ADRIANA JIMÉNEZ QUESADA
Modelo 1981. Nació en San José de Costa Rica, Paso Ancho. Estudió Dirección de Empresas e Inglés; actualmente cursa Filología Española en la UCR. Da clases de español para extranjeros y es asistente en lexicografía. Tiene alrededor de siete años de formar parte del taller literario Don Chico Zúñiga, dirigido por Henry López. Ha participado en algunos recitales de poesía y ha publicado en La Frontera del Ocio y La Malacrianza, ambas secciones del Semanario Universidad.
Poemas
Despierto.
Mientras me asomo por la ventana,
paralelo a la sonrisa
que se va manifestando
en mi rostro,
aprecio cómo la dama mortal
pisotea los cuerpos
en su jubilosa danza.
* * *
Jesús
pudiste ser el hombre perfecto,
pero sos un dios incompleto:
nunca perdiste una esposa,
ni tuviste hijos que se volvieron cuervos,
tampoco fuiste un anciano inútil;
y no te tomaste la molestia
de haber nacido mujer.
* * *
Eres mi muralla contra la
elocuencia de los Adanes
y el cristo mentiroso
que yace en tantos fariseos.
Cómplice de mis depresiones
y sueños prohibidos.
Destiérrame
de tanta hipocresía.
Haz que nuestra explosión orgásmica
destruya sus templos.
Mi amado Adán
I.
Tu lengua recorre
mis cerros
mi caverna
Siento tu árbol
grueso
fuerte
alto
rozando mis
paredes húmedas,
arrastrándome al Apocalipsis:
Mi amor es falaz
y tú,
sólamente
un ciclón
en mi sobriedad.
II.
Me templas
hasta los huesos
con tu sádico despecho
Mientras se quiebra tu voz
sólo ante mi presencia
Gracias a quien sea
prefiero malearme
con tu Dios y tu mundo
que lamer mierda de tu mano
como Eva,
tu muñeca.
III.
Rasgué
tu corteza
perdiéndome por tu
tronco húmedo.
Conquisté
tu copa rosada.
Sentí
mis montes
pringados de savia,
mis colinas,
el peso de tu
rostro cansado.
Y todo esto
en aquel paraíso
donde nunca
te hice el amor.
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