árabe-Suizo/Galería de Bagdad” en la capital iraquí, actualmente el único centro cultural que funciona regularmente en Bagdad y Babilonia. Colabora en diversos diarios y revistas árabes, entre otros: “Asfare” y “Al-Finique”. En 2003 recibió el “Premio de Poesía Árabe del Festival As-Sila” en Marruecos. Publicó varios libros de poesía y de crítica sobre la literatura moderna árabe. Su poemario más reciente es: Gurub Babili–Babylonische Dämmerung, bilingüe: árabe-alemán, en co-traducción alemana del autor iraquí.



Poemas de: Ali Al-Shalah (Irak)

Amuleto

Hace dos años,
cuando opté por el oficio de emigrante,
dejé en una libreta verde mi retrato.
Así no perdí la cara.
Fui el único que deseaba
ser repulsado en la frontera.
Mi personalidad es como fue
y la extranjería no cambió mis predilecciones.
Fui adicto a la hora de Bagdad.
Me la llevé en mi reloj y en mis datos.
Surtí todas las horas
según el horario de Bagdad.

Un suelo natal
donde las datileras nunca duermen,
los ojos se caen de cansancio.

Un suelo natal
cuya pasión sólo nosotros conocemos,
cuando el amor envuelve la voz de la locura.

Un suelo natal
cuyos tormentos no revelamos jamás,
sin embargo, los deseamos.

Acudimos,
tan pronto llama su voz
pues no cuestionamos al oído por quién clama.

Un suelo natal somos todos juntos,
también los jardines son sitios del destierro.
Sentimos tanta nostalgia,
que hasta amamos sus ladrones,
los borrachos y el calor del verano en las celdas,
las putas, los conformistas y refutadores,
a los espías y las cárceles.

Un suelo natal
no parcelable
como un mapa.
Es nosotros,
cada iraquí es Irak.
¿En cuántos trozos más pretenden partirlo?
Un suelo natal
cuyo emblema somos nosotros.

Abarca en su ser
el amor de los kurdos,
la erudición de los sunitas
y el desconsuelo de los chiítas.
Un suelo natal somos nosotros.
Yo soy un suelo natal.

Amman, 1992








Confirmación

Necesitamos mil profetas
Para probar que en la tierra
Hay algo de bondad
Pero necesitamos un solo dictador
Que pruebe que la tierra
Toda la tierra es un infierno.
El umbral de casa lloró
Cuando me vio
Y gritó: ¿por qué has venido?
He perdido mi cara
Y lo que conocía me hizo perder
¡Renegó de mí... a quién vi!
Y cuando me desperté en la patria
Para aliviar mi temor
Imaginé tu puerta..
Como una casa.

Me convertí en adicto a la hora de Bagdad,
En mi reloj
Luego la até a mi lazo
Y empecé a conjugar todos los tiempos
En la hora iraquí.

Traducciones de Jona y Tobías Burghardt



REVISTA PROMETEO

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