viernes, 3 de septiembre de 2010

AÏCHA BASSRY [868]



AÏCHA BASSRY 


Nació en Settat, Marruecos, en 1960.


Licenciada en letras y lengua árabe por la Universidad Mohamed V de Rabat.Fue profesora y luego Secretaria en la redacción de la revista educativa del Ministerio de Educación Nacional Miembro de la casa de la poesía. Miembro de la Unión de escritores de Marruecos.


Ha publicado los libros: Tardes, 2001; Insomnio de los ángeles, 2003; Un balcón a oscuras, 2004; Noche frágil,  2007; El dialogo de la chimenea: cuadros del artista Abdellah Al Hariri, 2009; Mi amigo el otoño.  Cuadros del artista Moa Bennani, 2009; La soledad del pájaro, 2010; Noches de seda, 2013; Las nadadoras en la sed, 2015.



Visión poética:




“Yo escribo no para luchar violentamente contra la vida, sino para protestar de una manera artística. La poesía es mi segunda vida. Cuando lo cotidiano me aprisiona, la poesía es mi único refugio. Escribir poesía es un estado de ánimo antes que un juego de palabras” (Entrevista con Hansa Bekri Lamrani, para el nº 61 de Arcade au Femenin, sobre las poetisas de Marruecos)

“Cercana a las sensaciones primitivas, a los olores, a las cosas de la vida. Ella aviva su ánimo tanto como sus sentidos; y allá donde otra pluma hace el inventario heteróclito de las cosas, Aïcha Bassry transforma los objetos más familiares en imágenes deslumbrantes con muchas elipses y trabajo de concreción. Ella responde a la esencia de la poesía. Sin retórica ni clichés, sólo necesita un mínimo de palabras para decir lo esencial, las grandes alegrías simples que pueden procurar el sueño, el viaje y el amor del mundo”. Hanane Derkaoui, en un artículo aparecido en Libertation Maroc.





Consejos para amar a las mujeres.


Conviérteme en amuleto de tu pecho.
Te protegeré del pecado.
Silencia tu lengua. Habla con el corazón.
Se te revelarán mis secretos.
Tómame como soy, una mujer.
Te devolveré a tus orígenes,
a tus raíces,
a las aguas de tu esencia.
Persigue mi perfume.
Ten paciencia ante mis enigmas.
Qué hombre antes de ti
sondeó los secretos de una mujer.
Sé el nectar que irriga mis raíces.
Poda lo sobrante de mis ramas:
me abriré, flor eterna, en tus palmas.
Píntame: sombra de tus nubes,
lloveré de pudor
cada vez que tu aliento me roce.
Acumúlame: lágrima en tus párpados,
fluiré cuando el arbol de tu tristeza florezca.
Escóndeme como contraseña en tus líneas,
como un grano de fragancia en tu tinta,
memoriza mi nombre,
mantenlo secreto:
el poeta que revela el nombre de su amada
anuncia la muerte del poema.
No te fíes de la miel que fluye de mis labios:
dolor para tus heridas son sus gotas.
Antaño, capturé mi rostro en el espejo del río,
me cautivé de mi hermosura y te amé,
eres el hijo de la abundancia de mi deseo.
¡Ten cuidado!
Si dejas escapar de las manos mi fragilidad,
seré tu eterno sufrimiento.

A un poeta

Los versos son tu labor,
amigo,
y necesitas la palabra tierna...!
Restaura nuestras heridas...
Tu frío hablar
me hace temblar.


Vida

Yo no viví:
sólo
fui vivero
de otras vidas.


Sumisión

¡Cuidado!
Descálzate
en el umbral del corazón.
¡Cuidado!
Bajo la ceniza del cuerpo
están los restos de unos amantes
que eligieron morir
en la memoria.
Para ellos escogí
mi blanco silencio
como elegía.


Egoísmo

Da igual,
préstame un poco de tu egoísmo,
para que sea
tu lágrima
sólo una vez.


Restauración

¿Por qué me ubicaste en la nada?
Ten un poco de femineidad
para volver a mí misma
cuando sea tuya.


Pregunta

Le preguntó:
¿Aún queda algo
seductor en mi jardín?
Sobre el perchero
colgó su pregunta,
y se marchó.


Silencio

Tu silencio
me atormenta.
Habladora soy
y mis gestos
me divulgan.


Perfume

Un poco de almizcle
y de ámbar,
una gota de esencia de rosas,
un grano de clavel,
una hoja de alheña.
Es la mezcla de su perfume,
que olvidó
en el ascensor.


Porque he sido

Porque
he sido la brisa
que reanima su pecho.
Porque adoraba la tierra
que mis pies pisaban...
Como polvo de camino,
me sacudió,
y se fue.


Flor

La flor
que tanto
busqué,
la hallé por sorpresa
en un restaurante chino.
Entre mis dedos,
se asustó.
En mi mano,
entre la línea de la vida y la muerte,
distraídamente, se desmayó.
En el maletín, se expandió su perfume.


Un beso

¡Dulce es
este beso!
Si no fuera por el sabor
de la despedida en los labios.


Celos

Con sus dedos,
con sus labios
con su voz tambaleante de embriaguez,
pintó una mujer
para su poema.
¡Qué preciosa es
su mujer / poema!
A escondidas,
alargué la mano;
de su pecho
arranqué el corazón,
lo puse cerca de mí,
sobre el sillón,
para embriagarme con el poema.


Mañanas abandonadas

Te echo de menos
cuando los pájaros picotean una vieja llaga
…y me entristezco.
Te echo de menos
entre el murmullo de las hojas de otoño
y la suave lluvia.
Te echo de menos
cuando una bandada de mariposas aburridas
huye de mis manos.
Te echo de menos
cuando se despreocupa de mí
la cigüeña del minarete de enfrente
pelando una naranja a su pareja.
Te echo de menos
cuando se juntan las mañanas
abandonadas en mi lecho.
Te echo de menos
cuando las lágrimas se congelan
en mis párpados.
Te necesito, brisa cálida,
para que hagas llover.
Te echo de menos
cuando la noche cree en las calumnias
de la noche
y abandona mi terraza.
Cuando el corazón se convierte en buzón
de cartas que nunca llegan.
Te echo de menos
cuando se disuelve el silencio
y, en su soledad, la habitación se pudre.
Te echo de menos…
Cuando la pérdida se convierte
en la eterna canción
de una vida diminuta.


Pasión marchita

Dos copas vacías,
restos de comida sobre la mesa,
velas marchitas sobre la sábana roja.
Colillas desperezándose en el cenicero.
Un pendiente vaga entre los pliegues
de la sábana en busca de su semejante.
Un mechón borda la blancura de la almohada…
Los ojos del alba espían dos cuerpos dormidos.
Dos copas vacías,
dos pájaros picotean el cristal de la ventana.
El ruido del cerrojo tardó
…y el olor a café.
Si no fuera por el pudor,
habrían bebido el brindis de anoche.
Si no fuera por la virtud,
se habrían servido de la desnudez de los cuerpos
para taparse,
y como alas para volar de noche.
Dos copas vacías,
dos cuerpos reluciendo…
La luz del alba barre
los despojos de la noche sobre la alfombra.
La gata de los vecinos se cuela en la habitación.
¿Debe despertar este alboroto,
o dejarlo saborear el placer de anoche?



Tolerancia  en colores

(A mi hija)  

Si llega la primavera 
Y te cautivan los colores para que pintes un cuadro, 
Que sea un cielo azul brillante 
Sin una nube.

Con un toque de pincel, abre un hueco de luz 
Para que pase un rayo de certeza a tu pequeño corazón: 
No hay barreras entre los niños y las palabras de Dios.

Si pintas pájaros volando, 
Que sea una bandada, 
Para que no pase ningún avión bombardeando 
Hospitales o casas habitadas.

Si pintas un sol, 
Insiste sobre el amarillo ardiente, 
Para que el calor alcance las lejanas cabañas 
Allí al borde del río.

Si llega la primavera, 
Te cautivan los colores, 
Y pintas un hogar con chimenea 
Y elegantes cortinas, 
Que sean sus ventanas abiertas sobre la mar: 
Sólo el olor del mar purifica las almas contaminadas 
Sólo las olas limpian 
Los pecados del hombre. 
Sobre la puerta, 
Pon una media luna, una estrella y una cruz 
Para que no dude un transeúnte 
En llamar a la puerta de tu corazón.

Si llega la primavera, 
Te cautivan los colores 
Y pintas un jardín para la casa 
Y una niña con trenzas rojas 
Jugando entre viveros de rosas, 
Cércalos con alambre 
Para que no la engañe el lobo. 
Sobre el tendedero, cuelga un pañuelo blanco 
Para que no se declare la guerra entre los colores de tu cuadro.

Si pintas una mariposa bailando entre flores, 
Que sean sus alas de plata 
Y su baile signo de humildad hacia la hierba 
Y no adoración a la luz.

Si pintas un á rbol, 
Que sea de un verde denso 
Y bien enraizado 
Para que no lo arranque un viento pasajero.

Si pintas un río, 
Que sea de azul claro 
Y desemboque en el mar y no en una alberca.

Si llega la primavera 
Y no encuentras una madre, 
Pinta en un rincón del cuadro 
Viveros de claveles y jazmines: 
Aquellos eran tu madre.

Si llega la primavera 
Y te cautivan los colores para que pintes un cuadro, 
Que sea con colores brillantes, 
Un cuadro acogedor tal como tu corazón, 
Sin marco 
Para que quepa el mundo entero.



Pequeñas preguntas

Anoche, en el balcón 
Se sentaba a mi lado. 
A veces jugaba con su muñeca 
Y a veces 
Altera mi extravío 
Con interminables régentas. 
- Mamá ¿Qué es la luna?
- Cariño, la luna es el techo de los enamorados,
Y la floresta nocturna de los pájaros. 
- ¿Y las estrellas? 
-  las estrellas son el resto de la luz, 
Colgado en el hilo de la noche iluminando 
El camino de los Ángeles que surcan el cielo. 
- Mamá, ¿Y los Angeles?
- Son los pájaros de Dios en el paraíso,
 Les pertenecen los campos abiertos 
De  la tierra y las escaleras del cielo. 
Alumbran los senderos de las almas que suben al cielo.

Inquieta, 
Peinaba el pelo de su muñeca, 
Y de vez en cuando contemplaba el cielo. 
¿Y Dios? Mamá, 
¿Donde reside? 
- En tu  pequeño corazón cariño,
Si lo abres lo encontrarás. 
- Pero mi corazón es tan pequeño
Donde no cabe más que tú. 
- Hija, 
Ni la tierra ni los siete cielos son amplios 
Para Dios 
 Pero sí en el corazón humano. 
Ten cuidado, 
No lastimes el corazón de un ser humano,  
Sin darte cuenta, puedes lastimar a Dios .


Chama

Señaló 
Con su pequeño dedo : 
“Quiero esta uva”  
 “No es real, 
Cariño”. 
“Quiero una granada” 
“No es real mi pequeña” 
Pataleó, 
Araño, 
durmió con lágrimas en los ojos. 
Al despertar, 
fresca como la mañana, 
se desperezó. 
Con inocencia infantil 
confesó: 
“Mamá, 
en mi sueño 
   me comí el cuadro”.



El puente japonés*

Allí había vida: 
La hierba estaba alegre por su esplendoroso verdor, 
El sol brillaba al rozar el agua, 
Las lilas imploraban el cielo, 
El puente estaba exalto por abrazar la cintura del arroyo… 
Pero algo faltaba, 
…había un vacío en la parte izquierda, 
En el inferior del cuadro, 
Mi bolso dejado sobre la hierba 
Indicaba que allí estaba yo… 
¡Quizás el pintor se olvidó de pintarme! 
¡Quizás la sombra devoró toda mi blancura! 
¡Quizás me acordé de que no era más 
Que sombra de un cuerpo pasajero 
Y cuando él se fue, yo me fui también!

                        *Cuadro del artista francica Claude Monet(1840-1926)



La inquietante hora de espera

¿has probado? 
¿has probado prepararte para el amor? 
Sacar al corazón de su oscuridad, 
descubrirlo al sol, 
preparar tus labios para confesar, 
bañarte en la luz de la luna, 
sembrar en tu cuerpo, campos de lila, 
hacerlo elegante, 
perfumar tu espera, 
sentarse frente a la entrada, 
precisamente en el sofá del vestíbulo, 
y sospechar en el reloj colgado de pared. 
Has probado 
embellecerse para una sombra que no conoces. 
Esperar un alba que no alcanzas. 
Has probado prepararte para el amor 
en los extremos grados 
de la muerte?



Inmunidad del dolor


         ( El olvido es la única venganza y el único perdón.)
                                                       Jorge Luis Borges


No tengas miedo,
son días
o tal vez meses,
y me curaré de las picaduras de abeja.
Me enseñó la vida
que nada poseo,
y por despecho de esta vida
me enseñé a mi misma que nada me posee.
Me bauticé hija del viento
a donde va, voy.
De las pérdidas en mi boca
el gusto salubre 
de las algas migratorias.
Si algún día gano dudo de mi misma.
Los desengaños tienen el olor a vainilla en la memoria
-olor a primer amor-
y si venzo algún día
dudo de la vida.

No tengas miedo
son días,
o tal vez meses 
y me curaré de las picaduras de abeja.
Tal vez lloraré un poco en las largas noches,
quizás me dolerá el néctar calcinado en mis pechos,
quizás sentiré el dolor de la ausencia,
y en mis labios, la deliciosa 
miel añorará sus labios.
Pero inevitablemente olvidaré,
y hollaré cada lágrima
anhelante, arrepentida
que caiga a mis pies.
Olvidaré todo aquel dolor:
la fecha del primer encuentro,
el puerto de la despedida,
el primer estremecimiento
el sabor del beso.
Y perdonaré al cielo sus falsas promesas,
como comprenderé el deseo de los gorriones a cambiar de nidos.
Olvidaré
inevitablemente olvidaré
incluso el nombre del hombre,
y no recordaré más que este poema.

Y en un otro cruce
me encontraré a mi misma,
la saludaré,
luego la felicitaré por el seguro regreso.
Le leeré la crónica de este amor,
Y la preguntaré: 
¿Cuál de los dos fue más precisa y más creativa
para describir el dolor,
la prosa o la poesía?


TRADUCCIÓN: ABDELLATIF ZENAN



1 comentario:

  1. Maravilla de poeta. Concisa, contundente, rotunda y docta.Un gran placer haberle conocido en Encuentro de Poetas del Mundo en Chile, y otro mayor aún, haber compartido un bello día en su casa. Rabat. Marraquech. África, en junio de 2011

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